Una exposici¨®n recoge las tragedias de Herculano y Pompeya

La villa de los papiros es el nombre que recibe la casa particular de Lucio Calpurnio Pis¨®n Cesonino, suegro de Julio C¨¦sar en Herculano, cerca de N¨¢poles (Italia). En el a?o 79 d.C., esta propiedad y todas las de la zona fueron sepultadas por un manto de lava en la erupci¨®n del volc¨¢n Vesubio. A?os despu¨¦s, entre 1750 y 1765, el arquitecto e ingeniero Karl Jakob Weber realiz¨® las primeras excavaciones en la zona. Encontr¨® 1.785 rollos de papiro carbonizados, pero no quemados en la villa. Hoy, reconstruidos, se pueden visitar en una exposici¨®n que la Casa del Lector ofrece hasta el 23 de abril. A ra¨ªz de la muestra, la artista Marina N¨²?ez ha estrenado un mural inspirado en las fotograf¨ªas a¨¦reas de Pompeya, que representa una carta geogr¨¢fica.

Imposible no verlo, o al menos no pisarlo, ya que se trata de una imagen impresa en el suelo de 795x522 cm. Cuando el espectador entra en el pabell¨®n 14 de Matadero, justo en la entrada puede observar un gigantesco mural en el que hay representados tres ambientes: el volc¨¢n, la ciudad en ruinas y el mar. ¡°Es una exposici¨®n muy ambiciosa. He planteado una imagen a¨¦rea, una especie de cartograf¨ªa que el espectador tiene que pisar para pasar por ella, por lo que este la ve a ojo de p¨¢jaro¡±, explica N¨²?ez.

En la entrada, el espectador observa un gigantesco mural en el que hay representados el volc¨¢n, la ciudad en ruinas y el mar

En cada una de las escenas hay una mujer joven y desnuda. Representan cada una de las vidas que se perdieron en la tragedia. ¡°Las tres chicas son fantasmag¨®ricas y adolescentes. Est¨¢n en un estado latente entre la vida y la muerte¡±, explica la autora. Concretamente esta imagen de muerte se representa en las dos primeras escenas. ¡°En la imagen del volc¨¢n ella est¨¢ marcada por las sombras de los ¨¢rboles carbonizados. En la ciudad en ruinas est¨¢ metida en una especie de hueco tumba¡±. Aunque en este punto deja un matiz para la libre interpretaci¨®n, ya que el observador puede tambi¨¦n entender este espacio como un refugio. "La chica est¨¢ eternamente en llamas. Es una especie de ente que se representa de forma transparente¡±.

El momento de la esperanza llega en la tercera escena: el mar. La joven est¨¢ sumergida en las profundidades. Ahogada. Pero en el fondo, lo que est¨¢ es saliendo de ella. De su cuerpo emanan esporas o microorganismos que pretenden escapar del agua. La escena concluye con una visi¨®n optimista de la tragedia, la de una nueva vida.

Excepto las tres chicas, que son de carne y hueso y han sido fotografiadas, el resto de elementos que componen el mural est¨¢n dise?ados por ordenador. ¡°Tard¨¦ seis meses a tiempo continuo en hacer esto. Involucra trabajos en programas como el Photoshop o de efectos especiales y de creaci¨®n en 3D¡±.