La familia Chillida cede a Canarias el proyecto Tindaya

Eduardo Chillida imagin¨® en Tindaya, Fuerteventura, su propia monta?a m¨¢gica. Un proyecto que naci¨® en 1985, que buscaba representar un verso de Jorge Guill¨¦n, ¡°lo profundo es el aire¡±, y sobre el que el escultor no dud¨® en asegurar que le termin¨® provocando una ¡°extra?a ¨²lcera¡± por las sucesivas pol¨¦micas y pleitos judiciales en los que hasta ahora se ha visto envuelto, 13 a?os despu¨¦s de su muerte. Los herederos del escultor donostiarra han cedido al Gobierno de Canarias y al cabildo de Fuerteventura los derechos del Monumento de Tindaya.

La familia Chillida y el Gobierno de Canarias han suscrito un contrato en el que se establecen una serie de condiciones a cambio de la cesi¨®n de los derechos. La primera de ellas es ¡°el respeto absoluto al proyecto de Chillida¡±; la segunda es el respeto medioambiental y la tercera es la creaci¨®n de una Fundaci¨®n en la que estar¨¢n representados los herederos del escultor, el Gobierno de Canarias y el Cabildo. La cesi¨®n ser¨¢ efectiva una vez que hayan cumplido todas las condiciones, seg¨²n explic¨® ayer la portavoz de la familia. a cambio de tres condiciones:

El Gobierno canario habl¨® ayer de ¡°un hito important¨ªsimo¡±, por boca del consejero de Obras P¨²blicas, Domingo Berriel. La cesi¨®n de los derechos supone, seg¨²n precis¨® Berriel en el pleno del Parlamento canario, un paso m¨¢s para desenquistar el problema, para, se supone, terminar de alumbrar el proyecto m¨¢s ambicioso de Chillida, horadar el coraz¨®n de una monta?a elegida tras haber descartado otros parajes en Sicilia, Finlandia o Suiza.

El Gobierno canario ya intent¨® desbloquear la par¨¢lisis del proyecto a comienzos de 2011, cuando lleg¨® a un acuerdo con la familia del escultor que inclu¨ªa la convocatoria de un concurso p¨²blico para la adjudicaci¨®n de la obra, presupuestada en 75 millones. ¡°Tindaya es un regalo que se hizo a Canarias y solo tendremos la cesi¨®n de los derechos de propiedad intelectual como obra de nuestro padre, pero no tiene una contraprestaci¨®n econ¨®mica¡±, asegur¨® entonces Eduardo Chillida hijo.

¡°Es el ¨²nico proyecto que mi padre nos encomend¨® y si se hace se tiene que hacer bien¡±, apunt¨® en 2013 Luis Chillida, otro de los hijos del escultor cuando el Tribunal Superior de Justicia de Canarias dict¨® una sentencia que paralizaba el proyecto por la protecci¨®n que hab¨ªa dictado el Gobierno auton¨®mico sobre los restos abor¨ªgenes en forma de podomorfos que coronan la cima.

La resoluci¨®n del Tribunal no fue m¨¢s que otro escollo. El primero surgi¨® cuando los planes de Chillida para Tindaya fueron modificados por cuestiones t¨¦cnicas. El escultor ide¨® una cavidad c¨²bica de 50 metros, sin embargo, tras las primeras evaluaciones se determin¨® que el cubo no pod¨ªa exceder de los 40. Luego llegaron las cr¨ªticas de los ecologistas, de los arque¨®logos y de los antropologos y las visitas a los tribunales.