Casanovas en Madrid

Me encuentro con Jordi Casanovas, el dramaturgo y director catal¨¢n, que ha vuelto radiante de Madrid. En poco tiempo ha presentado dos piezas: Un hombre con gafas de pasta, en la Pensi¨®n de las pulgas, que acab¨®, con gran acogida, har¨¢ un par de semanas, y Ruz/B¨¢rcenas, reci¨¦n estrenada en el Teatro del Barrio. ¡°Me ha maravillado¡±, cuenta, ¡°la atm¨®sfera teatral viv¨ªsima, acogedora, entusiasta, de la escena off y, desde luego, la sensaci¨®n de inmediatez. En la Pensi¨®n de las Pulgas le dije a mi mujer: me encantar¨ªa hacer algo aqu¨ª. Al poco tiempo me llama Fefa Noia, que ha hecho muchas ayudant¨ªas en la Abad¨ªa, y me pide un texto para una amiga suya, la actriz Inge Mart¨ªn. Le paso Un hombre con gafas de pasta, que hab¨ªa estrenado en catal¨¢n, y me dice: 'Vamos a hacerlo'. Fefa no pod¨ªa dirigirlo y acab¨¦ mont¨¢ndolo en la Pensi¨®n, con un reparto fenomenal: Inge, Olga Rodr¨ªguez, Jos¨¦ Luis Alcobendas y Markos Mar¨ªn¡±.

Casanovas llevaba tiempo d¨¢ndole vueltas a la idea de poner en escena un material de ahora mismo cuando top¨® con el interrogatorio de B¨¢rcenas. ¡°Llega un momento, por sobredosis, en que las noticias te suenan como ruido, y pens¨¦: ?se percibir¨ªa de un modo distinto en teatro?¡±. Eligi¨® un momento clave: cuando B¨¢rcenas se retracta de lo dicho y declara que contar¨¢ la verdad, o al menos eso vende. ¡°Se trataba de que el texto de Ruz/B¨¢rcenas quedara en una hora, sin a?adir ni cambiar una sola palabra, por supuesto. Se lo mand¨¦ a Alberto San Juan, al Teatro del Barrio, otro lugar que hay que verlo para creerlo. Me contest¨® enseguida y me propuso dirigirla, pero ya no era posible, mi hija iba a nacer en mayo. As¨ª que lo ha hecho ¨¦l con Pedro Casablanc y Manolo Solo, que est¨¢n formidables. Ve¨ªamos muy claro a Casablanc, y aunque estaba de gira con Tirano Banderas se apunt¨® en seguida¡±.

Todav¨ªa le pasma que Ruz/B¨¢rcenas se haya podido hacer tan r¨¢pido. ¡°Esa es la fuerza del teatro, esa es una de nuestras grandes bazas. Tenemos la posibilidad de contar lo que est¨¢ pasando y a menudo no lo hacemos¡±.

Casanovas se embala hablando de la escena off madrile?a. ¡°Es algo realmente serio. Se est¨¢n estrenando una cantidad espectacular de textos. En condiciones precarias, desde luego, pero muchos dramaturgos pueden foguearse y crecer en espacios singulares, que convierten en una experiencia el hecho de ir al teatro: lo han puesto de moda y se han ganado a pulso al p¨²blico joven. Son salas con marca, con un discurso claro, en las que sabes lo que vas a ver, y eso es important¨ªsimo. En Barcelona estamos perdiendo un poco ese tren, porque hay una dificultad grande para abrir y mantener espacios. Faltan salas y faltan l¨ªneas definidas. Otro aspecto a destacar es la predisposici¨®n de actores conocidos y cargados de trabajo que se apuntan a hacer funciones cobrando muy poco, por pura pasi¨®n. En ese sentido, la actitud de Casablanc es ejemplar¡±. Entre los proyectos de Jordi Casanovas est¨¢ su debut en castellano con una pieza que ha escrito en un seminario de dramaturgia de la SGAE coordinado por Alfredo Sanzol. ¡°Se inspira en ese centro comercial donde aparecieron heces, para decirlo finamente, en las alb¨®ndigas que serv¨ªan. La comedia se titular¨¢ K?ttbulle, que es como le llaman a las alb¨®ndigas en Suecia¡±.