?Esto es m¨¢s que ¨®pera!

Cuenta Ram¨®n Gener en Si Beethoven pudiera escucharme, que el tren de la m¨²sica ha pasado tres veces por su vida. Para el primero compr¨® billete su madre cuando le apunt¨® al conservatorio y se baj¨®. Para el segundo, le sac¨® plaza ni m¨¢s ni menos que Victoria de los ?ngeles, convencida de que podr¨ªa llegar a ser un gran bar¨ªtono, y tambi¨¦n se ape¨®. El tercero y ¨²ltimo ha sido la televisi¨®n: pero de este tendr¨¢n que desalojar a patadas a este apasionado cantante hoy convertido en curioso comunicador global.

Tiene encanto su programa This is Opera! Un tir¨®n que le ha obligado a doblar la apuesta en ingl¨¦s para un mercado internacional creciente que abarca desde Mongolia a Argentina. La clave est¨¢ en sacarlo del terreno purista, docto y co?azo, donde el g¨¦nero no pasa de coto y reducto para pedantes de ceja alzada y meterlo de lleno en la sociolog¨ªa, la Historia, la moda o el constante mestizaje con otras artes.

Gener y su equipo agudizan los enfoques, ampl¨ªan el foco y saben apoyarse en las dotes de hombre orquesta que puede llegar a abarcar el presentador. Aunque a veces peque de cierto tono engolado ¡ªque no aparece cuando lo tratas de t¨² a t¨²¡ª y una querencia por los lugares comunes, el programa vibra y se mueve dentro de la preocupaci¨®n por la originalidad en la b¨²squeda de una manera diferente de contar.

Prevalece la mano abierta ante un p¨²blico dispuesto a dejarse seducir por un arte complejo. Espanta el miedo al agujero negro del reducto. Celebra festivamente una forma de expresi¨®n de por s¨ª aglutinadora. Funde de manera eficaz la espectacularidad de lo rotundamente teatral con la narrativa audiovisual. Abre perspectivas y convoca. La respuesta a su ¨¦xito ratifica la calidad de la propuesta. This is Opera! es m¨¢s que ¨®pera.