Te est¨¢n esperando
Para qu¨¦ sirve todo esto, me preguntas, estas m¨¢quinas tan viejas, tan raras y tan lentas. Ya s¨¦ que te parecen una p¨¦rdida de tiempo, pero es justo lo contrario, porque pueden servirte para recuperar ese tiempo que se te escapa de las manos, no paras de quejarte, no tienes tiempo para nada, y menos para sentarte ah¨ª a oscuras. O para plantarte ante la cara esas l¨ªneas inm¨®viles, pero vaya si se mueven: un tipo muy sabio dijo que un punto y aparte colocado en el lugar que le corresponde puede desgarrar tu coraz¨®n con la fuerza de unas tenazas.
Prueba a ver. Prueba esta noche. No solo se trata de que te cuenten historias, aunque para m¨ª las historias son siempre lo primero. Te parecer¨¢ rid¨ªculo, pero lo que te digo tiene que ver con una forma de intimidad, una forma de calma. Acu¨¦rdate de cuando eras peque?o. Recuerda la balsa quieta en el centro de la laguna, la vibraci¨®n de la brisa abriendo c¨ªrculos en el agua, aquel ensue?o que pod¨ªa durar un verano entero. Esto me contaste una vez, hace mucho tiempo, cuando a¨²n contabas cosas, y eso podr¨ªa venderte ahora: esencia de verano reconcentrada. R¨ªete, pero dejar¨¢s de re¨ªrte cuando te vuelva. Verano, invierno, da lo mismo. Te digo verano para que me entiendas. Hay gente que paga por drogas de alt¨ªsimo dise?o para pillar un solo momento como ese.
Ahora acomp¨¢?ame a ese lugar donde late cada noche la m¨¢quina m¨¢s extra?a y m¨¢s antigua. Ah¨ª el tiempo tambi¨¦n se mueve de otra manera: un presente instant¨¢neo y eterno. No puedes darle al avance r¨¢pido. No hay mando a distancia que valga. Te ofrecen un producto artesanal y ¨²nico. No puedes descargarlo ni duplicarlo. Ah¨ª vive la rara gente que sabe respirar los puntos y aparte. En persona. En vivo y en directo. ?No tienen otra cosa mejor que hacer, a su edad? Te dir¨¦ lo que hacen, lo que puedes ver en la oscuridad. Se disfrazan de gente como nosotros pero son magos y magas, los oficiantes de la ceremonia. Ah¨ª cada palabra, cada gesto y cada silencio tienen sentido, tienen peso o vuelan. Ah¨ª arriba dicen la verdad, o tu puedes advertir su verdad secreta aunque mientan.
Parece un juego concebido por un ni?o muy l¨²cido, o un viejo que llora a carcajadas, un ni?o y un viejo que silban mientras levantan los velos del misterio. Buscan lo que no se puede comprar, lo que no cotiza en bolsa. Buscan, y ahora vas a re¨ªrte otra vez, lo sagrado, todo lo que de inmortal hay en nuestras vidas y nuestras almas, todo lo que puede perderse si alguien no lo encarna. Pasa, te est¨¢n esperando.
Babelia
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