Arte contempor¨¢neo y embrollo fiscal

El mundo del arte en Espa?a ha consumido en los seis a?os de la crisis todas las etapas del c¨¦lebre modelo K¨¹bler-Ross que describe las fases del duelo por un ser querido (el mercado): negaci¨®n, ira, negociaci¨®n, depresi¨®n y, finalmente, aceptaci¨®n. As¨ª que aqu¨ª estaba ayer el sector, reunido en pleno, aceptando que ARCO vuelve a celebrarse otro a?o m¨¢s ¡ªhasta el domingo¡ª en Ifema. Y si todas las ediciones se recuerdan con sus apellidos correspondientes (¡°la del desplante de las galer¨ªas¡±, ¡°la del primer a?o de recesi¨®n¡±, ¡°la de la subida del IVA¡±...) esta podr¨ªa pasar a los anales como ¡°la del embrollo fiscal¡±.

Porque en la cr¨®nica de apertura de la cita, que vivi¨® su d¨ªa para coleccionistas y profesionales, que hoy inauguran los Pr¨ªncipes de Asturias en presencia del ministro (esta vez s¨ª) y del secretario de Estado y que desde ma?ana permitir¨¢ el acceso al p¨²blico general, las cinco W del periodismo (qu¨¦, qui¨¦n, c¨®mo¡­) quedaron relegadas por el cu¨¢nto. ?En cu¨¢nto se queda entonces la rebaja del IVA del arte al 10% anunciada por el Gobierno y que fue recibida por el sector como un man¨¢ para despu¨¦s caer en la cuenta de que no hab¨ªa para tanto? Las respuestas no eran ayer precisamente un¨¢nimes. Hasta hubo quien, como ?lvaro Alc¨¢zar, confes¨® que ni su contable se aclara con el misterio.

Carlos Urroz, director de la feria, zanj¨® el asunto con un ¡°hemos decidido que se va a aplicar un 15,5% m¨¢s o menos¡±. Esa cantidad sale de sumar y luego dividir entre dos el 21% (tipo general) que afecta a la relaci¨®n entre el galerista y el coleccionista y la que grava la comisi¨®n de intermediaci¨®n del primero y el 10% que rige entre artista y un comprador cualquiera, sea galerista o no.

Aunque Jos¨¦ Mart¨ªnez, mitad de Espacio M¨ªnimo, es de los que no se creen las cosas hasta que las ven. Y as¨ª lo explicaba ayer ante una exquisita pieza de la argentina Lilianna Porter, que invita al coleccionista a adquirir su propia sombra: ¡°Aplicaremos el 21% a las ventas hasta que la ley nos demuestre lo contrario¡±. Juana de Aizpuru, por su parte, a?adir¨ªa despu¨¦s que hab¨ªa sopesado la posibilidad de hacer que sus artistas facturasen directamente a los compradores, pero que luego desestim¨® la idea al darse cuenta de que ella deb¨ªa seguir gravando con un 21% su comisi¨®n de galerista¡­

Un l¨ªo morrocotudo, vamos, que condujo a la veterana marchante a una defensa cerrada del IVA cultural. ¡°No es tanto por el negocio, sino porque significar¨ªa un reconocimiento a que el arte no es un bien de lujo y a que los coleccionistas hacen una labor de mantenimiento del patrimonio¡±.

Eso, aplicar un 4% como en los libros, contribuir¨ªa a mejorar las expectativas, qu¨¦ duda cabe. O como m¨ªnimo, a aclarar el embrollo impositivo. Un jaleo fiscal en toda regla que fue la t¨®nica general durante un d¨ªa por lo dem¨¢s dominado por el optimismo y por el exitoso programa de invitados internacionales de categor¨ªa. Aunque, ya se sabe lo que dicta el refranero: ¡°Cada uno cuenta la feria como le ha ido¡±.

Seg¨²n eso, a Helga de Alvear le fue fenomenal. ¡°Hemos vendido un mont¨®n y he comprado cinco piezas¡±, explicaba a mediod¨ªa la galerista y coleccionista alemana afincada en Espa?a. El resto de los consultados, muchos de ellos reci¨¦n llegados de Zona Maco, en M¨¦xico, se movieron en los grises que van de las transacciones notables al ¡°habr¨¢ que esperar a ver c¨®mo evoluciona esto. Y sobre todo en qu¨¦ queda la cosa esa del IVA¡±.

Visto el l¨ªo monumental originado en torno al impuesto sobre las transacciones de obras de arte en Arco, una llamada al Ministerio de Hacienda al final de la ma?ana trat¨® de arrojar luz fiscal. ¡°Todo queda como hace dos a?os. Si el galerista vende acogi¨¦ndose al r¨¦gimen general, lo hace al 21%. Si opta por el r¨¦gimen especial, se combinan los tipos y se grava con un 15,5%¡±, explic¨® un portavoz desde el otro lado del hilo telef¨®nico.

¡°En esa argumentaci¨®n falta un supuesto. Si t¨² le vendes a una empresa, esta podr¨¢ desgravar el IVA, as¨ª que entonces se aplica el 21%¡±, afirmaba luego el presidente del Consorcio de Galer¨ªas de Espa?a, Alberto de Juan, de Max Estrella. ¡°Lo que no se entiende es que no haya una normativa com¨²n en la Uni¨®n Europea sobre esta cuesti¨®n¡±.

Y tanto que no la hay. Levy, veterano galerista berlin¨¦s con una memorable exposici¨®n en torno a Meret Oppenheim, explic¨® que en Alemania se tributa un 19% desde que el Gobierno decidi¨® ceder a la presi¨®n europea y subi¨® el viejo y tan favorable 7% (que a¨²n rige para los artistas). Los finlandeses, pa¨ªs invitado en esta edici¨®n, a?ad¨ªan que ellos pagan un 7% si la pieza es nacional y un 17% si es extranjera, mientras un marchante belga juraba que en su pa¨ªs llevan pagando el 21% ¡°una larga temporada¡±. ?Y los franceses? Bueno, ellos son, c¨®mo no, la excepci¨®n (cultural): tributan un 6%.

Mientras tanto, de vuelta en la Espa?a del sainete pol¨ªtico (reflejado en un retrato hiperrealista de la ministra de Empleo y Seguridad Social F¨¢tima B¨¢?ez, obra del artista peruano Miguel Aguirre), comenzaba una de las atracciones m¨¢s esperadas del d¨ªa. Un peep show aguardaba en el espacio de los murcianos T20 tras una cortinilla y entre toneladas de expectaci¨®n (masculina). El t¨ªtulo, en letras de ne¨®n: Congress Topless. El artista, Yann Leto, explic¨® que la pol¨ªtica espa?ola le parec¨ªa ¨²ltimamente ¡°tan casposa como un club de striptease¡±. As¨ª que ha puesto a una se?orita a hacer lo propio a raz¨®n de cinco pases diarios.

?Y del resto? Bueno, tratar de hallar un hilo argumental en una feria de arte como esta es como pretender encontrarlo en las baldas de un centro comercial. Hay muchas obras que emplean ladrillos o discos de vinilo o juegan con elementos autorreferenciales sobre la historia del arte. Y parece que triunfa la pintura, o al menos la bimensionalidad. ?Ser¨¢ que se venden mejor las cosas que cuelgan de las paredes? Qui¨¦n sabe...

Dan Graham, leyenda del arte estadounidense de visita en Arco para tratar de colocar uno de sus c¨¦lebres pabellones transparentes (330.000 euros), cre¨ªa haber dado con la respuesta: ¡°Los estands son peque?itos y las piezas, tirando a baratas. Las cosas siguen sin ir demasiado bien por aqu¨ª, ?verdad?¡±.