Christian Thielemann, mariscal de Richard Strauss en Salzburgo

El compositor Richard Strauss ha tomado el relevo en 2014 de Giuseppe Verdi y Richard Wagner en 2013. Es una consecuencia de la pol¨ªtica cultural de los aniversarios. Strauss naci¨® hace 150 a?os y el mundo musical lo celebra. En Salzburgo con m¨¢s motivo, si cabe, pues el compositor nacido en M¨²nich fue uno de los fundadores del Festival de Verano, empe?o en el que le acompa?o Hugo von Hoffmansthal, con el que realiz¨® seis ¨®peras, la ¨²ltima de las cuales fue precisamente Arabella, ahora estrella del Festival de Pascua, en una coproducci¨®n con la Semperoper de Dresde, ciudad donde se estren¨®, al igual que otros t¨ªtulos del compositor. Strauss era un mozartiano empedernido, lo que ha propiciado que en esta edici¨®n los conciertos del festival propongan un di¨¢logo permanente entre Mozart y Strauss, al que se ha sumado Wolfgang Rihm. Se recuerdan asimismo en la programaci¨®n los 25 a?os del fallecimiento de Herbert von Karajan, director art¨ªstico del Festival de Pascua de 1967 a 1989, y se tiene en el programa de mano una menci¨®n especial para Claudio Abbado, director art¨ªstico de este festival de 1994 a 2002 y fallecido el pasado enero. Los tres m¨¢ximos responsables del festival, con Thielemann a la cabeza, expresan en un emocionante art¨ªculo compartido su admiraci¨®n por el maestro milan¨¦s, reconociendo no solamente el alto nivel de sus realizaciones art¨ªsticas sino su carisma y la ¡°combinaci¨®n ideal de emoci¨®n e inteligencia¡±.

?En su segundo a?o al frente del Festival de Pascua Christian Thielemann ha escogido un t¨ªtulo de Strauss, como era de esperar, m¨¢s todav¨ªa al contar con la orquesta de la Staatskapelle de Dresde, straussiana donde las haya, y tener al alcance de la mano la musa ideal para el personaje que da t¨ªtulo a la obra. Con la soprano estadounidense Ren¨¦e Fleming, Thielemann tiene una compenetraci¨®n especial. Ella, adem¨¢s, es una straussiana de pura cepa, como demostr¨® el s¨¢bado de principio a fin de la representaci¨®n en una lecci¨®n de estilo vocal adaptado a la m¨²sica de Strauss verdaderamente asombrosa.

Thielemann ya hab¨ªa obtenido un triunfo arrollador en el Festival de Verano de Salzburgo de 2011 con La mujer sin sombra. Su identificaci¨®n con Strauss es absoluta, tanto desde el punto de vista t¨ªmbrico como en la dosificaci¨®n de la tensi¨®n teatral. Su direcci¨®n de Arabella roz¨® la perfecci¨®n. Su capacidad de seducci¨®n estuvo a la altura de la componente anal¨ªtica. Excepcional. L¨¢stima que la puesta en escena de Florentine Klepper tuviese tan poca chispa teatral como tuvo. Soberbia, como hemos apuntado, Ren¨¦e Fleming y tambi¨¦n Hanna-Elisabeth M¨¹ller como Zdenka y Daniel Behle como Matteo. Seguro como siempre Albert Dohmen y un poco limitado en las zonas extremas Thomas Hampson. En general fue un reparto muy adecuado a la obra.

Despu¨¦s de sus ¨¦xitos con Wagner y Strauss, Thielemann anunci¨® que para la pr¨®xima edici¨®n va a cambiar de tercio enfrent¨¢ndose al doblete verista Cavalleria rusticana-Pagliacci, adem¨¢s del R¨¦quiem de Verdi, eso s¨ª con Jonas Kaufmann en las tres obras.