Rafael Ortiz, cuarenta a?os de revoluci¨®n silenciosa en el arte contempor¨¢neo

Al inicio de los a?os ochenta, a la ciudad de las marchas procesionales y el flamenco, del Barroco y los conventos, le comenzaron a salir unos brotes contraculturales que pronto explotaron para convertir Sevilla en un icono de la modernidad. Sonaba Silvio y Sacramento, rock progresivo, las compa?¨ªas de teatro daban vida a los locales abandonados que se contaban por centenares en el centro de la ciudad, y los artistas pl¨¢sticos, pintores con poco m¨¢s de 20 a?os, se rebelaron contra el academicismo. ¡°A la pintura le falta cabaret, le sobra esp¨ªritu conventual, moralidad, trascendencia y muchas ¨¦ticas mal entendidas¡±, escribir¨ªa el artista cordob¨¦s Rafael Agredano en el n¨²mero cero de la Revista Figura, un referente incuestionable para el arte contempor¨¢neo espa?ol que naci¨® como un juego entre ese grupo de artistas que a¨²n eran estudiantes de Bellas Artes en Sevilla.

En uno de esos tantos edificios abandonados del casco hist¨®rico, en el n¨²mero 12 de la calle M¨¢rmoles, ¡°al lado de una librer¨ªa donde siempre andaba conspirando el Partido Comunista, y a los que Carmen Laff¨®n les hizo incluso un cartel¡±, abri¨® en esa Sevilla optimista y desmelenada de 1984 la Galer¨ªa Rafael Ortiz, levantada a pulm¨®n por la pareja formada por Rafael Ortiz y Rosal¨ªa Ben¨ªtez, j¨®venes de la misma generaci¨®n que aquellos pintores, que demostraron que la ciudad que hace de la defensa de la tradici¨®n una de sus se?as de identidad, pod¨ªa ser un foco de difusi¨®n del arte contempor¨¢neo. No una mera sucursal que se alimenta de lo que producen otros, sino una fuente que irradi¨® al resto del pa¨ªs los nuevos acercamientos al arte.

Cuarenta a?os despu¨¦s, son los ¨²nicos supervivientes de esa traves¨ªa en la que tambi¨¦n se embarcaron proyectos de enorme peso nacional, como Juana de Aizpuru y La M¨¢quina Espa?ola. ¡°Hab¨ªa mucha actividad cultural, muchas galer¨ªas, pero abr¨ªan y cerraban¡±, recuerda Rafael, ¨²ltimo basti¨®n del arte contempor¨¢neo en Sevilla con voz, presencia y protagonismo en el panorama nacional e internacional y que sigue apostando por colocar en el mapa a los creadores surgidos en el sur. Un alto porcentaje de la n¨®mina de artistas de la galer¨ªa son andaluces, ¡°pero es que un alt¨ªsimo porcentaje de los mejores artistas nacionales tambi¨¦n son andaluces¡±, recalca y defiende Rosal¨ªa Ben¨ªtez.

La llamada Nueva Figuraci¨®n madrile?a, por ejemplo, est¨¢ parad¨®jicamente formada por un importante n¨²mero de pintores sevillanos y andaluces que nacieron al calor de la galer¨ªa Rafael Ortiz, en un trabajo de apoyo y acompa?amiento a su trabajo que sigue siendo marca de la casa: Guillermo P¨¦rez Villalta, Chema Cobo, Luis Gordillo¡­. Pudieron nacer art¨ªsticamente gracias al trabajo silencioso y perseverante de estos dos galeristas. ¡°Ahora lo miramos con mucha satisfacci¨®n, estamos muy ilusionados por haber llegado hasta aqu¨ª, pero los comienzos fueron muy duros, mir¨¢bamos el balance del mes y nos consol¨¢bamos diciendo: bueno, hemos perdido menos que el mes anterior¡±, recuerda Rosal¨ªa con una sonrisa pl¨¢cida. Inventaron nuevos m¨¦todos de supervivencia, cuotas mensuales de 25 pesetas ¡°que artistas j¨®venes y nuevos coleccionistas se quitaban de una cerveza por la ilusi¨®n de poder comprar un cuadro. Eso ahora ya no pasa¡±, apunta la galerista: ¡°Hab¨ªa como unas ganas de sacar adelante no se sab¨ªa muy bien qu¨¦, algo que se percib¨ªa como un cambio, como una apertura a cosas nuevas, a ideas nuevas, a ilusiones nuevas¡±.

La de Rafael y Rosal¨ªa ha sido una revoluci¨®n silenciosa. Casi sin hacer ruido fueron evolucionando y pronto vinieron la firme presencia de la galer¨ªa en ferias nacionales e internacionales, la consolidaci¨®n y el prestigio de sus artistas, la aparici¨®n de nuevos lenguajes y nuevos creadores, que tambi¨¦n absorbi¨® este espacio, como la llamada Generaci¨®n del 2000, con Miki Leal y Rub¨¦n Guerrero como cabezas de cartel. Incluso la osad¨ªa de poner una pica en Madrid hace 12 a?os ¡ªR.O. Proyectos, en la calle Huertas¡ª que tambi¨¦n se ha consolidado en el mapa galer¨ªstico de la capital. Eso s¨ª, Rafael y Rosal¨ªa, a pesar de ¡°las continuas crisis¡±, nunca quisieron dejar Sevilla: ¡°Es nuestro compromiso con la ciudad, no hemos querido abandonar¡±.

De toda esta memoria, la de una singladura que comenz¨® con una ingenua inconsciencia y pudo evolucionar gracias a ¡°la resistencia¡± ¡ªcomo sostienen una y otra vez durante la conversaci¨®n¡ª dar¨¢ cuenta la exposici¨®n Un silbido al viento. 40 a?os de la galer¨ªa Rafael Ortiz, que se inaugura este martes en la vecina sala del Centro de Iniciativas Culturales (CICUS) de la Universidad de Sevilla. Ser¨¢n m¨¢s de cien obras las que se expongan, una por cada artista que ha formado parte de la familia Rafael Ortiz ¡ª¡°Con los que hemos mantenido una relaci¨®n muy estrecha¡±¡ª, y que se abre con un grabado de Picasso que form¨® parte de la primera exposici¨®n con la que abri¨® la galer¨ªa en aquel 1984. ¡°Fue lo ¨²nico que vendimos, lo compr¨® a plazos un artista joven y lo hemos podido recuperar de una colecci¨®n particular¡±, rememora Rafael.

Aun as¨ª, no ser¨¢ una muestra cronol¨®gica ni de sucesi¨®n de artistas, ser¨¢ una celebraci¨®n ¡°caprichosa¡±, recalca el galerista, que refleje el esp¨ªritu y la l¨ªnea de trabajo de la galer¨ªa a lo largo de estas cuatro d¨¦cadas ¡ª¡°Nuestra manera de ser¡±¡ª, aunque tambi¨¦n, de manera inconsciente, recoge tres grandes momentos generacionales de la pintura sevillana, la de los desaparecidos Carmen Laff¨®n, Jaime Burguillos, Gerardo Delgado y Teresa Ducl¨®s, entre otros; la explosi¨®n ochentera con Patricio Cabrera (otro de los artistas fundacionales de la galer¨ªa), Curro Gonz¨¢lez y Antonio Sosa; o la m¨¢s reciente con Jos¨¦ Miguel Pere?¨ªguez, Rub¨¦n Guerrero y Miki Leal. Pero tambi¨¦n muchos otros grandes artistas que Andaluc¨ªa ha dado para la contemporaneidad, de Jos¨¦ Guerrero y Manuel Barbadillo a Luis Gordillo; de Jos¨¦ Mar¨ªa B¨¢ez a Javier Buz¨®n, Manolo Bautista, Claudio del Campo, Juan Lacomba¡­ Y sobrevolando a todos ellos, el cordob¨¦s Equipo 57, de cuya reivindicaci¨®n y puesta en valor en el mapa art¨ªstico nacional ha tenido mucho que ver el trabajo de la galer¨ªa Rafael Ortiz. ¡°Siempre hemos intentado crear familias¡±, sostienen ambos.