Obsesi¨®n por renacer

Dani Mart¨ªn ha elegido para la entrevista el lugar que le ha visto renacer, al menos ante las c¨¢maras. En ¨¦l parece sentirse como en casa. En el video de Cero, primer single de su nuevo ¨¢lbum, y el segundo de su carrera en solitario, el peluquero Isaac Salido va cortando con pericia el pelo del ex El canto del Loco (ECDL), mientras se va desgranando la letra que habla de borrones y cuentas nuevas. ¡°Ahora toca aprender c¨®mo dejar de querer, saber borrarlo bien, que igual que vino fue¡­¡± dice el estribillo de un tema que Mart¨ªn considera ligado a su propia biograf¨ªa y al momento que se vive ahora en Espa?a. Las tijeras avanzan, los tatuajes transitan por el brazo; en otro momento, Dani Mart¨ªn hace footing y corre hacia adelante¡­ Hasta que al final se mira en el espejo con gesto serio y lo vemos, con rasgos muchos m¨¢s pronunciados, lejos de aquella cara de redondeces juveniles de los a?os de ECDL, cuando vendi¨® m¨¢s de un mill¨®n de discos desde el lanzamiento del primero en 2000 hasta 2009. La banda se separ¨® un a?o m¨¢s tarde por el deseo de Dani Mart¨ªn y de su primo David Otero El Pescao, que hab¨ªa sido el guitarrista, de iniciar carreras individuales. ¡°Entonces me fui de casa¡­¡±, comenta Mart¨ªn en referencia a ese momento de disoluci¨®n. Ahora hay que amueblar un nuevo hogar. El cantante tiene hambre de madurez, aunque ese deseo parezca impuesto por la realidad, que ya cumple 36 a?os. Y ansias por ser amado. Y de renovarse, aunque esto suena a d¨¨j¨¢ vu en el panorama de lanzamientos de diversos cantantes y discos varios. Lo cuenta en la misma peluquer¨ªa de aire retro y cuidado de su video.

¡°Me he permitido echarme el pelo hacia atr¨¢s¡­¡±, dice de su nueva imagen, resultado del paso por ese proceso del que nos hace part¨ªcipes en el video, sin el flequillo que marc¨® los intensos a?os de aquel chico de aspecto s¨®lido y malote que con 17 le dijo a un amigo en un concierto de Extremoduro en el Palacio de los Deportes de Madrid que ¨¦l tambi¨¦n quer¨ªa llenarlo un d¨ªa con sus actuaciones. Tiene ese punto rockabilly ahora tan de moda. El verbo ¡°permitirse¡± se va conjugando en primera persona por aqu¨ª y por all¨ª a lo largo de la conversaci¨®n, suena raro, y deja la sensaci¨®n de que Mart¨ªn no hizo antes lo que quiso. ?C¨®mo? ¡°No es por comparar¡­ Haces y vives las cosas de otra manera, m¨¢s juvenil, m¨¢s de otro lugar¡­ Supongo que tiene que ver con la edad. Ahora he podido elegir, hacer las cosas con tiempo, trabajando el arte¡±, asegura de su experiencia actual en contraste con la que tuvo con ECDL. Pero a Dani Mart¨ªn le gusta establecer comparaciones: ¡°Sinceramente, el Canto fue como el noviazgo; esto es como el matrimonio¡­¡±. Y despu¨¦s de la boda llamada carrera en solitario no echa de menos al grupo y s¨ª a su primo, que ahora vive en Argentina. ¡°Mi disco ser¨ªa como una sobremesa de gente de mi edad despu¨¦s de cenar, estar tranquilo, hablar, disfrutar sosegadamente¡­¡±. Antes, "vives tan r¨¢pido que te da dolor de est¨®mago".

No es por comparar¡­ Haces y vives las cosas de otra manera, m¨¢s juvenil, m¨¢s de otro lugar¡­ Supongo que tiene que ver con la edad

Dani Mart¨ªn ha pasado este tiempo desde la publicaci¨®n de Peque?o en 2010 hasta, precisamente, Dani Mart¨ªn, viajando por Latinoam¨¦rica. Su nuevo ¨¢lbum lleva su mismo nombre, algo que sucedi¨® tambi¨¦n con el primero que lanz¨® ECDL, que igualmente portaba el del grupo. El cantante que inici¨® su recorrido en televisi¨®n a los 14 a?os como presentador del programa Ponte las pilas relata que, tras la grabaci¨®n en Estados Unidos, lo escuch¨® en el coche y pens¨® que ¡°era el primero¡± de su carrera. En la portada en la que se ve a un Mart¨ªn cabizbajo con las manos en los bolsillos hay un cierto eco de aquel The freewhelin¡¯ en el que Bob Dylan caminaba acompa?ado para presentar, entre otras, Blowin¡¯ in the wind.

La llegada de Dani Mart¨ªn ha estado precedida de muchos gui?os al p¨²blico: teasers, un making of del proceso de grabaci¨®n, una semana en la que las canciones estuvieron disponibles en iTunes de forma gratuita. Y su vuelta a Twitter tras un a?o de silencio, ya que, explica, ¡°sent¨ªa que no ten¨ªa nada que contar¡±. Ya hab¨ªa contado mucho y lo hab¨ªa hecho con libro incluido: en 2011 public¨® So?ar no es de locos. ¡°Quer¨ªa que la gente se enamorara de mi discurso, he intentado que fuera part¨ªcipe¡­¡±. Le preocupa que se haya escuchado el ¨¢lbum y se deja claro antes de la entrevista que las fotograf¨ªas las facilitar¨¢ la discogr¨¢fica.

Mi disco ser¨ªa como una sobremesa de gente de mi edad despu¨¦s de cenar, estar tranquilo, hablar, disfrutar sosegadamente¡­¡±.

Pero vuelta al viaje por tierras latinoamericanas. ¡°Me he juntado con otros compositores y por primera vez, aunque las letras sean todas m¨ªas, he compartido la m¨²sica con gente de Colombia, de M¨¦xico, de Argentina, de Estados Unidos, de Espa?a¡­¡±. En Puerto Rico vio a la banda que toca con Paul McCartney y logr¨®, a trav¨¦s del productor George Noriega (Shakira, Ricky Martin, JLo, Gloria Estefan), llegar hasta ellos. Despu¨¦s, ¡°se enamoraron de las canciones¡± y, como el ingeniero de mezclas Michael Brauer (Rolling Stones, Bob Dylan, Coldplay¡­) ¡°se bajaron los sueldos¡± para trabajar en la grabaci¨®n. Canta a d¨²o Por las venas con Joaqu¨ªn Sabina. ¡°La situaci¨®n es mala, pero existe una manera distinta de hacer las cosas¡­¡±, sentencia Mart¨ªn, que asegura que una rendija para la crisis del sector son medidas como ¡°bajar las entradas a 20 euros¡± en sus conciertos. "La m¨²sica tiene un valor, que no un precio", apostilla.

La edad de la madurez no est¨¢ exenta de aquello que dec¨ªa la letra de Ojos de gata de Los secretos: ¡°Me vuelvo vulgar al bajarme de cada escenario¡±. Dani Mart¨ªn la rememora para hablar de los espacios donde se siente seguro, ah¨ª, o ¡°con un papel y un boli componiendo¡±. De otra forma, es ¡°una persona superinsegura y supervulnerable¡±. Ya tiene 36 a?os, todo ha empezado de nuevo, y de nuevo surgen las posibilidades de la tolerancia con uno mismo dibujada por un antes y un despu¨¦s. ¡°Me he permitido ser lo que soy, un chaval que canta canciones, nada m¨¢s¡±. Dani Mart¨ªn ha interpretado una decena de pel¨ªculas y series de televisi¨®n. ?Qui¨¦n es en realidad, qu¨¦ se considera? ¡°Soy el hijo de mis padres, a los que a¨²n necesito mucho¡±.