Literatura de SMS

Xisela L¨®pez trabaja en el ¨¢mbito del lenguaje reconcentrado, certero y preciso. Esta publicista, o escritora de frases, como se declara, es la responsable de esl¨®ganes como ¡°Hay pueblos que necesitan gente y gente que necesita pueblos¡±, para Acuarius, ¡°Celebra el d¨ªa de todos los bares¡±, para Coca-Cola, o ¡°Hemos creado un banco de recuerdos para que ninguno se pierda¡±, para la Fundaci¨®n Reina Sof¨ªa. Si muchos esl¨®ganes podr¨ªan ser los versos de un poema, L¨®pez se ha ido a m¨¢s all¨¢ de lo po¨¦tico, hasta lo prosaico (en el buen sentido), y ha compuesto una novela con frases m¨ªnimas: mensajes de sms. Se titula Volver¨¢n las naranjas y, m¨¢s que contar, hilvana una relaci¨®n amorosa con estos mensajes diminutos. El resto lo pone el lector.

El libro tiene su historia: durante 2008, en una ¨¦poca en la que L¨®pez estaba sin empleo, escribi¨® este texto ¡°para mantener ocupada la cabeza¡±, y lo guard¨®, como muchas veces se hace, en un caj¨®n. O m¨¢s bien, en una carpeta del ordenador. De all¨ª lo sac¨® su pareja e hizo una peque?a edici¨®n de unos 200 ejemplares. El d¨ªa del cumplea?os de la publicista, la llev¨® a la librer¨ªa Arrebato, en el madrile?o barrio de Malasa?a, donde se encontr¨®, por sorpresa, su libro editado. De alguna forma lleg¨® a manos de la editorial Espasa, que se ofreci¨® a publicarlo de manera profesional. Y aqu¨ª lo tenemos.

¡°Ya no nos acordamos de c¨®mo era el SMS¡±, dice L¨®pez, ¡°como costaba dinero, hab¨ªa que reflexionar m¨¢s sobre cada mensaje, y me recuerdo reescribiendo varias veces el texto antes de enviarlo. Ahora, con la mensajer¨ªa instant¨¢nea es todo m¨¢s r¨¢pido e inmediato¡±. Lo cierto es que si con la aparici¨®n del correo electr¨®nico muchos echaron de menos las viejas cartas de amor manuscritas que el cartero llevaba de una mano enamorada a otra, ahora, curiosamente, lo que algunos echan de menos es el propio email o el SMS. ¡°Ahora es todo m¨¢s irreflexivo¡±, se lamenta la autora, ¡°el WhatsApp ha matado al romanticismo¡±.

¡°El WhatsApp ha matado el romanticismo¡±, sostiene la autora

Lo que se cuenta en la novela es la historia de una polic¨ªa de Lugo que encuentra, tras un grave accidente de tr¨¢fico, el tel¨¦fono m¨®vil de los ocupantes de uno de los coches. Y ah¨ª dentro est¨¢ la conversaci¨®n en SMS que se transcribe en el libro. Una historia de amor que empieza de manera efervescente, pero que, como suele pasar, acaba cayendo en las mismas rutinas, reproches y discusiones absurdas que aquejan a todas las relaciones. ¡°Se empieza con much¨ªsima expectativa, pensando que has encontrado a la horma de tu zapato¡±, opina la publicista, ¡°pero luego, sea quien sea tu pareja, todas la relaciones siguen la misma estructura. Luego hay gente que a lo que est¨¢ enganchada es a la sensaci¨®n de enamoramiento de los primeros tiempos, y cuando se acaba, pasa a otra relaci¨®n¡±.

?C¨®mo es la vida de un publicista? ¡°Hay una imagen idealizada, lo m¨¢s divertido es darle vueltas y vueltas a las ideas, la parte creativa. Luego, como muchos otros trabajos, consiste en mandar muchos email y apagar muchos fuegos. Y no, no se parece a Mad Men¡±, dice L¨®pez, directora creativa de la agencia Se?ora Rushmore, que toma su nombre de un personaje de Grease (aquella mujer que hablaba por megafon¨ªa en el instituto de Sandy Olson y Danny Zuko), y que es una de las m¨¢s creativas y exitosas del pa¨ªs. Entre sus clientes se cuentan el Atl¨¦tico de Madrid, El Corte Ingl¨¦s, Visa, San Miguel, La Sexta o el PSOE. ¡°La publicidad ya no tiene el objetivo tan directo de vender esto o aquel producto¡±, dice, ¡°sino que las marcas tratan de acercarse a la gente cont¨¢ndoles historias que les lleguen, les sorprendan o les hagan re¨ªr. Quieren generar empat¨ªa¡±. Y ?c¨®mo se hace un eslogan perfecto? ¡°Tiene que ser contundente, un conjunto de palabras bien dichas para que a la gente se le quede grabado en la cabeza¡±, dice. Tal vez as¨ª eran, en tiempos prehist¨®ricos, los SMS.