Bob Wilson abre el debate: ?tiene que ser pol¨ªtico el teatro o no?
El director provoca la controversia en la Cuatrienal de Artes Esc¨¦nicas de Praga
El escenario pinta as¨ª: Praga en junio. Centro del teatro planetario en los 11 d¨ªas que dura su Cuatrienal de Escenograf¨ªa y Artes Esc¨¦nicas, el evento m¨¢s importante del mundo en este campo desde que surgiera en 1967. M¨¢s de 1.000 artistas de 70 pa¨ªses expuestos en 64 pabellones a lo largo y ancho de toda la ciudad, 500 representaciones, performances callejeras, acciones en distintos escenarios debatiendo en torno al lema: Espacios compartidos, m¨²sica, clima y pol¨ªtica. Moscas gigantes en las paredes, hombres que descienden en paraguas entre los cables, bodas de chinos en la calle, flautistas con microcerdos y roulottesde las que saltan hombres con mascarilla a tumbar viandantes sobre mares de pl¨¢stico y fuerzan al p¨²blico a escribir un insulto en cualquier idioma¡
Y en estas llega Dios, es decir, Bob Wilson, y suelta: ¡°Y el teatro, ?debe ser pol¨ªtico?¡±.
La posici¨®n del director estadounidense, expuesta en el transcurso de un foro p¨²blico en Praga extra?¨® a muchos de los presentes. Entre otros, a la directora art¨ªstica de la Cuatrienal, la serbia Sodja Lotker. ¡°Wilson ha abierto un profundo debate, m¨¢xime cuando es uno de los temas centrales de esta edici¨®n¡±. Lo que planteaba Wilson, todo un gur¨² de la escena mundial, era el hecho de afrontar el teatro para levantar interrogantes, no para ofrecer respuestas. ¡°Si las conociera de antemano, entonces no me meter¨ªa en ello¡±, argument¨®.
La ciudad como gran escenario y debate
Fechas: Del 18 al 28 de junio.
Artistas: M¨¢s de 5.000 profesionales de 70 pa¨ªses.
Pabellones: De 64 naciones, repartidos por toda la ciudad.
Representaciones: 500 con performances callejeras y acciones en distintos escenarios por toda Praga.
Lema: Espacios compartidos, m¨²sica, clima y pol¨ªtica.
Pabell¨®n espa?ol: Es un espacio esc¨¦nico creado por por Jos¨¦ Luis Raymond. Se trata de una instalaci¨®n titulada Mu¨¦rete que representa una especie de tanatorio con gusanos y desechos.
Le acompa?aba en el debate el suizo Serge von Arx, su escen¨®grafo desde 1998 y comisario de arquitecturas esc¨¦nicas en esta cuatrienal. ¡°Hemos trabajado codo con codo en 30 proyectos comunes que se llevaron a t¨¦rmino y en otros 30 que se pusieron en marcha y nunca vieron la luz¡±, comenta su colaborador en el caf¨¦ Slavia de Praga, toda una logia teatrera viva de la ciudad.
Las opiniones de Wilson est¨¢n claras: el autor de Vida y muerte de Martina Abramovic teme que la Humanidad est¨¦ ¡°enferma de flashes y necesidad de impactos por culpa de Wikipedia¡±. Y cree que ¡°hay que ir al meollo del asunto y no quedarse en lo trivial¡±. Seg¨²n su amigo Von Arx, lo que Wilson quiso decir es que necesitamos abrir preguntas y no imponer panfletos. ¡°De hecho, su trayectoria es profundamente pol¨ªtica. Para ¨¦l y para m¨ª, el teatro representa una ventana que te conduce hacia lo desconocido en la que muchas lecturas deben conjugarse. Se trata de sembrar confusi¨®n, no de imponer posiciones reivindicativas un¨ªvocas¡±. Bien es cierto que el artista estadounidense ha sido reconocido como artista con perfil pol¨ªtico a trav¨¦s de su obra por prestigiosas universidades que van de Harvard a la Sorbona; que ha acudido all¨ª donde le llamaban para trabajar en condiciones de protesta y agitaci¨®n fuera de su pa¨ªs ¡ªIr¨¢n, Cuba, China, Brasil...¡ª; que sus or¨ªgenes est¨¢n ligados a talleres para j¨®venes en situaci¨®n marginal que acud¨ªan a las clases armados en barrios como el Bronx¡
Calder¨®n, Quevedo, Graci¨¢n y las luces espa?olas de Bohemia
Cuando se observa a tres adolescentes de Ostrava, la dura regi¨®n minera morava, cercana a Polonia y Eslovaquia, recitar y reciclar en t¨¦cnicas de Kabuki La vida es sue?o, de Calder¨®n de la Barca, surgen todo tipo de interrogantes. ?C¨®mo han digerido de esa forma algo tan plenamente barroco como el Siglo de Oro espa?ol? El embajador espa?ol en la Rep¨²blica Checa, Pedro Calvo Sotelo, y Ramiro Villapadierna, director del Cervantes en Praga, en cuya sede se inaugur¨® la exposici¨®n Tr¨¢nsito por la escenograf¨ªa espa?ola contempor¨¢nea, dan sus respuestas: "Poca gente sabe que en varias bibliotecas de este pa¨ªs hay al menos copias de 100 obras de Lope de Vega y que en alguno de sus archivos se guardan manuscritos de Calder¨®n", comenta el embajador. Se trata del original de El gran duque de Gand¨ªa, descubierto en un castillo de Bohemia en 1960 junto a otras obras de Quevedo y Graci¨¢n.
Villapadierna a?ade: "Tambi¨¦n el M¨ªo Cid, que estuvo en manos de la familia Metternich al menos 300 a?os, fue uno de los tesoros cl¨¢sicos espa?oles custodiados aqu¨ª. Y es en este pa¨ªs centroeuropeo donde se encuentra la colecci¨®n de arte del siglo XVII m¨¢s importante que hay fuera de Espa?a".
Malinterpretado
Definitivamente, su colaborador Serge von Arx cree que se le ha malinterpretado: ¡°M¨¢s cuando el otro d¨ªa vino Robert Lepage, cont¨® que estaba inmerso en la construcci¨®n de un teatro que cambiar¨ªa la ¨®ptica del escenario y costar¨ªa 250 millones de d¨®lares y nadie dijo nada. Con reacciones as¨ª, que podr¨ªan haber planteado todo tipo de cuestiones entre el p¨²blico empezando con para qu¨¦ sirve eso, la verdad es que no entiendo la pol¨¦mica¡±.
Es algo con lo que puede estar de acuerdo Sodja Lotker, y m¨¢s despu¨¦s de haber presenciado y escogido para la cuatrienal expresiones, espect¨¢culos y propuestas que ahondan en la crisis global. ¡°Hasta que comenz¨® esta edici¨®n, ten¨ªa algunas ideas claras en mi mente; hoy, despu¨¦s de haber visto varias de las manifestaciones vivas aqu¨ª estos d¨ªas, confieso que me siento, como m¨ªnimo, inquieta, intranquila, turbada¡±.
Es comprensible cuando alguien asiste a los distintos pabellones montados en la casa natal de Kafka o en el palacio Colloredo, junto al puente de Carlos. All¨ª las paredes quedan atravesadas literalmente por una respiraci¨®n propia, caso de la propuesta rusa, o el hielo se derrite colgado de unas cuerdas gota a gota y a la vista de todos, en una plataforma montada por los finlandeses.
Entre sus muros, Jos¨¦ Luis Raymond, comisario del programa de Espa?a ¡ªen el que han participado al un¨ªsono Acci¨®n Cultural Espa?ola, el Instituto Nacional de las Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica, el Cervantes, la Agencia Espa?ola de Cooperaci¨®n Internacional y la Real Escuela Superior de Arte Dram¨¢tico (Resad)¡ª ha plantado una especie de tanatorio con gusanos y deshechos para su instalaci¨®n Mu¨¦rete.
Su propuesta ha sido elaborada junto a otras escuelas de teatro espa?olas como las de Sevilla, C¨®rdoba o Vigo. Son las cuatro que han montado las performances De profundis, No lloro porque espero o la escenograf¨ªa A trav¨¦s del Cristal, coordinada por Raymond y Alicia Blas: ¡°Surge, entre otras cosas, del p¨¢lpito que estamos viviendo en Espa?a a partir de acontecimientos como el 15-M. En estas figuras colgadas del techo, hay gente que sale con maletas hacia no se sabe d¨®nde, una realidad que los j¨®venes han tenido muy presente los ¨²ltimos a?os en Espa?a¡±.
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