El romanticismo invade Mil¨¢n
La semana de la moda italiana apuesta por el optimismo para la primavera/verano 2015 En la pasarela lo r¨²stico convive con la tecnolog¨ªa y lo deportivo se mezcla con la costura.
Los carpinteros han tenido una semana muy intensa en Mil¨¢n. La madera de pino sin tratar parece ser el h¨¢bitat m¨¢s adecuado para presentar las nuevas propuestas de moda femenina para la primavera de 2015. En un espacio que colocaba al publico sobre gradas de madera, y a las modelos sobre el suelo de piedra de un antiguo garaje convertido en galer¨ªa de arte, Sportmax present¨® un sobria colecci¨®n de actitud relajada, materiales r¨²sticos y estudiado patr¨®n, que pon¨ªa en valor las posibilidades que la tecnolog¨ªa puede ofrecer para renovar el aspecto de los tejidos naturales. Dio al lino un p¨¢tina brillante, y convirti¨® visualmente al cuero en rafia, trenz¨¢ndolo y creando con su trama enormes cuadros vichy en negro y crema, acabados en flecos.
Y despu¨¦s llego el romanticismo, una tendencia en v¨ªas de recuperaci¨®n, a tenor de lo visto los ¨²ltimos d¨ªas. En Blumarine, con invitaci¨®n de madera de pino, los bordados de flores crearon un jard¨ªn sobre transparencias en blanco y carne, que poco a poco dio paso al brillo y al color. M¨¢s interesante, tambi¨¦n m¨¢s moderno, fue el punto de vista sobre la mujer rom¨¢ntica que ofreci¨® Giambattista Valli en la presentaci¨®n de su nueva marca Giamba, pensada para una mujer m¨¢s joven. Una silueta ani?ada y muy corta, que dejaba ver las interminables piernas de las modelos con medias blancas o negras decoradas con plumettis. Con un punto brit¨¢nico, las prendas eran delicadas y frescas. Los patrones, juguetones, capaces de ense?ar un vestido de talle alto por delante, pero que marca la cintura por detr¨¢s, exhibieron la sabidur¨ªa en el corte de un dise?ador que ya es un referente de buena costura.
Tambi¨¦n era rom¨¢ntica la Pocahontas que Etro, la marca que ha hecho del folk un ADN, hizo desfilar sobre un suelo de arena frente a una puesta de sol. Inspiraci¨®n navajo en los estampados sobre muselina, flecos rematando los mini vestidos poncho, y una revisi¨®n de las proporciones ¨Cfaldas a paneles en un nuevo largo, con chaquetas cortas¨Crenovaron una tendencia, la del viejo oeste, que ya va por su en¨¦sima versi¨®n.
Missoni puso en la pasarela a una bohemia exc¨¦ntrica con turbante, que bien podr¨ªa ser una Diana Vreeland de vacaciones en Capri, ahora que la m¨¢s famosa editora de moda del s. XX est¨¢ siendo revisada como un nuevo icono de la modernidad. ?ngela Missoni mezcl¨® el punto en zigzag ¨Cel famoso emblema de la casa¨Ccon seda estampada y les dio orden de volar. Por ah¨ª, por esa fluidez que daba movimiento a las prendas, y por el colorido de veraniego sorbete, se col¨® tambi¨¦n el romanticismo en forma de ligereza y feminidad.
Tod's la marca del grupo que preside Diego della Valle y que dise?a Alessandra Facchinetti, cre¨® un jard¨ªn urbano de laber¨ªntica geometr¨ªa en el maravilloso Pabell¨®n de Arte Contempor¨¢neo, una joya de la arquitectura del s. XX. La tendencia era urbana, con toques ecuestres y de jardiner¨ªa, donde destac¨® el cuero, y no precisamente el de los accesorios, g¨¦nesis de la marca, sino el de las chaquetas cortas de sorprendente estructura y los cinturones delantal.
Por la tarde, las calles del cuadrado de oro del comercio Milan¨¦s, bull¨ªan de gente. Esperaban la entrada al desfile de Versace, en pleno centro del cuadrado, mientras se hac¨ªa evidente que la crisis tambi¨¦n afecta al comercio de la ciudad. Tiendas vac¨ªas y poca actividad. A¨²n as¨ª, y gracias a la acertada ley de mecenazgo que impera en Italia, las grandes compa?¨ªas de la moda se esfuerzan por contribuir al esplendor de su entorno y Versace se enorgullece de haber devuelto la belleza a una parte de las Galer¨ªas Vittorio Emmanuele II, en plena plaza del Duomo. Un cat¨¢logo de im¨¢genes da fe de la cuidadosa restauraci¨®n de capiteles de piedra y columnas, realizada por expertos artesanos siguiendo las t¨¦cnicas originales del s. XVIII.
Con lo ¨²ltimo en tecnolog¨ªa y un casting menos lucido que en temporadas anteriores, present¨® Donatella Versace la ropa que vender¨¢ la pr¨®xima temporada. Un desfile que parec¨ªa un d¨¦j¨¤ vu en la sastrer¨ªa y los minivestidos sesenteros, y que exhibi¨® una cierta frescura en los cortes geom¨¦tricos y en una versi¨®n en cristal y color de la cota de malla met¨¢lica que tantos ¨¦xitos ha dado a la casa. Versace necesita un hurac¨¢n.
En su cuarta jornada, un soleado s¨¢bado, Tomas Maier cit¨® a la audiencia a su desfile de Bottega Veneta. Y el romanticismo, en clave de ballet y tonos empolvados, se hizo t¨ªmido y contenido en elegantes siluetas de bailarina que desplegaron gracia y dieron al cuerpo libertad.
Giorgio Armani (que por algo tiene teatro propio) abri¨® su desfile con un cortometraje de director Paolo Sorrentino. Rodado en las islas de Lipari y Stromboli, mezcla im¨¢genes del mar y de la playa con la fantasmag¨®rica presencia de lo que un d¨ªa debi¨® ser una edificaci¨®n fascinante y ahora es una estructura de piedra arrasada por la lava de un volc¨¢n. Tambi¨¦n aparece una pareja muerta y un perro que corre sobre la arena. Afortunadamente, el desfile dej¨® atr¨¢s el misterio y la angustiosa decadencia de las im¨¢genes, y Arena, que es el nombre de la colecci¨®n, iba de organzas luminosas y cristales delicadamente instalados sobre gasas drapeadas.
Ya quedan pocas citas para cerrar la semana, y lo visto en Mil¨¢n pone el foco en los tejidos y la excelente factura del textil italiano, pero no significa ninguna profunda novedad. Que lo comercial es el Santo Grial de una moda que exporta a los cinco continentes ¨C¡°exportare, exportare¡± es la cura que propone Mario Boselli, el presidente de la Camera Nazionalle della Moda Italiana a todos los males de la industria¨C lo demuestra el hecho de que los incre¨ªbles zapatos de la colecci¨®n que present¨® Fay, h¨ªbridos perfectos entre la zapatilla deportiva y la sandalia con plataforma, no se van a comercializar por su punto de objeto raro y exc¨¦ntrico. Las prendas, de estilo deportivo acabadas con todos los artilugios de la mejor costura, eran bellas, pero los zapatos daban paso al futuro. Cambiaban cosas. Avanzaban. Y la moda va de eso, de avanzar.
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