Televisi¨®n informativa y educativa
¡®En tierra hostil¡¯ rompe con el entretenimiento y la ficci¨®n en ¡®prime time'
Desde hace dos semanas, En tierra hostil, un programa de reportajes que viaja a los rincones m¨¢s violentos del planeta, ocupa el prime time de Antena 3 en la noche de los mi¨¦rcoles. Se trata casi de una heroicidad en un territorio dominado por la ficci¨®n y el entretenimiento, pero lo cierto es que los espectadores han apoyado la apuesta: 3,2 millones de espectadores comprobaron las duras condiciones de vida de los buscadores de colt¨¢n en ?frica en su primera entrega, y la semana pasada el reportaje dedicado a R¨ªo de Janeiro convoc¨® ante la pantalla a cerca de 2,5 millones de televidentes y acumul¨® un 13,1% de cuota. En el entorno del madrile?o Museo de Cera, en el que la Historia se hace casi carne, los reporteros Alejandra Andrade y Jalis de la Serna explican a este peri¨®dico los m¨¦todos y motivaciones de su trabajo, que fotograf¨ªa la historia de hoy, la que late todos los d¨ªas.
Su trabajo comienza mucho antes de que se graben las primeras im¨¢genes: ¡°Mi productora, Marcela Morales, viaja antes al terreno para conseguir entrevistas con comandos de narcos, con sicarios¡ habla con ellos, investiga el terreno durante muchos meses. Hay una producci¨®n brutal detr¨¢s de cada programa¡±, relata Alejandra Andrade. ¡°La labor es ¨ªmproba por parte de toda la redacci¨®n, y es necesario preparar hasta el menor detalle burocr¨¢tico¡±, insiste Jalis de la Serna que menciona el caso del reportaje grabado en el Congo, donde ¡°para entrar, tuvimos que hacerlo a trav¨¦s de Ruanda para llegar a la zona de Goma; y s¨®lo para tener un visado de tr¨¢nsito hab¨ªa que pedirlo con meses de antelaci¨®n: no pod¨ªamos transitar por Ruanda, con lo que tuvimos que estar un d¨ªa m¨¢s en el Congo; hay miles de problemas¡±.
Grabamos entre 20 y 30 horas para quedarnos con 70 minutos
Alejandra Andrade insiste en que intentan ¡°buscar la mejor f¨®rmula para entrar en cada pa¨ªs y trabajamos mucho en qui¨¦n nos va acompa?ar¡±. Una vez que se llega al destino, comienza la grabaci¨®n del reportaje y parte del trabajo ya debe estar hecho, como asegura Andrade: ¡° la labor de las productoras es que lleguemos con los contactos hechos¡±, aunque ¡°siempre llevamos colchones, por si se te caen personajes, si tienes que renunciar a alg¨²n entrevistado¡ En eso tenemos ya mucho callo, hay un plan A, un B y un V, pero a veces hay que cambiar el rumbo del reportaje¡±.
En tierra hostil es un programa que se elabora sobre el terreno y a pesar de partir de hilos que ya se han trenzado, Jalis de la Serna mantiene una m¨¢xima: ¡°Lo que pasa es lo que conviene¡±; las circunstancias ¡°te van marcando el paso y as¨ª resuelves de una manera o de otra. Si no he podido conseguir tal entrevista, eso me ha servido para buscarme la vida y encontrar otra igual de buena¡±. ¡°Ya llevamos tiempo resolviendo problemas en la calle y la experiencia te hace saber dar la pauta hasta que se resuelven las cosas¡±, apunta Andrade.
En tierra hostil, adem¨¢s, se vuelca al espectador con una est¨¦tica premeditada: ¡°Nosotros decimos que es una road movie, se busca en cada reportaje una estructura en movimiento, crear la informaci¨®n, dosificarla, a?adir m¨²sica para complementar¡ Te respalda una realidad muy dolorosa¡±, afirma de la Serna.
Para que el espectador asista a una entrega de En tierra hostil, el programa ha de dejar de lado mucho material: ¡°Desechamos mucho y es duro, pero no puedes durar m¨¢s de 70 minutos. Grabamos entre 20 y 30 horas para quedarnos con una; intentamos quedamos con lo mejor¡±. Y, por descontado, se trata de un trabajo de alto riesgo: ¡°No somos ningunos kamikazes, minimizamos riesgos, hay cosas que no hacemos, tenemos experiencia, nuestros c¨¢maras Jacobo y Armando son ¡°callejeros¡± como nosotros y sabemos manejar nuestra intuici¨®n. Yo hablo con porcentajes: si tengo que entrar, por ejemplo, en una favela y tengo un porcentaje de seguridad del 95%, entro. Si lo tengo del 90%, no¡±, asegura Alejandra Andrade.
Es un ejemplo de que si das un producto de calidad la gente lo ve
Por su parte, de la Serna asegura que el riesgo siempre est¨¢ presente: ¡°En las minas de el Congo he vivido el peligro, o en Ucrania, donde nos hemos visto envueltos en tiroteo en la calle, pero est¨¢s ah¨ª y te toca dar un paso adelante. Si te dejas afectar por el miedo haces mal tu trabajo¡±. Por descontado, ¡°la dureza de enfrentarte con situaciones que reflejan lo peor del ser humano la asimilas y la clave est¨¢ en pensar que hacemos un trabajo ¨²til; como reportero, est¨¢s en un entorno donde se desprecian los derechos humanos, pero est¨¢s ah¨ª para denunciarlo, no para ser meros espectadores. Mostramos la violencia porque nuestro trabajo es contarlo y crear conciencia para que, tal vez, entre todos podamos aunar voluntades y cambiar estas realidades¡±.
En esta l¨ªnea abunda Andrade: ¡°Nosotros somos unos privilegiados al poder contarlo; a veces crees que no consigues nada, pero lo importante es contarlo. Hay temas de narcotr¨¢fico, por ejemplo, que te parece que est¨¢n lejos, pero al final nos toca de cerca: la coca que llega a los ba?os de las discotecas de Madrid llega porque hay gente que se est¨¢ matando en otros lugares del mundo. Y tenemos el privilegio de que eso se emita en prime time¡±.
De este modo, se puede afirmar que hay un p¨²blico para una televisi¨®n diferente en horario de m¨¢xima audiencia. Un p¨²blico que quiere ver En tierra hostil: ¡°Eso es una triunfada¡±, afirma, euf¨®rica, Andrade. ¡°Es un ejemplo de que si das un producto de calidad la gente lo ve, no todo ha de ser entretenimiento y ficci¨®n. A la gente le puede interesar un programa con valor informativo y educativo. Dar a conocer es educar, lo que no puedes es adoctrinar, pero aportar informaci¨®n siempre es educar, en especial si informas de realidades poco conocidas¡±, remata De la Serna, que agradece ¡°la apuesta valiente de Antena 3. Los directivos han decidido apoyarnos y nos alegramos de que les haya salido bien¡±. ¡°De hecho, pens¨¢bamos que el programa iba a recaer en laSexta¡±, a?ade Andrade.
Adem¨¢s, En tierra hostil se mueve con completa libertad, como afirma Jalis de la Serna: ¡°No hemos tenido cortapisa alguna, desde la elecci¨®n de temas hasta lo que grabamos; a la hora de la edici¨®n todos tenemos jefes, desde luego, y te pueden cambiar el guion o pedirte que acortes una imagen demasiado expl¨ªcita¡ pero en ning¨²n caso editorializar el reportaje¡±. Un trabajo, pues, como afirma Andrade, que nace de ¡°nuestra condici¨®n de reporteros; Jalis y yo somos incapaces de estar en una redacci¨®n, queremos conocer la informaci¨®n en la calle, de primera mano, y los dos tenemos una vocaci¨®n social, de entender y reflejar el entorno que vivimos y qu¨¦ mejor manera de hacerlo que vivi¨¦ndolo, de primera mano. En eso somos privilegiados¡±.
No hemos tenido cortapisa alguna, desde la elecci¨®n de temas hasta lo que grabamos
La entrega de esta noche de En tierra hostil viajar¨¢ a Ucrania y promete emociones fuertes: ¡°Hemos vivido el conflicto desde dentro, en Donnesk, y nos hemos visto envueltos en circunstancias muy conflictivas, hemos estado retenidos, nos han apuntado con kalashnikov grabando tanques de las tropas prorrusas¡ El espectador va a entender la realidad de manera directa y a comprender exactamente el conflicto, va a tener claras las claves¡±
Es En tierra hostil un ejemplo de televisi¨®n verdadera: ¡°lo que mostramos lo hemos vivido de primera mano, hemos estado ah¨ª y lo hemos tenido de frente¡±, afirma Alejandra Andrade.
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