Cuando las voces conmueven
Al finalizar la representaci¨®n de 'La forza del destino' las ovaciones a los cantantes, con ruidosos pateos (m¨¢xima manifestaci¨®n de aprobaci¨®n), se extendieron durante un cuarto de hora
Faltaba la ¨®pera conocida por muchos como la ¡°innombrable¡± para redondear la dedicaci¨®n durante 2013 a Giuseppe Verdi en la Bayerische Staatsoper de M¨²nich. Con la nueva producci¨®n reci¨¦n estrenada de La forza del destino han sido 10 las ¨®peras de Verdi ¡ª10, s¨ª, no han le¨ªdo mal¡ª que han subido a escena durante este a?o en el Nationaltheater de la capital b¨¢vara. El 1 de enero se recibi¨® 2013 con Aida, el 31 de diciembre se despide con La traviata. Y entre ambas, nuevas propuestas esc¨¦nicas de Simon Boccanegra o Il trovatore, o reposiciones de Macbeth, Otello, Falstaff, Rigoletto y Don Carlo. Ah¨ª es nada. Hab¨ªa adem¨¢s que ver el ambiente que reinaba en la premi¨¨re de La forza del destino. Antes del comienzo, decenas de personas en las inmediaciones del teatro portaban el cartel ¡°Suche Karte¡± esperando una baja de ¨²ltima hora (se hab¨ªan agotado las localidades en un suspiro). Al finalizar la representaci¨®n, las ovaciones a los cantantes, con ruidosos pateos (m¨¢xima manifestaci¨®n de aprobaci¨®n), se extendieron durante un cuarto de hora. Y durante el espect¨¢culo, hubo una ejemplar actitud de concentraci¨®n por parte del p¨²blico, ¨²nicamente interrumpida por encendidos aplausos en las escenas m¨¢s destacadas.
Bien es verdad que el reparto era, a priori, de campanillas con la pareja de la casa: la soprano Anja Harteros y el tenor muniqu¨¦s Jonas Kaufmann, como cabecera de cartel. Los dos cantaban por primera vez los personajes de Leonora y Don Alvaro. A lo largo del a?o verdiano hab¨ªan tambi¨¦n actuado juntos en Munich en Il trovatore y Don Carlo, y ella, adem¨¢s, hab¨ªa sido Desd¨¦mona en Otello.
El p¨²blico les adora y ellos, como era de esperar, no defraudaron. Para mayor satisfacci¨®n se uni¨® a la fiesta Ludovic T¨¦zier con una extraordinaria interpretaci¨®n del personaje de Don Carlos de Vargas. Lo que faltaba.
La combinaci¨®n de buen canto, incisiva teatralidad y pasi¨®n l¨ªrica contribu¨ªa al alto voltaje oper¨ªstico de la representaci¨®n. Los papeles menos estelares eran tambi¨¦n resueltos con empaque, empezando por el Padre Guardiano de Vitalij Kowaljow y la Preziosilla de Nadia Krasteva. Dirigi¨® y concert¨® con esmero Asher Fisch. La versi¨®n musical elegida fue la de Mil¨¢n de 1869, con la adaptaci¨®n de Franz Werfel, que sit¨²a la gran escena coral con Preziosilla a mitad del tercer acto, como en la versi¨®n de San Petersburgo de 1862. Esta particular ordenaci¨®n fue estrenada en Dresde en 1926, con direcci¨®n de Fritz Busch, y vista ese mismo a?o en Munich con Karl Bohm en el podio.
La exploraci¨®n de sentimientos est¨¢ conseguida teatral y dram¨¢ticamente
Con la direcci¨®n de escena llegaron los problemas, lo que desemboc¨® en un fuerte abucheo a Martin Kusej y su equipo. Pudi¨¦ndose contemplar La forza del destino como una ¨®pera de cuadros, el punto m¨¢s conflictivo vino de las escenas de guerra, con la inclusi¨®n por momentos de una componente er¨®tica de marcado tono sadomasoquista en los campamentos militares. Kusej niega el concepto determinante del destino y sit¨²a en su lugar el poder manipulador de ciertas instituciones religiosas. Se puede ver tambi¨¦n una ligera alusi¨®n al conflicto entre la Iglesia y el Islam. Esc¨¦nicamente, el planteamiento de estos cuadros corales queda difuso. Sin embargo, la exploraci¨®n de los sentimientos personales de los protagonistas est¨¢ muy conseguida teatral y dram¨¢ticamente.
Como es habitual en las nuevas producciones de la Bayerische Staatsoper una de las representaciones ¡ªla tercera, el s¨¢bado¡ª se puede ver en directo y gratuitamente en www.staatsoper.de/tv. Es una adecuada opci¨®n para ir despidiendo el a?o Verdi.
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