Un extraordinario fen¨®meno teatral a trav¨¦s del tiempo
Estrenada en 1844, la obra de Zorrilla se ha convertidoen la m¨¢s representada en los escenarios espa?oles
Son dos los grandes mitos aportados por la literatura espa?ola a la cultura universal: el Quijote y Don Juan, con sus arquetipos derivados: el quijotismo, la donjuan¨ªa. Si bien se considera el Don Juan como una criatura de Tirso de Molina (en El burlador de Sevilla), en Espa?a el que cuenta con mayor repercusi¨®n hasta nuestros d¨ªas es el Don Juan Tenoriode Jos¨¦ Zorrilla (1844).
Se trata de la obra m¨¢s puesta en pie en los teatros de nuestro pa¨ªs. Y ello a pesar de haber sido escrita en escasas tres semanas para rellenar la programaci¨®n de una compa?¨ªa teatral en apuros. Se debe, en parte, a la tradici¨®n de representarla haci¨¦ndola coincidir con el D¨ªa de Difuntos, el 1 de noviembre, costumbre anterior a la obra de Zorrilla, que traspas¨® las fronteras espa?olas y se relacionaba con las apariciones de ¨¢nimas por esas fechas.
El Tenorio de Zorrilla lleg¨® a ser representada de forma simult¨¢nea por 14 compa?¨ªas distintas en el Madrid del siglo XX, hasta la llegada de la Transici¨®n. Al cr¨ªtico y escritor Eduardo Haro Tecglen, como a otros muchos espa?oles, le gustaba en su juventud el Tenorio. ¡°Me pareci¨® durante alg¨²n tiempo la mejor obra del teatro espa?ol de todos los tiempos¡±, se?al¨® en su d¨ªa en las p¨¢ginas de EL PA?S. En su teor¨ªa sobre el personaje se acercaba a la que hoy mantiene la directora Blanca Portillo. Haro aseguraba: ¡°Don Juan es el sue?o de un frailecillo privado de libertad (¨¦l era Do?a In¨¦s), reprimido; conventuado por su bastard¨ªa. Dudo que sea un seductor: s¨®lo un violador¡±.
Lo cierto es que muchos escritores espa?oles y extranjeros han terminado recreando su propio Don Juan (Moli¨¨re, Da Ponte, Torrente Ballester, Saramago, Max Frisch, Henri Bataille, Camus¡), sin olvidar que estamos ante una figura a la que fil¨®sofos, psiquiatras, poetas, cineastas, pintores y hombres de letras y ciencias llevan diseccionando desde hace siglos. Muchos investigadores del comportamiento humano han visto en Don Juan una doble sexualidad (Mara?¨®n) o una histeria (Dr. Rodr¨ªguez Lafora).
Cuando Don Juan llega al escenario, que es como se le suele concebir, ya no interviene s¨®lo la voz del autor. Directores y actores se comportan m¨¢s o menos ben¨¦volos y emp¨¢ticos con Don Juan, hasta el punto de transformarle y presentarlo, a veces, como un h¨¦roe rom¨¢ntico. Pero hay otras lecturas como el Don Juan. Pr¨ªncipe de las tinieblas, de Josep Palau i Fabre, puesto en pie por Hermann Bon¨ªn y marcado por el desasosiego del hombre contempor¨¢neo o el Don Juan sim¨¦trico, de Jes¨²s Campos, en el que transporta al protagonista a la realidad actual. Otros donjuanes son salvados de la muerte y ha habido autores como Echegaray o los hermanos ?lvarez Quintero que han recreado a don Juan en su vejez, propuesta que en los ¨²ltimos a?os ha tenido similares audacias esc¨¦nicas en Espa?a, como las transformadas en curiosos mon¨®logos en La sombra del Tenorio, de Alonso de Santos, interpretada por Rafael ?lvarez El Brujo, o en Don Juan historia amarga de m¨ª, de Miguel Gallardo.
Pero lo habitual, desde que se estrenara el Tenorio en 1844, es que no se dieran grandes rupturas con Zorrilla salvo algunas como que la actriz Ana Mariscal abordara el papel protagonista, o como la direcci¨®n de Cayetano Luca de Tena, que dej¨® que la gran Mar¨ªa Jes¨²s Vald¨¦s saliera sin velo y desmelenada, dando a entender que se hab¨ªa producido una violaci¨®n.
Ya en el siglo XX, una larga lista de actores y actrices ha desfilado por el personaje: Margarita Xirgu, Amparo Rivelles, N¨²ria Espert, Manuel Dicenta, Jorge Mistral, Mar¨ªa Dolores Pradera, Adolfo Marsillach (como actor y director), Amparo Soler Leal, Carlos Lemos, Concha Velasco, Luis e Ismael Merlo, Juan Diego, Ana Bel¨¦n, Maribel Verd¨², Fernando Cayo, Gin¨¦s Garc¨ªa Mill¨¢n y Silvia Mars¨®, entre otros. Quiz¨¢ a lo largo del siglo XX el Don Juan m¨¢s afamado fue el puesto en pie por Luis Escobar con decorados de Dal¨ª (en 1949, 1950 y 1964). Aunque los m¨¢s devotos de este texto fueron, sin duda, los directores Jos¨¦ Tamayo y Gustavo P¨¦rez Puig.
En los ¨²ltimos a?os ha habido intentos de recuperar a Don Juan para el espectador contempor¨¢neo, como el de Eduardo Vasco con la Compa?¨ªa Nacional de Teatro Cl¨¢sico, quien program¨® entre el a?o 2000 y 2003 un ciclo de espect¨¢culos dedicados a Don Juan con visiones distintas del texto de Zorrilla, de Tirso, de Moli¨¨re y de autores contempor¨¢neos, con directores como Vasco, Alfonso Zurro, Maurizio Scaparro, Fern¨¢ndez Montesinos, Miguel Narros y Jean Pierre Miquel.
Babelia
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