Joan Matabosch: ¡°Soy mortierista ac¨¦rrimo¡±

Joan Matabosch (Barcelona, 1961) est¨¢ feliz con su nombramiento como nuevo director art¨ªstico del Teatro Real. Pero lo que estaba viviendo como un proceso normal de selecci¨®n para suceder a Gerard Mortier se ha convertido de golpe en una crisis abierta en el coliseo madrile?o. La enfermedad del gestor belga, sus pol¨¦micas declaraciones en las que denunciaba que el Ministerio quer¨ªa imponer a un espa?ol para relevarle y su fulminante destituci¨®n han enrarecido el ambiente. Pero al todav¨ªa responsable del Liceo, que ha empezado con buen pie plant¨¢ndose ante las injerencias pol¨ªticas, se le ve con fuerza para afrontar la situaci¨®n.

Pregunta. ?Cu¨¢ndo se incorporar¨¢ a su nuevo trabajo?

Respuesta. El acuerdo es para que sea de inmediato, pero con flexibilidad para facilitar que en el Liceo haya un proceso de transici¨®n. Estar¨¦ durante un tiempo gestionando las pr¨®ximas temporadas del Real y programando las futuras, y cuidando de que en el Liceo la temporada en curso se desarrolle con normalidad.

P. ?Y qu¨¦ plazos manejan en el Liceo para sustituirle?

R. Lo normal ser¨ªa que el proceso fuera entre noviembre y marzo. Opino que la incorporaci¨®n deber¨ªa ser flexible entre marzo y septiembre. Pero no me corresponde a m¨ª.

P. Con este doble cargo se convertir¨¢ en el director art¨ªstico m¨¢s poderoso de la historia de la ¨®pera en Espa?a.

R. A m¨ª me dijeron que sustituir¨ªa a Mortier en el momento en que ¨¦l dejara el cargo. En principio, en 2016. Pero se modific¨® por un imprevisto, su enfermedad, aunque luego haya otros temas que yo desconozco. Ahora hay una inc¨®gnita sobre si podr¨¢ gestionar la temporada en curso o no. Pero mis funciones en un teatro y en el otro son diferentes.

P. Mortier ha sido destituido, seg¨²n se explic¨®, por unas declaraciones que hizo a EL PA?S. La situaci¨®n abre una crisis en el teatro inesperada. ?Le inquieta esta situaci¨®n?

R. El Real tiene que resolver la situaci¨®n con Mortier. Y yo no me debo meter. Gran parte de lo que est¨¢ pasando lo desconozco. Se debe resolver de una forma pactada, y me consta que est¨¢n hablando y que ¨¦l tiene una actitud que hace posible resolverlo.

P. ?Se ve conviviendo con ¨¦l este a?o?

Defiendo la ¨®pera como un arte alejado del consumo banal de entretenimiento

R. Vengo a sustituirle en el momento en que se marche. Pero si hay un acuerdo para que mantenga alg¨²n tipo de relaci¨®n con el Real esta temporada, para m¨ª ser¨¢ un honor trabajar con Mortier.

P. Se ha dicho que su nombramiento era una imposici¨®n del Ministerio de Cultura, que quer¨ªa a un espa?ol. ?Qu¨¦ opina?

R. No me consta que sea as¨ª. Seg¨²n la informaci¨®n que me facilitaron el presidente del Patronato y el Director General, en el proceso ha habido nombres espa?oles y extranjeros y este tema no ha jugado ning¨²n papel en la decisi¨®n. Ser¨ªa absurdo que se tuviera en cuenta eso. Tan absurdo es decir que tiene que ser un espa?ol como que no puede ser un espa?ol.

P. El posterior intento de imposici¨®n por parte de Wert de un director musical parece darle la raz¨®n a Mortier en su denuncia de injerencias.

R. No veo qu¨¦ relaci¨®n tiene. El proceso del director art¨ªstico ha sido normal. Luego el Real ha hecho prevalecer que tiene que haber una independencia de las decisiones art¨ªsticas.

P. Llega con dos temporadas m¨¢s dise?adas por Mortier. ?C¨®mo gestionar¨¢ ese legado?

R. Ser¨¢ una incorporaci¨®n progresiva. No llego para arrasar nada. No es mi estilo. Adem¨¢s, yo soy un mortierista ac¨¦rrimo. Estamos hablando de temporadas dise?adas por uno de los programadores m¨¢s extraordinarios y maravillosos que ha habido nunca. Un maestro. El proyecto pasa por asumir todo lo bueno que ha tenido su paso por Madrid.

P. ?Como qu¨¦?

R. La defensa de la ¨®pera como un arte complejo, que se aleja del consumo banal de entretenimiento. Y por eso tiene sentido que existan los teatros de ¨®pera. No son un museo, ni un desfile de estrellas. La b¨²squeda de espect¨¢culos trabajados, con directores musicales que tengan algo que aportar a las obras. Todo eso lo ha hecho y hay que mantenerlo. Es un legado extraordinario.

P. ?Y a partir de ah¨ª?

R. Mortier tiene las cosas muy claras. Va en l¨ªnea recta y sin concesiones. Y a veces un peque?o viraje permite incorporar al proyecto a gente que quiz¨¢ no lo hubiera hecho. La diferencia no est¨¢ en lo fundamental, sino en los matices que dan al discurso un aspecto diferente. El p¨²blico ha sido educado en una determinada tradici¨®n. Se la puede contradecir, pero hay que tenerla en cuenta.

P. ?Cu¨¢les son esos matices?

R. Abrir el repertorio a obras de Haendel, que ha escaseado mucho, o al repertorio belcantista rom¨¢ntico con un Donizetti, un Bellini¡­ El repertorio se puede hacer hoy con un potencial teatral inimaginable hace 20 o 30 a?os. Antes iba asociado al culto a la mitoman¨ªa y entiendo esa resistencia. Ya no es as¨ª.

P. ?Cambiar¨¢ el tipo de directores de escena?

R. Los que ha tra¨ªdo Mortier son de los mejores. Pero hay otros. Abriremos el abanico porque es una cosa sana e higi¨¦nica. Adem¨¢s, donde m¨¢s explotan los esc¨¢ndalos es cuando se hace el repertorio con este tipo de directores. En la ¨®pera los l¨ªos se forman m¨¢s con Lucia de Lamermoor que con Wozzeck.

P. Durante su etapa en el Liceo ha recibido muchos elogios y una cr¨ªtica muy repetida: el escaso nivel de la orquesta. ?Por qu¨¦ no la ha mejorado?

R. El Liceo ha vendido muy mal su orquesta y su coro. Se ha pasado a?os diciendo que no estaba bien y eso acaba calando. Tambi¨¦n hay un problema objetivo que tiene que ver con la historia de la instituci¨®n. Entre 1994 y el 1999, el teatro estuvo reconstruy¨¦ndose por el incendio y el personal estuvo seis meses de cada uno de esos a?os en paro. La mejor manera de cargarse una orquesta. En 1999 se pens¨® que hab¨ªa que darles un tiempo para que volvieran a su nivel. Deb¨ªa haber una renovaci¨®n y un crecimiento. Pero con la crisis, este proyecto est¨¢ siendo m¨¢s dif¨ªcil. Es una orquesta muy mejorable, pero hay unas causas objetivas.

P. ?Qu¨¦ le parece la del Real?

R. Ha mejorado much¨ªsimo. Tiene un gran nivel y es una de las cosas que Mortier ha hecho muy bien. Se ha demostrado que su opci¨®n [prescindir de un director titular] fue un acierto.

P. ?Seguir¨¢ as¨ª o fichar¨¢ a un director musical titular?

R. Ser¨ªa absurdo cambiar ahora. Las temporadas est¨¢n hechas y los directores contratados. Y no es urgente: el sistema funciona. En el futuro tendr¨¢ sentido hablarlo. Ahora mismo no hay trabajo para un director titular.