Tan complejo, tan humano

Durante toda su historia el cine ha citado con admiraci¨®n y amor la obra de Charles Dickens. La ¨²ltima vez, en la conmovedora Mas all¨¢ de la vida. Eastwood homenajeaba a Dickens a trav¨¦s de aquel hombre solo e infeliz al que ver el m¨¢s all¨¢ le creaba toneladas de sufrimiento, y cuyo ¨²nico placer y consuelo en sus insomnes noches era escuchar los audiolibros que hab¨ªa grabado el actor Derek Jacobi leyendo las novelas y relatos del autor de David Copperfield. Por mi parte, nunca he perdido la buena costumbre de releer al maravilloso Dickens. Lo que cuenta a veces puede ser muy triste, pero siempre me siento arropado con sus historias, me pone de buen humor, de acuerdo con la vida. Y nunca me olvido en momentos especialmente bajos o confusos del arranque de Historia de dos ciudades: ¡°Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos, la edad de la sabidur¨ªa y tambi¨¦n de la locura, la ¨¦poca de las creencias y del escepticismo, la era de la luz y de las tinieblas, la primavera de la esperanza y el invierno de la desesperaci¨®n¡±.

Sabiendo muchas cosas de las inolvidables criaturas que pari¨® Dickens, conoc¨ªa pocos datos de su propia existencia. Ralph Fiennes nos habla de ella en La mujer invisible. Tambi¨¦n de una personalidad muy compleja, de su anverso y su reverso, de su generosidad y su crueldad, de sus luces y sus sombras.

Comienza con una mujer que pasea compulsivamente por una playa, en un ritual tan acelerado como cotidiano. Es treinta?era, ensaya una obra de teatro del difunto Dickens y de su amigo Wilkie Collins, que ser¨¢ interpretada por ni?os, todo en su expresi¨®n denota un tormento antiguo y sin resolver, su sol¨ªcito marido revela muy ufano a los testigos del ensayo que su esposa trat¨® a Dickens, se llama Nelly Ternan.

Ralph Fiennes, que hab¨ªa adaptado en vano la shakesperiana Coriolanus ambient¨¢ndola en el mundo actual, narra con notable estilo y tono inquietante la historia de amor entre una cr¨ªa de 18 a?os y un Dickens de 46, casado con una mujer adiposa que conoce exhaustivamente todos los matices y recovecos del complicado car¨¢cter de su marido y que ha parido 10 hijos. Nos cuenta que Dickens afortunadamente no fue un maldito, que viv¨ªa desahogadamente junto a su numerosa familia gracias a sus libros, la remunerada lectura p¨²blica de ellos, las obras de teatro que dirig¨ªa. En la Inglaterra victoriana, tan hip¨®crita y acad¨¦mica ella, Dickens es reconocido y venerado por todo el mundo, es lo m¨¢s parecido a una estrella del rock en el tiempo que vivimos. Enamorarse de una mujer tan joven estando casado puede desafiar las reglas del juego, tambi¨¦n arruinar su esplendorosa carrera. La incertidumbre, los miedos, las dudas, las esperanzas y las contradicciones de esta at¨ªpica pareja est¨¢n bien descritas. Tambi¨¦n el tono de la ¨¦poca que les toc¨® vivir. Y son veraces no solo las interpretaciones de Fiennes y de Felicity Jones, sino tambi¨¦n la de aquellos que pueblan su entorno. Al principio aparece una frase de Dickens en la que afirma su convencimiento de que todos los seres humanos escondemos secretos ante los otros. De eso trata esta interesante pel¨ªcula.