Ana Frank ¡®revive¡¯ en ?msterdam
¡°Anne¡±, la nueva obra de teatro basada en su famoso ¡°Diario¡±, recrea su malogrado sue?o literario
Reci¨¦n liberada del campo de concentraci¨®n de Bergen-Belsen, Ana Frank, autora del famoso Diario, se reune en Par¨ªs con un editor. Su mayor ilusion era ser escritora y est¨¢ a punto de conseguirlo tras sobrevivir al Holocausto. Antes de firmar el deseado contrato, la joven recuerda su historia en una vuelta al pasado que compone Anne, la nueva pieza teatral estrenada la noche del jueves en ?msterdam en presencia del rey Guillermo. Firmada por Leon de Winter y Jessica Durlacher, hijos de supervivientes del nazismo, se permite la licencia po¨¦tica de burlar a la muerte para acercar a las nuevas generaciones ¡°el mensaje de paz y libertad de la joven¡±, que perece, por supuesto, al final.
En origen, el Diario de Ana Frank era un conjunto de tres libretas escritas desde su 13 cumplea?os en 1942 hasta que fue descubierta, junto con sus padres y hermana -adem¨¢s de otros cuatro amigos- por los nazis. Sacados todos de su escondite en ?msterdam en 1944, de los campos de exterminio solo regres¨® el padre, Otto. ?l compil¨® las notas rescatadas por Miep Gies, una antigua empleada, y permiti¨® su publicaci¨®n en 1947. Antes de dar su consentimiento, suprimi¨® los pasajes cr¨ªticos con la madre de Ana y las p¨¢ginas donde la hija cuenta su despertar al amor y la sexualidad. En 1986, el Instituto holand¨¦s para la Documentaci¨®n de la Guerra public¨® una edici¨®n cr¨ªtica que recuperaba los pensamientos censurados. En 1995, Mirjam Presler present¨® su edici¨®n definitiva. En 1998 aparecieron cinco cuartillas in¨¦ditas que fueron estudiadas a fondo.
La obra de teatro ha aprovechado todas estas versiones para formar unos di¨¢logos que plasman la asfixia vital de una cr¨ªa encerrada con siete adultos por culpa de la guerra, ¡°pero capaz de legar un mensaje humanista universal¡±, en palabras de Buddy Elias, su primo hermano, de 88 a?os, y ¨²nico pariente vivo. Los avances en la escenograf¨ªa teatral han hecho el resto gracias a una nueva sala, Theater Amsterdam, erigida especialmente para la obra. As¨ª, la tr¨¢gica historia es contada desde una casa giratoria que hace las veces de domicilio de los Frank en ?msterdam, cuando eran libres, y tambi¨¦n de escondite. El decorado es apabullante y permite cortar el edificio en porciones para mostrar las oficinas donde Otto Frank ten¨ªa su empresa, as¨ª como las habitaciones del anexo secreto que les ocult¨® sin ¨¦xito del ocupante nazi. Las luces, la proyecci¨®n de pasajes del diario, y de im¨¢genes reales, en grandes pantallas y el gusto por el detalle del conjunto, permite a los 22 actores moverse con soltura por el escenario. Sobre todo a la protagonista, Rosa da Silva,de 27 a?os, holandesa de origen portugu¨¦s.
El alarde tecnol¨®gico es tal, que las primeras cr¨ªticas de los expertos apuntan a un estilo ¡°casi cinematogr¨¢fico que difumina en cierto modo el aspecto opresivo de la situaci¨®n¡±, seg¨²n el rotativo Het Parool. Para sus colegas de NRC Handelsblad, es ¡°una pieza tan imponente como unidimensional¡±, De Volkskrant, por su parte, destaca una ¡°direcci¨®n de actores impecable para una obra muy bella¡±. De Telegraaf se queda con¡±el equilibrio justo entre tragedia y momentos de respiro¡±.
Robin de Levita, el productor holand¨¦s (ganador, entre otros, de sendos premios Tony de teatro por el musical Titanic y por 42nd Street), ten¨ªa muy claro su objetivo: ¡°Acercar el diario a los j¨®venes con respeto¡±. Ahora espera que el p¨²blico responda, porque esta nueva sala, solo programar¨¢ Anne de forma permanente. El Fondo de Ana Frank (Basilea), del que el primo Elias es presidente, permiti¨® escribir el nuevo texto, y ?msterdam aguarda a un p¨²blico internacional como el que acude a la Casa de Ana Frank, en la propia capital. Para que puedan seguir la representaci¨®n, en holand¨¦s, desde el patio de butacas, se ofrece traducci¨®n simult¨¢nea con auriculares. Est¨¢ previsto que Anne pueda o¨ªrse en ingl¨¦s, franc¨¦s, alem¨¢n, espa?ol, ruso, chino o japon¨¦s, una lista que se ir¨¢ ampliando. No pod¨ªa ser de otro modo para un Diario que ha sido traducido a setenta idiomas.
Babelia
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