?Qu¨¦ queda del franquismo?
Lo que queda, que es bastante, podemos enfocarlo en t¨¦rminos de visibilidad, as¨ª es muy evidente su pervivencia en el callejero de muchas ciudades y pueblos; y sin embargo quedan a¨²n muchas v¨ªctimas del franquismo enterradas en las cunetas. Tambi¨¦n podr¨ªamos hablar de su presencia institucional; por ejemplo, si tenemos monarqu¨ªa y no rep¨²blica es porque la derecha posfranquista la impuso como condici¨®n para firmar la Constituci¨®n. Pero la influencia m¨¢s profunda y preocupante es la que puede subyacer en nuestra peculiar forma de entender la pol¨ªtica y en algunas relaciones sociales. As¨ª, creo que siguen presentes la falta de civismo o de cuidado por lo p¨²blico, incluida la participaci¨®n pol¨ªtica; la exaltaci¨®n del hegemonismo m¨¢s o menos bipartidista, el clientelismo y sus corrupciones, y un autoritarismo disfrazado de ¡°jerarqu¨ªa¡± o ¡°presidencialismo¡±, en diferentes organizaciones sociales o pol¨ªticas. Aunque puede que una parte de lo anterior tenga ra¨ªces previas al franquismo.
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