¡®Homeland¡¯ busca volver a sus or¨ªgenes

Vuelven Carrie y Brody. Y con ellos, regresa la tensi¨®n, la ambig¨¹edad, la acci¨®n, la intriga y los dobles juegos. Homeland, una de las series m¨¢s adictivas de la actualidad, pretende recuperar con su tercera temporada el trono de serie del momento que se gan¨® con su sorprendente primera entrega y que mantuvo el a?o pasado gracias a altas dosis de adrenalina. La nueva tanda de cap¨ªtulos, que el canal Fox empieza a emitir hoy a las 22.20 horas, solo cuatro d¨ªas despu¨¦s de su estreno en Estados Unidos, retoma la historia dos meses despu¨¦s de los acontecimientos vividos en el final de la anterior temporada. Con Carrie destrozada psicol¨®gica y an¨ªmicamente, Saul ejerciendo como mando m¨¢s alto de la CIA, un organismo cuya funci¨®n empieza a ponerse en cuesti¨®n, y Brody desaparecido.

La segunda temporada de Homeland sorprendi¨® a los espectadores por el ritmo fren¨¦tico que imprimi¨® a la serie. Incluso desde algunos medios especializados se la tild¨® de inveros¨ªmil y no tardaron en llegar las comparaciones con 24, serie en la que Howard Gordon y Alex Gansa, creadores de Homeland, ejercieron como productores. La nueva entrega parece dispuesta a aminorar el paso y volver en parte a los or¨ªgenes de la serie con un regreso a los despachos de la CIA, a las obsesiones de la agente Carrie Mathison, personaje al que da vida la actriz Claire Danes y por el que ya ha conseguido dos premios Emmy y dos Globos de Oro, y al eterno misterio en torno a Nicholas Brody, ese ex prisionero de guerra que lleg¨® a congresista de Estados Unidos y del que, al principio, solo Mathison sospechaba que se hab¨ªa pasado al bando enemigo.

Lo que suceder¨¢ en los pr¨®ximos cap¨ªtulos es todo un misterio. Los responsables de la serie ya han advertido de que en Homeland puede ocurrir cualquier cosa. En esta nueva era de la ficci¨®n televisiva, ni siquiera los personajes principales se pueden sentir a salvo. En una conferencia de prensa, uno de los responsables de Showtime, cadena que emite la serie en Estados Unidos, dej¨® caer que la serie podr¨ªa sobrevivir sin alguno de sus protagonistas. De hecho, este verano, los guionistas revelaron que el plan original era que Brody, el personaje interpretado por Damian Lewis, muriera al final de la segunda temporada. Sin embargo, la cadena no permiti¨® que eso ocurriera. Otro dato ya conocido: Lewis, que lucir¨¢ nuevo aspecto, con la cabeza rapada, no aparece en los dos primeros cap¨ªtulos. Con todas estas pistas los guionistas de la serie parecen estar intentando demostrar que nadie puede estar seguro de lo que suceder¨¢.

Posibles salidas pero, tambi¨¦n hay incorporaciones al reparto habitual. En la nueva temporada, Saul Berenson, el personaje al que da vida el actor Mandy Patinkin, tendr¨¢ que hacer frente a sus nuevas responsabilidades en la CIA y a la creciente inestabilidad de su pupila Carrie, con la que se presume un posible conflicto de confianza. Para apoyar a Saul aparecer¨¢n m¨¢s en pantalla su mujer Mira (Sarita Choudhury) y el experto en operaciones encubiertas Dar Adal (F. Murray Abraham). Adem¨¢s de los problemas internos de la CIA, los nuevos episodios dirigir¨¢n la mirada tambi¨¦n a la reacci¨®n de la familia de Brody despu¨¦s de que este se haya convertido en una de las personas m¨¢s buscadas en Estados Unidos.

La serie, de la que Barack Obama se ha confesado seguidor y que se rueda en la ciudad de Charlotte (en Carolina del Norte), tambi¨¦n se ve afectada por la actualidad. Y no solo por las repercusiones de tratar la lucha de la CIA contra el terrorismo isl¨¢mico. Estaba previsto que los ¨²ltimos cap¨ªtulos de la nueva temporada se grabaran en Israel, pero el rodaje se tuvo que trasladar a Marruecos por miedo a un posible ataque debido al conflicto actual en Oriente Pr¨®ximo.

El misterio rodea a la nueva temporada de la serie. Envuelta en rumores, como los que hablan del enfriamiento en la relaci¨®n entre los actores protagonistas o las conjeturas sobre el futuro del amor imposible que une a sus personajes, Homeland vuelve a andar dispuesta a seguir dando que hablar y mantenerse como la serie m¨¢s adictiva de la televisi¨®n actual.