Ingenuidad y provocaci¨®n
Hammudi Al-Rahmoun Font decide en su ¨®pera prima, 'Otel.lo', desdoblarse, y al otro lado de la pantalla ser un director manipulador y bastante indeseable
Hammudi Al-Rahmoun Font toma en su ¨®pera prima,?Otel.lo, una de esas decisiones que no recomendar¨ªa ning¨²n asesor de imagen: desdoblarse, al otro lado de la pantalla, en la figura de un director manipulador, arrogante y bastante indeseable. Al-Rahmoun encarna a un joven cineasta que quiere dirigir su propia versi¨®n de la obra de Shakespeare, sirvi¨¦ndose de dos actores con poca experiencia ¨Cpareja en la supuesta vida real que plantea el dispositivo del proyecto- en los respectivos papeles de Otelo y Desd¨¦mona. A partir de ah¨ª, Otel.lo, con una visible austeridad de recursos y un estilo visual que corre el peligro de convertirse ya en afectado clich¨¦ ¨Cla c¨¢mara nerviosa capturando, sobre el terreno, gestos fugaces y miradas elocuentes-, propone una reflexi¨®n sobre los juegos de poder y las tenues fronteras entre ficci¨®n y realidad, que, desafortunadamente, se queda en un esbozo asombrosamente esquem¨¢tico.
OTEL.LO
Direcci¨®n: Hammudi Al-Rahmoun Font
Int¨¦rpretes: Ann M. Perell¨®; Youcef Allaoui, Hammudi Al-Rahmoun Font, Marc Monta?¨¦s, Kike Fern¨¢ndez, Laia Cobo.
G¨¦nero: drama. Espa?a, 2012
Duraci¨®n: 69 minutos.
A la vuelta de la esquina de la cartelera,?La venus de las pieles, de Roman Polanski, demuestra c¨®mo un juego sint¨¦tico muy similar se acaba convirtiendo en c¨¢mara de ecos e im¨¢n de desafiantes ambig¨¹edades. Nada de ambiguo, complejo o adulto se palpa en este Otel.lo que tiene su supuesto plato fuerte en la escena de sexo m¨¢s o menos vehemente que el director obliga a rodar a dos de sus actores y que acabar¨¢ desencadenando una poco convincente catarsis en el cl¨ªmax. El ep¨ªlogo donde se desvela la mec¨¢nica de todo delata la ingenuidad medular del conjunto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.