Ciclistas

Aseguran que andar por las aceras, aunque la contaminaci¨®n seque la garganta, activa la circulaci¨®n de la sangre y tambi¨¦n es higi¨¦nico para el esp¨ªritu. Lo que no nos cuentan los m¨¦dicos y las autoridades que velan por la seguridad en las calles es que pasear se ha convertido en algo peligroso para la integridad f¨ªsica. No ya porque choquen en plan tanqueta contigo los infinitos viandantes que van mirando una pantalla que al parecer contiene todas las esencias y los misterios del universo, sino porque te atropellen esos ciclistas con gesto ecologista y convencidos de que son lo m¨¢s guay o los motoristas que tienen alergia a la calzada y prefieren rugir por las aceras asustando viejas. Y juro que jam¨¢s he visto a ning¨²n polic¨ªa municipal coloc¨¢ndoles una multa o disuadi¨¦ndoles suave o contundentemente de la impune caza al transe¨²nte.

Y, por supuesto, defiendo el derecho de los que aspiran a ser cl¨®nicos de Eddy Merckx, o aguerridos militantes contra la contaminaci¨®n, o simplemente porque les resulta la forma m¨¢s grata de desplazarse o de hacer ejercicio, a que dispongan de carriles para su uso exclusivo, pero tambi¨¦n que los peatones les soltemos una hostia sin consecuencias penales a los que nos pueden atropellar porque les resulta c¨®modo o lo dictan sus genitales. Y veo que el nuevo alcalde de Valencia se desplaza en bicicleta, como ha hecho siempre. Admito que la imagen es pintoresca, pero ser¨ªa deseable que le entrullaran si no respeta las normas y pedalea por las aceras en plan alcalde y con los guardaespaldas corriendo detr¨¢s.

Qu¨¦ enternecedora la imagen de Carmena y Colau viajando en metro. Lo que no entiendo es que hac¨ªan los fot¨®grafos y las c¨¢maras filmando su forma cotidiana de viajar. Solo les faltaba llevar en su regazo a un beb¨¦ negro o danzar con los inmigrantes. Lo dice alguien que se alegra de su victoria, pero que siempre ha odiado eso que definen como hacer pol¨ªtica y asesor¨ªa de imagen.