Deshinchado
No hay m¨¢s que o¨ªr las defensas ret¨®ricas de la Constituci¨®n, mientras la verdadera defensa del texto brilla por su ausencia ya sea en los desahucios o la protecci¨®n de los servicios p¨²blicos
Es f¨¢cil observarlo. Los globos cuando se deshinchan provocan m¨¢s ruido. Algo as¨ª pasa con el patriotismo, que suele ser inverso al patrioterismo. Este ¨²ltimo presume de fortaleza y mete mucho ruido, pero en realidad est¨¢ deshinchando lo que dice defender. No hay m¨¢s que o¨ªr las defensas ret¨®ricas de la Constituci¨®n, mientras la verdadera defensa del texto brilla por su ausencia ya sea en los desahucios o la protecci¨®n de los servicios p¨²blicos. Una imagen perfecta de este fen¨®meno donde el ruido impide ver la p¨¦rdida de poder es la nueva legislaci¨®n de urgencia para boicotear la justicia universal. En la anterior legislatura, los dos partidos mayoritarios pactaron un limado de competencias para salir del paso de las presiones israel¨ªes en un caso concreto rodeado de muerte de civiles ignorado por la jurisprudencia de aquel pa¨ªs. Pero ahora la soluci¨®n, en busca de agradar de manera sumisa a la autoridad china, nos lleva a un atolladero donde est¨¢n en peligro los derechos de nuestros propios ciudadanos.
Dos jueces, Pedraz y Andreu, han sido los primeros en apuntar hacia el vaciado de la Constituci¨®n que conlleva plegarse a los deseos de las grandes potencias econ¨®micas en nuestro ordenamiento jur¨ªdico. Mientras generamos una alarma rid¨ªcula sobre nuestras fronteras valladas con alambradas y por defender la integridad nacional estamos dispuestos a saltarnos unos m¨ªnimos de protecci¨®n de los derechos humanos, hemos puesto en venta la nacionalidad espa?ola, que puede comprar cualquier turbio millonario con tal de que adquiera una propiedad en nuestro suelo. La doble vara de medir utiliza el patrioterismo, pero sienta las bases del trato diferente a ricos y a pobres de una manera tan transparente que da n¨¢useas.
Renunciar a ejercer la justicia contra los acusados de asesinar a cuatro religiosos espa?oles en El Salvador nos deber¨ªa hacer pensar. Archivar la causa que trata desde hace a?os de esclarecer la muerte de Jos¨¦ Couso en Bagdad rebaja nuestra dignidad de pa¨ªs. Ya estamos acostumbrados a que presuman de patriotismo quienes manejan cuentas en Suiza y caja B. Mientras muchos aseguran defenderla, la Constituci¨®n se vac¨ªa cuando niega el amparo a sus ciudadanos. Pero estamos demasiado distra¨ªdos con el ruido del globo como para ver que en realidad se est¨¢ deshinchando.
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