Ren¨¦ Pollesch hace re¨ªr al p¨²blico sobre dilemas existenciales
El autor y director es uno de los m¨¢s importantes e interesantes de Alemania Su propuesta esc¨¦nica ofrece un formato diferente al teatro de la representaci¨®n
"Tengo dos posibilidades. Una es reducirte a un espejo de m¨ª mismo, abusar de ti como el medio para mi realizaci¨®n personal. La otra es verte como si fueras un abismo inconmensurable, alguien de quien en realidad no s¨¦ nada". As¨ª habla Sarah, uno de los personajes de Gasoline Bill, la obra de teatro del autor y director Ren¨¦ Pollesch (Friedberg, 1962) que el Kammerspiele de M¨²nich presenta en la Sala Valle Incl¨¢n del 24 al 26 de octubre. El director es considerado por la prensa alemana como el ¨²nico que hace re¨ªr al p¨²blico sobre dilemas existenciales. En sus producciones, que giran por los teatros m¨¢s importantes de Alemania e internacionalmente desde Europa hasta Am¨¦rica del Sur, los temas constantes son el psicoan¨¢lisis, el amor y el capitalismo.
Tengo dos posibilidades. Una es reducirte a un espejo de m¨ª mismo
Extracto de Gasoline Bill
En Gasoline Bill entre alusiones a la filosof¨ªa de Jean Luc Nancy y Slavok Zizek y al psicoan¨¢lisis de Freud, cuatro personajes, dos hombres y dos mujeres, sin un nombre que los identifique constantemente, dialogan sobre las historias de amor que no funcionan por querer ver en el otro una tabla de salvaci¨®n. Los int¨¦rpretes no representan dos parejas ni heterosexuales, ni homosexuales. El teatro de Pollesch no es un teatro de la representaci¨®n, sino un teatro de variedades que es tambi¨¦n discursivo, as¨ª el texto es repartido en los personajes como una polifon¨ªa que es un mon¨®logo. Algunas de las escenas incluso reflejan sketches del grupo humorista brit¨¢nico Monty Python.
Al inicio de la obra uno de los actores infiere sobre la existencia de una pareja de casados llamados se?or y se?ora Brainsample (muestra cerebral), que viven una vida com¨²n y corriente. Esta pareja no aparece nunca en el escenario, su existencia se enuncia como una posibilidad de vivir una vida ¡°ordinaria¡±, sin los arrebatos y la confrontaci¨®n de la que tratan los personajes en la obra. El amor o la raz¨®n para ser amado es mirada desde varios ¨¢ngulos, pasando por suponer tambi¨¦n que el amor es una reacci¨®n qu¨ªmica, de la que es posible liberarse. En un momento el di¨¢logo entre los actores resuelve el interrogante sobre lo que es el deseo no a trav¨¦s de la pregunta ¡°qu¨¦ quiero¡±, sino ¡°?qu¨¦ quieres de m¨ª?". La conclusi¨®n es que la imposibilidad de identificarnos como objeto de deseo se convierte en un histerismo que cuestiona y rechaza la posibilidad de ser amado. "?Por qu¨¦ me dices que me deseas?¡±, pregunta uno de los actores al otro casi en forma de reproche.
El teatro de Ren¨¦ Pollesch no es un teatro de la representaci¨®n, sino un teatro de variedades discursivo
La mitad de un adosado que gira lentamente es la escenograf¨ªa que hace de vivienda y de saloon. Sobre una de las paredes se lee last chance (¨²ltima oportunidad) y sobre otra keep out (mant¨¦ngase afuera). La casa giratoria es una met¨¢fora de las ruedas de oraci¨®n de mano que se usan en la tradici¨®n budista tibetana para encomendar una plegaria. A este artefacto se le introduce por un orificio un papel con una oraci¨®n personal. Los budistas creen que al hacer girar la rueda con el mensaje dentro, esta recita la oraci¨®n por ti. Los personajes en la obra hacen referencia constante a este instrumento. Su s¨²plica es el liberarse de su carga emocional, encontrar la salvaci¨®n a trav¨¦s de algo externo, o de alguien. Pero la deducci¨®n que hacen los actores es que no hay ning¨²n apoyo de afuera que valga. "?Podr¨ªa ayudarme?, pregunta uno de los int¨¦rpretes y el otro le responde - "?Ayudar?. No lo s¨¦. He salvado a dos delfines por medio de Greenpeace y cada vez me siento m¨¢s triste", esta frase la repite la misma persona a lo largo de la obra como si fuera un mantra.
Ser un canal para la salvaci¨®n del otro es el leitmotif que el director tambi¨¦n usa como di¨¢logo dentro de la obra para explicar por qu¨¦ va la gente a ver teatro. Uno de los actores traspasa la l¨ªnea invisible entre espectador e int¨¦rprete y alude a la audiencia directamente dici¨¦ndo: ¡°cuando alguien aqu¨ª, sobre el escenario, llora, usted se libra de tener que llorar en su casa. Nosotros expresamos todo tipo de emociones para que usted pueda tener la mente libre de pensar en algo tan banal como d¨®nde ha dejado el bol¨ªgrafo que no encuentra desde hace unos d¨ªas¡±. Seg¨²n Pollesch si al final de la obra el p¨²blico sale con el pensamiento tan ligero como para dedicarlo a este tipo de peque?eces cotidianas, entonces la obra de teatro ha sido un ¨¦xito.
Babelia
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