El traductor como editor
Mark Twain y J.M.Barrie en mod¨¦licas ediciones electr¨®nicas
La editorial digital ?Hjckrrh! debe su curioso nombre al grito del Grifo en el cap¨ªtulo IX de Alicia en el pa¨ªs de las maravillas. Como reza el lema del proyecto: ¡°Unos acaban siendo impresentables, otros empiezan siendo impronunciables¡±. ?Hjckrrh! es un proyecto de unos traductores radicados en Barcelona, que han decidido aprovechar las posibilidades de las nuevas tecnolog¨ªas para traducir, editar y vender obras, sobre todo en el dominio p¨²blico, que susciten en ellos ¡°un inter¨¦s intelectual o literario¡±.
La editorial ha publicado ya Soliloquios de Mark Twain: que incluye dos piezas antiimperialistas donde toman la palabra el zar Nicol¨¢s II y el sanguinario rey belga Leopoldo II. A ellos hay que a?adir dos recientes novedades. La primera es la curiosa Lady Nicotina, de James Matthew Barrie, hoy recordado, si acaso, por ser el autor de Peter Pan, pero que fue muy famoso en su ¨¦poca y respetado por sus colegas (Stevenson le escribi¨® a Henry James que se ve¨ªa ¡°reducido a dos de mis contempor¨¢neos, t¨² y Barrie¡±). La obra es un canto al tabaco, en labios de un narrador que decide dejar de fumar al casarse. El abandono del vicio presenta muchas ventajas, como el ahorro, que permite ¡°el placer de decorar la salita con una nueva pieza de mobiliario cada mes¡±. El tono ir¨®nico, la descripci¨®n casi maniaca de los rituales del fumador y los buenos recuerdos asociados a las veladas fumando con amigos componen una obra gozosa y amena.
El tribunal, de Eva Gore-Booth, es un breve texto que se inscribe en el proyecto Gran Guerra, en el que la editorial ir¨¢ publicando, en el centenario de la proclamaci¨®n de la Primera Guerra Mundial, obras relacionadas con ella. El ej¨¦rcito de Reino Unido se nutri¨® de voluntarios hasta 1916, cuando se instaur¨® el reclutamiento obligatorio. A ra¨ªz de esta medida aparecieron objetores de conciencia, que fueron objeto de todo tipo de malos tratos, y de juicios como el que da nombre a este relato.
Las ediciones digitales de ?Hjckrrh! son mod¨¦licas en m¨¢s de un aspecto: Lady Nicotina tiene abundantes ilustraciones con textos que fluyen a su alrededor, aunque cambie el tama?o de letra (una de las ventajas del libro electr¨®nico). Siempre consta el tama?o en palabras de los libros, dado que el n¨²mero de p¨¢ginas puede variar. Por ¨²ltimo, un blog del editor informa sobre las obras y sus peripecias, como los kafkianos conflictos sobre copyright que mantienen con las plataformas de venta.
Lady Nicotina. J. M. Barrie. Ilustraciones de M. B. Prendergast. Traducci¨®n de Libertad Aguilera. 53.000 palabras. 4,99 euros.
El tribunal. Eva Gore-Booth. Traducci¨®n de Juan Gabriel L¨®pez Guix. 5.500 palabras. 0,99 euros.
Obras para Apple, Kindle y Kobo.
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