Nostalgia de la Cuba que no existi¨®
Laurent Cantet, con guion de Leonardo Padura, bucea en el desencanto de la revoluci¨®n castrista en 'Regreso a ?taca'
Los amigos se re¨²nen en la azotea. Es una isla en calma, el para¨ªso que hace tiempo disfrutaron, la ?taca de su amistad que emerge en mitad de la ?taca de la revoluci¨®n (un reflejo de los versos de Cavafis), de una Cuba que ya no existe y que probablemente, seg¨²n van desgranando sus recuerdos, nunca existi¨®. Se han juntado porque el Ulises de la pandilla retorna tras lustros de exilio en Espa?a. Regreso a ?taca, el ¨²ltimo trabajo de Laurent Cantet, el director de Recursos humanos, El empleo del tiempo y Hacia el sur, el Palma de Oro de Cannes con La clase, es una pel¨ªcula innegablemente de su director y coguionista como de su otro coescritor, Leonardo Padura. Hay nostalgia, palabra y utop¨ªa, como en el cine de Cantet (Melle, Deux-Sevres, 1961), como en las novelas de Padura. Ambos se conocieron en el rodaje de la pel¨ªcula de episodios Siete d¨ªas en La Habana, y acabaron frustrados por no poder desarrollar en el tiempo de un cortometraje todo lo que escrib¨ªan.
En todas mis pel¨ªculas los protagonistas viven estas utop¨ªas que chocan contra la realidad del mundo"
"Foxfire contaba el inicio de una utop¨ªa y aqu¨ª mostramos su final. En todas mis pel¨ªculas los protagonistas viven estas utop¨ªas que chocan contra la realidad del mundo. En este caso, me interesaba filmar a la generaci¨®n de unos sesenta a?os, a la que nunca hab¨ªa retratado, y que ya est¨¢n de vuelta de todo. Y ah¨ª es donde me reconozco. Aquel joven idealista que yo fui ha sufrido las mismas desilusiones de los personajes de Padura. Y puede que tambi¨¦n el espectador, que sentir¨¢ de forma amplia, en muchos aspectos de su propia vida, las traiciones y la desesperanza de esa gente", desglosa Cantet. El franc¨¦s encuentra paralelismos de su grupo de protagonistas con el desmoronamiento de la izquierda europea. "Soy un poco m¨¢s joven que aquellos que apostaron por la revoluci¨®n castrista en mi pa¨ªs. Cuando me empec¨¦ a interesar por la pol¨ªtica ya hab¨ªa empezado el alejamiento franc¨¦s del castrismo. Pero es obvio que todos nos hemos sensibilizado con la mitolog¨ªa revolucionaria. Me atrajo la idea de Padura de poner esa mitolog¨ªa cara a cara ante la realidad cubana. Fueron j¨®venes y formaron parte de aquella mitolog¨ªa. No era parte de la imaginaci¨®n de la izquierda francesa, sino que estuvieron all¨ª". Y sabe de qu¨¦ habla, porque ya hab¨ªa charlado mucho con actores franceses que en su momento se sumergieron en este ideal, y porque su asistente, cubana, le describi¨® c¨®mo dedic¨® los domingos de su juventud en ense?ar a leer a campesinos. "Sent¨ªa que participaba en la creaci¨®n del hombre nuevo que promulgaba el Che". Para cerrar el c¨ªrculo, Cantet vuelve a narrar una reuni¨®n de amigos, que echan de menos su juventud, en una isla, como en su primer trabajo, el telefilme Les sanguinaires (1999).
Cantet es un tipo t¨ªmido, calmo. Se autodefine como nost¨¢lgico, de manera casi enfermiza. "Porque siento casi m¨¢s nostalgia de lo que no he vivido". Ese sentimiento emana de una azotea, atalaya sobre el mundo y a la vez refugio de los peligros emocionales y materiales que se ciernen sobre los protagonistas. "Estaba en Padura, pero el guion no es una adaptaci¨®n fiel de su libro La novela de mi vida, sino que toma de ¨¦l la idea del regreso de alguien. Leonardo me autoriz¨® a coger cosas de otras de sus obras... aunque es cierto que es de ideas fijas y se pueden rastrear constantemente sus intereses en todo su trabajo". Y al final, entre risas, tambi¨¦n apostilla: "La azota tambi¨¦n me proteg¨ªa a m¨ª de la tentaci¨®n de rodar en las partes m¨¢s tur¨ªsticas de La Habana. Creo que se siente la ciudad sin rodar sus clich¨¦s".
La pel¨ªcula tendr¨¢ una funci¨®n cat¨¢rtica para los cubanos, porque podr¨¢ desencadenar interrogantes sobre su vida"
Regreso a ?taca iba a proyectarse en el festival de cine de La Habana, pero en el ¨²ltimo momento, con el cat¨¢logo ya impreso, se cay¨® de la programaci¨®n. "Fue frustrante porque lo decidi¨® alg¨²n funcionario asustado. Nosotros rodamos sin problemas, con todos los permisos. Ahora ya se ha solucionado, y tenemos fecha de proyecci¨®n en el marco del festival de cine franc¨¦s de La Habana y en otras ciudades cubanas". ?Le preocupa la reacci¨®n del p¨²blico cubano, o eso se lo deja a Padura, que bastante tiene Cantet con la audiencia europea? "Qu¨¦ va. Estoy impaciente por saber qu¨¦ pensar¨¢n. Me muero de ganas. As¨ª confirmar¨¦ que no hemos contado cualquier cosa, tonter¨ªas, y que la pel¨ªcula tendr¨¢ una funci¨®n cat¨¢rtica para los cubanos, porque podr¨¢ desencadenar interrogantes sobre su vida. Y ese es el papel de una pel¨ªcula". Tambi¨¦n se proyectar¨¢ en Miami: "Bueno, estoy preparado para todo tipo de p¨²blicos, incluso el potencialmente anticastrista. La usar¨¢n para criticar el r¨¦gimen, y esa no era mi intenci¨®n, sino ense?ar la riqueza de los personajes". Aunque se?ala: "En el fondo esos p¨²blicos se parecen. Es mi filme m¨¢s imp¨²dico, porque los cubanos son as¨ª de exaltados, yo me siento incapaz, desconfi¨® de los momentos del paroxismo, ellos me han llevado por esos derrotados".
Estoy empezando a escribir sobre un joven que al notar que no controla su vida vira hacia la ultraderecha"
El d¨ªa previo a la entrevista, el pasado mi¨¦rcoles, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, hab¨ªa notificado al Congreso su intenci¨®n de sacar a Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo, un paso clave en el proceso de normalizaci¨®n de relaciones con la isla iniciado el 17 de diciembre con el levantamiento del embargo: la realidad parece ir m¨¢s r¨¢pida que el cine. "Cierto, pero a la vez, cuando rod¨¦ hace a?o y medio, ya se notaban los aires de cambio. Tambi¨¦n me reconozco en un miedo que albergan hoy los cubanos: no saber hacia d¨®nde va nuestro mundo. Yo estoy muy inquieto". ?Es optimista o pesimista? "Mi naturaleza es pesimista. Veo lo que ocurre a mi alrededor como el pr¨®logo de unos d¨ªas muy sombr¨ªos. El atentado en Par¨ªs en enero me conmovi¨® enormemente y mostr¨® la pauta de todos los peligros difusos que se ciernen sobre nosotros y para los que no tenemos defensa. Hay que aprender a gestionar este mundo de otra manera... pero no sabemos c¨®mo".
Del rodaje recuerda momentos fuertes de los di¨¢logos del personaje de Jorge Perugorr¨ªa -"Que incluso me hizo a m¨ª llorar"-, la comuni¨®n con los actores y su espa?ol, un idioma que a¨²n entiende pero que no se atreve a hablar. Ahora toca nuevo proyecto. "A¨²n est¨¢ en una fase muy inicial. Estoy empezando a escribir. Puede que sea sobre la vida de un joven franc¨¦s, enfrentado a un sentimiento de impotencia pol¨ªtica, y que al notar que no controla su vida le hace virar hacia el extremismo, hacia la ultraderecha. Te estoy resumiendo mucho, ya que ser¨¢ m¨¢s compleja. Mi idea es reflexionar sobre la sensaci¨®n de no controlar la vida". Y usted, ?controla la suya? "Tal vez demasiado. Por suerte hay cosas que se me escapan. En los rodajes por ejemplo, busco los accidentes, el cine nunca sabes hacia d¨®nde te lleva, es un reto. Sin embargo mi naturaleza me lleva por otro lado, por un exceso de? control, no me dejo ir".
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