El viaje art¨ªstico de Carmen Laff¨®n por la ribera del Guadalquivir
El Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo expone 120 obras de la artista sevillana dedicadas a los paisajes de su vida
Cuando se habla de los grandes representantes de la figuraci¨®n espa?ola de la segunda mitad del siglo XX, el nombre de Carmen Laff¨®n (Sevilla, 1934) encabeza junto a Antonio L¨®pez los primeros puestos de la lista. Due?a de una expresi¨®n tan contemplativa como asc¨¦tica, Laff¨®n sigue dedicada incansablemente a sus temas de siempre. La diferencia es que considera que en esta ¨²ltima etapa de su carrera ya no tiene que demostrar nada a nadie y todo lo afronta con una libertad y radicalidad que solo se permiten quienes est¨¢n muy seguros de lo que quieren. El dibujo, el paisaje y todo aquello que la acompa?a en sus movimientos diarios, son los grandes protagonistas de su universo art¨ªstico. La exposici¨®n Carmen Laff¨®n. El paisaje y el Lugar, que ma?ana se abre al p¨²blico en el Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo de Sevilla, y en primavera en la Alhambra de Granada, es un perfecto muestrario de las obsesiones creativas de la artista.
Carmen Laff¨®n pertenece a ese grupo de artistas que no cree necesario hablar de su obra. Lo que haya que decir tiene que o¨ªrse de las pinturas y esculturas en las que trabaja desde muy jovencita, con solo 12 a?os. Tampoco le gusta hacer exposiciones. La ¨²ltima gran retrospectiva se le dedic¨® en el 1992 en el Reina Sof¨ªa.
De apariencia fr¨¢gil y car¨¢cter de roble, a sus 80 a?os despliega una energ¨ªa envidiable para cualquier jovencito. Poco amiga de abandonar su Andaluc¨ªa natal, aunque Roma, Par¨ªs o Nueva York tengan pocos secretos para ella, Laff¨®n confiesa sentirse en un momento en el que lo que importa es hacer lo que le d¨¦ la gana. Sin pensar en el mercado (¡°todo lo que aqu¨ª expongo es invendible¡±) ni en la cr¨ªtica, porque ella es la m¨¢s exigente consigo misma y porque, sobre todo, trabaja por puro placer. ¡°Entre Sevilla y Sanl¨²car de Barrameda est¨¢n mi casa y mi estudio. Aqu¨ª he nacido, crecido y vivido. Tengo mi vi?a, mis frutales, el mar, el Coto. ?Por qu¨¦ me tendr¨ªa que ir a otro sitio?¡±.
Reconoce que esa independencia tan radical puede ser la causa de sus escasas exposiciones fuera de Espa?a. ¡°Se han hecho algunas, pero tampoco es eso importante para m¨ª¡±. En cambio s¨ª que cree que la figuraci¨®n deber¨ªa de estar mejor representada en museos como el Reina Sof¨ªa. ¡°Han colgado una obra m¨ªa de hace mucho tiempo, pero no me voy a quejar. Otros est¨¢n peor representados¡±.
No me quejar¨¦ de mi presencia en el Reina. Otros est¨¢n peor representados Carmen Laffon
La exposici¨®n en el CAAC sevillano est¨¢ ¨ªntegramente dedicada al paisaje. Est¨¢n las grandes y suntuosas vistas desde su estudio de Sanl¨²car la desembocadura del Guadalquivir, (el r¨ªo que viene de Sevilla y muere en Sanl¨²car para hacerse mar abierto) y, en la margen de Huelva, el Coto de Do?ana.Y tambi¨¦n est¨¢n los paisajes m¨¢s modestos formados por las vi?as y emparrados de su finca, las chumbares, los aperos de labranza y todos esos lugares de extra?a belleza, humildes y secos, ¡°tan fr¨¢giles y tan amenazados que pueden ser destruidos sin que la sociedad tome conciencia de lo que supone esa p¨¦rdida¡±.
El CAAC, situado dentro de la Cartuja, es el espacio id¨®neo para que la obra de Laff¨®n se despliegue en forma de series. El comisario, Juan Bosco D¨ªaz-Urmeneta, ha hecho que cada tema respire en una sala propia, aunque creando siempre una conexi¨®n con la siguiente sala. Ella ha querido que la primera pieza del recorrido se exponga en el Jard¨ªn de la Prioral. Bajo una p¨¦rgola y junto a una fuente blanca ha colocado un bronce, su ¨²ltimo trabajo. Es un relieve muy bajo, casi un dibujo hecho en metal sobre una gran mesa de trabajo en el que se recrean los planos y dibujos de 1976 para un espacio que entonces era pr¨¢cticamente desconocido por los sevillanos.
En las primera salas se encuentran los dibujos de la ribera de la Cartuja realizados en los a?os 70, como un acto de protesta contra un proyecto de construcci¨®n de 75.000 viviendas en la zona. En aquella protesta de artistas participaron muchos pintores y arquitectos junto a las asociaciones vecinales. En esos dibujos a l¨¢piz y carb¨®n los matorrales y arbustos est¨¢n realizados con una delicadeza extraordinaria. En algunos, al fondo aparece Sevilla casi fundida en el bosque de matojos.
Profesora de Bellas Artes y una de las pocas mujeres acad¨¦micas, mientras recorre la exposici¨®n habla con pasi¨®n del dibujo y de los grandes pintores que lo han ensalzado, como Poussin o Claudio de Lorena. Tambi¨¦n Turner o Constable. Cuenta que los jardines y los bosques ejercen una atracci¨®n irresistible para ella. Como muchos otros grandes artistas, cada rinc¨®n del Generalife le despierta la capacidad de imaginar. Las fuentes, las calles de adelfas o los caminos de cipreses del deslumbrante jard¨ªn ¨¢rabe son retratados por Laff¨®n como una invitaci¨®n a que cada espectador construya su propia po¨¦tica.
Como en un laberinto art¨ªstico, en cada sala o patio interior de la cartuja se suceden las sorpresas: las instalaciones dedicadas a la cultura milenaria de la cal, la Herrer¨ªa, la Vi?a, los cielos que cre¨® para el palacio sevillano de San Telmo, las vistas del Coto hechas con tal realismo que llega a la abstracci¨®n m¨¢s absoluta, la instalaci¨®n dedicada a El Quijote, las parras.
Recorrida la exposici¨®n, esta artista meticulosa y detallista hasta la extenuaci¨®n confiesa que la mayor parte de las obras expuestas proceden de su colecci¨®n personal. ¡°Casi todo es invendible. ?Qui¨¦n se va a llevar las espuertas cargadas de uvas?¡±, se pregunta como ejemplo.
?De qu¨¦ vive entonces? Adem¨¢s de descender de una adinerada familia sevillana y de haber enviudado dos veces, Laff¨®n explica que por sus dotes para el dibujo y el retrato ha podido vivir bastante bien de los retratos por encargo, algo que la crisis y el control de las cuentas ha hecho desaparecer. Su retrato m¨¢s pol¨¦mico fue el realizado a Miguel Blesa, presidente de Caja Madrid entre 1996 y 2009, investigado judicialmente por irregularidades durante su gesti¨®n.
Laff¨®n recuerda que antes hab¨ªa realizado su famoso retrato a los reyes Juan Carlos y Sof¨ªa y a numerosos pol¨ªticos y banqueros. ¡°La noticia fue una pesadilla para m¨ª. Lo hice entre enero de 2008 y febrero de 2010. Ten¨ªa que haberlo entregado un mes antes. Me retras¨¦, como casi siempre, y cuando ten¨ªa que entregarlo, ya le hab¨ªan cesado. A m¨ª se me hab¨ªa pagado en los plazos acordados con Caja Madrid y lo que hice fue mandar a Manuel, uno de mis ayudantes, quien lo embal¨®, lo entreg¨® personalmente en las oficinas de la Plaza del Celenque, en la sede oficial. ?l no lo ha llegado a tener nunca, creo que tampoco lo ha visto terminado. Debe de estar en los s¨®tanos y seguramente no se vea nunca¡±. Laff¨®n declina hablar de dinero, aunque la cantidad publicada en su momento fue de 159.000 euros.
?C¨®mo fue la relaci¨®n?. ¡°Como con otros. Le vi varias veces. En Madrid y en mi estudio en Sanl¨²car. Solo recuerdo que no sab¨ªa posar. Se mov¨ªa mucho. Era incapaz de estarse quieto¡±.
Babelia
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