David Lynch: ¡°La meditaci¨®n trascendental mejora mi obra¡±
El cineasta clausura el martes el festival Rizoma de Madrid con una clase magistral La ¨²ltima pel¨ªcula del director, ¡®Inland Empire¡¯, es del a?o 2006
¡°Por fin voy a Madrid. A hablar de cine, de meditaci¨®n y de creatividad¡±. David Lynch: qui¨¦n le ha visto y qui¨¦n le ve. Esa amalgama de temas que ahora fascinan al director de Coraz¨®n salvaje, Terciopelo azul o El hombre elefante encontrar¨¢ su altavoz en Madrid en la tercera edici¨®n del festival Rizoma, cuyo esp¨ªritu defiende que todas las disciplinas culturales est¨¢n interrelacionadas entre s¨ª. Y Lynch, nacido hace 67 a?os en Missoula (Montana) es el adalid de la causa.
Como no pod¨ªa ser menos, la charla con el cineasta se celebra a la sombra de Mulholland Drive, la popular calle angelina perdida entre las monta?as que da t¨ªtulo a una de sus ¨²ltimas pel¨ªculas y el ¨¢rea en la que Lynch reside y tiene su estudio. En la entrada al visitante le recibe un montaje de im¨¢genes y sonidos donde es f¨¢cil reconocer fragmentos de Twin Peaks, serie de culto que se adelant¨® a la cacareada edad de oro de la televisi¨®n actual, una caja cerrada etiquetada con las palabras ¡°fotograf¨ªas turbadoras¡± y un espresso org¨¢nico David Lynch (s¨ª, tambi¨¦n hace caf¨¦). Ya conoce Espa?a, pero esta vez se siente ¡°como un ni?o con zapatos nuevos¡± ante un viaje donde no tendr¨¢ que promocionar una pel¨ªcula ¡ªhan pasado casi siete a?os desde su ¨²ltimo estreno¡ª o atender a las necesidades del marketing de Hollywood. Va a Madrid a compartir lo que m¨¢s disfruta, a divulgar lo que m¨¢s ama: Lynch clausurar¨¢ Rizoma con una clase magistral sobre la meditaci¨®n transcendental el pr¨®ximo martes 15. ¡°Tambi¨¦n amo mi trabajo. Amo el cine, las im¨¢genes, la m¨²sica, la arquitectura. Pero la clave est¨¢ en la meditaci¨®n transcendental. Es lo ¨²nico que mejora mi obra¡±, a?ade. Se le escapa una tos perruna que apaga entre cigarrillos y cerr¨¢ndose un poco m¨¢s la chaqueta ra¨ªda que viste, resguard¨¢ndose en el estudio del sol de justicia que cae en el resto de California.
¡°Despu¨¦s de ¡®Cabeza borradora¡¯ me v¨ª mirando a la pared, estaba hueco¡±
Adem¨¢s de transcendental, la obra de Lynch transciende todos los campos art¨ªsticos. En noviembre inaugura una exposici¨®n de pintura en Los ?ngeles, en Par¨ªs tiene actualmente una de fotograf¨ªa, sigue con su trabajo como lit¨®grafo y en Internet ya est¨¢ a la venta su ¨²ltimo ¨¢lbum musical, The big dream. Hay m¨¢s cosas, incluso planes cinematogr¨¢ficos, la parte de su obra por la que es reverenciado. Pero lo que religiosamente cumple desde hace 40 a?os, 20 minutos y dos veces al d¨ªa, es con la meditaci¨®n transcendental. Y de eso es de lo que quiere hablar. ¡°Yo tambi¨¦n pens¨¦ cuando The Beatles conocieron al Maharishi en 1967 que hicieran lo que quisieran pero que se dejaran de monsergas y se pusieran a componer¡±, reconoce con honestidad y una sonrisa c¨®mplice. Por aquel entonces Lynch quer¨ªa ser pintor, hab¨ªa empezado a rodar ¡°peliculitas¡± y ten¨ªa ¡°inter¨¦s cero¡± en cualquier otra cosa. Fue su hermana quien le hizo interesarse por la meditaci¨®n transcendental; no solo por lo que le dijo sobre el pozo de energ¨ªa, felicidad y creatividad que hay en nuestro interior sino por la seguridad que not¨® en su voz. ¡°Yo ya hab¨ªa hecho mi primera pel¨ªcula, Cabeza borradora, ten¨ªa todos los medios a mi alcance, controlaba un miniestudio, estaba en una posici¨®n perfecta en la industria y sin embargo me ve¨ªa mirando a la pared y si miraba dentro, el que deb¨ªa ser el hombre m¨¢s feliz del mundo estaba hueco¡±.
Lynch se pone como ejemplo de una transformaci¨®n que recomienda a todos. No importa la edad, la clase social o su cultura. ¡°Mientras seas un humano, la meditaci¨®n transcendental funciona¡±, asegura de una t¨¦cnica que mediante la fundaci¨®n que lleva su nombre ha educado a m¨¢s de 300.000 personas en 30 pa¨ªses. ¡°La meditaci¨®n transcendental es la t¨¦cnica que nos permite acceder la felicidad, al entendimiento, a las llaves del reino que est¨¢n en nuestro interior. Y cuando acabas te sientes rejuvenecido, las ideas fluyen, la creatividad crece gracias a este oc¨¦ano ilimitado, eterno e inmutable de conciencia que est¨¢ dentro de ti¡±, a?ade.
¡°Ya no hay cines de arte y ensayo, en
su lugar est¨¢ la televisi¨®n de pago¡±
Sin embargo, mientras desgrana su discurso, no puede dejar de pensar que su ¨²ltima pel¨ªcula, Inland Empire, data de 2006, y que desde entonces solo ha rodado cortometrajes y documentales. ?Le est¨¢ fallando la meditaci¨®n? ¡°Las ideas fluyen. He escrito un guion y tengo otros proyectos de los que no puedo hablar pero la industria del cine ha cambiado. Ellos solo hacen n¨²meros y mis pel¨ªculas no pueden garantizar los beneficios", admite con naturalidad. Ir¨®nica ausencia de un cerebro descrito como ¡°el hombre renacentista del cine moderno estadounidense¡±, un autor que populariz¨® el surrealismo en el cine. ¡°Ya no hay cines de arte y ensayo. En su lugar est¨¢ la televisi¨®n de pago¡±, asegura, y explica que admira Mad Men y Breaking Bad. ?Ve su futuro en ese medio? ?O en Internet? La pausa para dar una provechosa calada a su cigarro es larga. Tambi¨¦n la tos. ¡°El mundo digital es incre¨ªble y de una forma extra?a me ha devuelto a mi etapa de cortometrajista¡±, comenta riendo. ¡°Pero no es la gran pantalla. No es la misma experiencia. Y trabajar en filme, en pel¨ªcula¡ ?Es tan bello!¡±.
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