Una pasarela en busca de voces originales

Roberto L¨®pez Etxeberria (Eibar, 1976) es lo mejor que le ha pasado a la moda masculina de Espa?a en a?os. Lo demostr¨® con una poderosa colecci¨®n que funcion¨® como una descarga de energ¨ªa en la primera jornada de la pasarela Mercedes-Benz Fashion Week Madrid (MBFWM). Se podr¨ªa decir que la presentaci¨®n para oto?o-invierno 2014 de Etxeberria sirvi¨® para iluminar cu¨¢l es el camino que la principal cita de la moda espa?ola deber¨ªa tomar para salir del espejismo de un certamen cuya repercusi¨®n medi¨¢tica y de p¨²blico no tiene traducci¨®n en t¨¦rminos de negocio o de relevancia de moda. Y la ¨²nica soluci¨®n para deshacer la paradoja es encontrar voces que a¨²nen el discurso original con la viabilidad comercial. O, al menos, gestarlas y nutrirlas hasta que emprendan el vuelo hacia otra parte.

La tercera participaci¨®n de Etxeberria en MBFWM supone su retorno a los trajes tras dos temporadas centradas en los abrigos y el vasco se ha esmerado en innovar en los patrones y en la construcci¨®n de estas prendas. ¡°Desde el siglo XIX la moda masculina ha evolucionado muy poco¡±, analiza. ¡°He querido ir a la esencia de lo que entiendo debe ser mi firma. Destrozar un patr¨®n de sastrer¨ªa cl¨¢sica y llevarlo a la m¨ªnima expresi¨®n de una prenda sin costuras que es a la vez la de su m¨¢xima complejidad¡±. Etxeberria vende sus lujosos abrigos de pieles en tiendas como L¡¯Eclaireur de Par¨ªs, pero su inquietud le hace moverse hacia nuevos territorios. ¡°Tengo millones de colecciones en la cabeza¡±, asegura. No s¨¦ cu¨¢ntas m¨¢s veremos en Madrid antes de que, inevitablemente, emprenda el mismo camino que Josep Font o Carmen March y decida salir al extranjero en busca de un escaparate m¨¢s apropiado para la repercusi¨®n internacional. Ayer un ecl¨¦ctico elenco de hombres y mujeres de todas las edades probaba la polivalencia de su propuesta y hasta qu¨¦ punto resultan realistas esas ocurrencias que se agolpan en su cabeza. La mayor¨ªa de los que desfilaban parec¨ªan tan c¨®modos como si llevaran su propia ropa.

La gran cita de la moda espa?ola ¡ª40.000 visitantes en la edici¨®n anterior¡ª deber¨ªa tener dos objetivos. O bien promover propuestas m¨¢s relevantes para su consumo en el mercado interno (esto es, ropa que la gente lleve) o bien jugar alg¨²n papel en el atestado calendario internacional de pasarelas. Para lograr lo primero, nadie duda que la ¨²nica soluci¨®n pasa por el acercamiento entre la industria de confecci¨®n y los creadores. As¨ª lo ve Modesto Lomba (Vitoria, 1962) que ha presentado su primera temporada tras la inyecci¨®n econ¨®mica del grupo Kangaroos (que tambi¨¦n ha comprado El Caballo o Coronel Tapiocca) que el pasado 29 de enero puso fin al concurso de acreedores en Devota&Lomba. ¡°Esta uni¨®n ¡ªcomo la Miguel Palacio y Hoss Intropia, la de Delpozo con Perfumes y Dise?o o la de Carmen March con Cortefiel¡ª son cosas que antes no ocurr¨ªan en este pa¨ªs y que permiten que los creadores podamos crecer¡±, asegura.

Para el segundo de los objetivos, por una vez, hay un dato alentador. Seg¨²n un estudio reciente de Global Language Monitor, Barcelona y Madrid est¨¢n entre las 20 capitales mundiales de la moda en lo que a percepci¨®n digital se refiere. En concreto, ocupan la posici¨®n 5? y 14?. Una reputaci¨®n que convendr¨ªa alimentar con propuestas originales que den a Espa?a un valor diferencial entre las citas indistinguibles que proliferan por todo el globo. Un fen¨®meno acerca del que Vanessa Friedman escrib¨ªa as¨ª en The Financial Times: ¡°Cada vez es m¨¢s dif¨ªcil sentirse excitado por ellas o incluso recordar por qu¨¦ deber¨ªan importarnos¡±. Una necesidad de mirar hacia lo propio que Juan Duyos (Madrid, 1968) comprendi¨® hace tiempo pero que hasta ahora no hab¨ªa cristalizado de forma tan rotunda y satisfactoria como en su colecci¨®n para el pr¨®ximo oto?o. A partir de 15 mantones de Manila de los a?os treinta a cincuenta que encontr¨® en una mercer¨ªa de Zaragoza, Duyos construye delicadas piezas ¨²nicas que articulan una de sus mejores colecciones hasta la fecha. ¡°Tenemos que potenciar lo nuestro. Nuestra cultura, nuestra artesan¨ªa y nuestra historia¡±, defiende. Los mantones se convierten en un abrigo que parece inspirado por Paul Poiret o en deliciosos vestidos con espalda al bies; se combinan con lentejuelas o aparecen en el cuerpo de un esmoquin. A veces se cubren con un velo o, reducidos a sus flecos, se transforman en largas faldas. M¨¢s all¨¢ del juego de reconstrucci¨®n, el conjunto escapa al t¨®pico y destila una sorprendente modernidad y ligereza. Su languidez contrasta con los imponentes abrigos de avestruz o zorro de la nueva licencia de peleter¨ªa del madrile?o, que producir¨¢ la compa?¨ªa Corty Bennet.

Amaya Arzuaga (Lerma, 1970) no duda en afirmar que, si dispusiera del presupuesto, mostrar¨ªa su l¨ªnea AA en Londres. De momento, esta segunda l¨ªnea se queda en Madrid y ha sido la encargada de inaugurar la 59? edici¨®n de MBFWM. La colecci¨®n principal se ver¨¢ en la pr¨®xima Semana de la Moda de Par¨ªs, como ocurre desde 2010, pero esta vez desfilar¨¢ en el Palais de Tokio, gracias a los 30.000 euros del Premio Nacional de Dise?o de Moda que Arzuaga recibi¨® en 2013. ¡°La colecci¨®n de AA funciona muy bien en ventas en el extranjero y esta temporada me la he planteado con la misma ambici¨®n y profundidad que la primera¡±, afirma la dise?adora.

Una de las noticias de la Semana de la Moda de Nueva York que acaba de terminar ha sido la cantidad de dise?adores que han abandonado la sede de Lincoln Center, con su recibidor atestado de patrocinadores, para presentar por sus propios medios y en otros lugares. Es dif¨ªcil concebir que algo as¨ª pudiera suceder en Espa?a. Pero cada vez hay m¨¢s firmas que buscan alternativas al calendario oficial de MBFWM, como demostraron unos premios Goya cargados de dise?o espa?ol que no pisa Ifema. Y dentro del recinto hay quien ya ha comprendido cu¨¢l es el camino para sortear las trampas del espejismo.