Tint¨ªn bate el r¨¦cord mundial de venta de c¨®mic en una subasta p¨²blica
Un comprador estadounidense adquiri¨® la pieza en la puja organizada en Par¨ªs el fin de semana
"Va a ser un fin de semana hist¨®rico para el c¨®mic", nos hab¨ªa anunciado en abril el experto de Artcurial ?ric Leroy. Y as¨ª fue. En un fin de semana, se vendieron originales por valor de 7,3 millones de euros. Pero lo que ha sacudido el mercado del arte ha sido la venta en la casa de subastas de Par¨ªs ¡ªla m¨¢s importante de Francia¡ª de una de las planchas dibujadas por Herg¨¦ en 1937 para su serie de libros de Tint¨ªn. El original, realizado en tinta china para las guardas de sus libros de c¨®mic, fue adquirido el s¨¢bado por la astron¨®mica suma de 2,65 millones de euros: un r¨¦cord mundial para el noveno arte.
Para la ocasi¨®n, el H?tel Marcel Dassault, que aloja a Artcurial en el n¨²mero 7 de la glorieta de los Campos El¨ªseos instal¨® en su patio dos figuras emblem¨¢ticas de?Objetivo: La Luna: el cohete que propuls¨® a sus protagonistas al espacio exterior y una reproducci¨®n de Tint¨ªn en su traje de astronauta. En la misma venta, fue adjudicada un dibujo para La isla negra por poco menos de un mill¨®n de euros y su versi¨®n en color por 100.000 euros.
?ric Leroy, experto en c¨®mic de Artcurial, no da muchas pistas "por discreci¨®n" del afortunado (en todos los sentidos) comprador que bati¨® el r¨¦cord mundial, salvo que se trata de "un coleccionista norteamericano, due?o de una colecci¨®n importante, que compr¨® el original en una puja muy disputada de 15 minutos".
"Este r¨¦cord es el fruto de 20 a?os de trabajo", afirma Leroy. "Hace falta tiempo para crear un mercado en este ¨¢mbito de creaci¨®n". Tras dos d¨¦cadas de desarrollo de ese mercado especializado, "ahora hay una toma de conciencia de las nuevas generaciones, porque el c¨®mic es un arte popular que ha marcado los esp¨ªritus y la infancia de varias generaciones".
La pieza subastada, dice, "es superimportante, porque contiene 34 escenas y personajes representativas del universo de Tint¨ªn, y resume el 70% las aventuras de Herg¨¦ de los a?os 30, el periodo m¨¢s buscado". Son las guardas (pages de garde) que serv¨ªan de introducci¨®n, justo despu¨¦s de la portada, a los libros publicados en el periodo que va de 1937 a 1958. "Piense en los millones de ejemplares que han sido publicados con esa ilustraci¨®n. Es toda una invitaci¨®n al pa¨ªs de los sue?os".
Herg¨¦ regalaba sus originales de vez en cuando a sus allegados Jacques Langlois, erudito en Tint¨ªn
La venta demuestra, seg¨²n el experto de Artcurial, que "el mercado del c¨®mic es cada vez m¨¢s maduro, m¨¢s din¨¢mico, m¨¢s fuerte". En cuanto al perfil de los coleccionistas que est¨¢n comprando obra de Tint¨ªn, Leroy asegura que est¨¢n representados "diferentes tramos de la sociedad", aunque reconoce que, "desafortunadamente, las instituciones tienen muy poca presencia en este tipo de subastas, porque el Mus¨¦e de la bande dessin¨¦e de Angulema [consagrado al noveno arte] no tiene el presupuesto para hacer ese tipo de adquisiciones". Por eso, los compradores son "aut¨¦nticos coleccionistas apasionados", en este caso, por la obra de Herg¨¦.
Jacques Langlois, tintin¨®filo, experto en la obra de Herg¨¦ ¡ªal que conoci¨® y trat¨® durante muchos a?os¡ª y antiguamente propietario de una valiosa colecci¨®n del dibujante belga, considera que hay que ser prudente a la hora de valorar la emergencia de un mercado del c¨®mic como obra de arte. "Por supuesto que hay verdaderos coleccionistas, amantes del c¨®mic, a quienes les entusiasma la posibilidad de poseer un original de Herg¨¦", explica a EL PA?S. Pero tambi¨¦n a?ade que el anterior r¨¦cord mundial registrado por una obra de Herg¨¦, la portada de Tintin en Am¨¦rique de 1932 (vendida en 2012 por 1,3 millones de euros) "s¨ª tuvo un lado un poco especulativo" si se tiene en cuenta el cambio de manos que ha tenido ese original. "Los precios registrados en el c¨®mic empiezan a asemejarse a los del mercado tradicional de obras de arte", afirma, y, al igual que en el mundo del arte, "es preciso valorar el origen y el itinerario seguido por un original".
En el caso de la plancha vendida el pasado s¨¢bado en Artcurial, Langlois coincide con Leroy en que nos encontramos ante "una plancha bell¨ªsima, un dibujo que es muy emblem¨¢tico para quienes han le¨ªdo los ¨¢lbumes de Tint¨ªn, al menos los publicados en el periodo 1937-1958. Era una se?al fuerte de reconocimiento cuando abr¨ªas un ¨¢lbum de Tint¨ªn, a pesar de que, l¨®gicamente, no est¨¢n incluidos los personajes creados posteriormente, que s¨ª aparecen en las nuevas guardas de los ¨¢lbumes actualizadas en 1958, a petici¨®n de la editorial Casterman".
Nunca pens¨® que sus dibujos para las guardas de sus ¨¢lbumes fueran obras de arte" Jacques Langlois, erudito en Tint¨ªn
Jacques Langlois recuerda que Herg¨¦ "nunca pens¨® que sus dibujos para las guardas de sus ¨¢lbumes fueran obras de arte", y que "no tuvo ning¨²n af¨¢n especulador". Lo que no pod¨ªa prever Herg¨¦ era que sus obras s¨ª acabar¨ªan siendo vistas como obras de arte aupadas por la conexi¨®n emocional entre sus lectores y sus obras, e indefectiblemente convertidas en objetos de deseo de los coleccionistas.
Los Studios Herg¨¦, gestionados por la viuda de Herg¨¦, Fanny Rodwell, y su marido Nick Rodwell, no suelen adquirir obra de Herg¨¦: "Ya tienen el 85%, aproximadamente, de la colecci¨®n, que exhiben el museo Herg¨¦" en Lovaina-la-Nueva (B¨¦lgica). Langlois afirma que el surgimiento de un mercado limitado de obras de Herg¨¦ al margen de la fundaci¨®n original se vio potenciado por dos hechos: en primer lugar, que "Herg¨¦ regalaba sus originales de vez en cuando a sus allegados", lo que aument¨® la dispersi¨®n de sus obras; y en segundo lugar, que, tras el fallecimiento del artista, "hubo piezas no repertoriadas que salieron de sus estudios", como podr¨ªa haber ocurrido en el caso de la editorial Casterman.
La pr¨®xima gran venta de c¨®mics en Artcurial tendr¨¢ lugar, avanza Eric Leroy, "a mediados de noviembre". Ser¨¢ una ocasi¨®n m¨¢s para verificar, seg¨²n sus palabras, que el c¨®mic "es, por encima de todo, un arte moderno, actual, que representa, a fin de cuentas, el arte de so?ar".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.