Gauguin llega al Reina Sof¨ªa: la pintura m¨¢s cara del mundo
'Nafea faa ipoipo', obra del genio franc¨¦s vendida por 270 millones de euros, puede visitarse durante todo el verano en el museo madrile?o
Pocas visitas art¨ªsticas han levantado tanta expectaci¨®n como Nafea faa ipoipo (?Cu¨¢ndo te casar¨¢s? en tahitiano) la obra de Paul Gauguin que el pasado febrero se hizo con el t¨ªtulo de la "m¨¢s cara de la historia" tras ser adquirida por un comprador catar¨ª a cambio de 300 millones de d¨®lares (270 millones de euros). Hoy viernes, Rudolf Staechelin, su anterior propietario, el director del? Reina Sof¨ªa, Manuel Borja-Villel y el presidente del Patronato, Guillermo de la Dehesa, han oficiado la ceremonia de instalaci¨®n de la tela que hasta primeros de septiembre convivir¨¢ con la colecci¨®n del Kunstmuseum de Basilea en la cuarta planta del edificio, compartiendo pared con otra c¨¦lebre tela de Gauguin: Paisaje con tejado rojo (1885). Procedente de la Fundaci¨®n Beyeler de Basilea (Suiza), donde ha formado parte de una retrospectiva dedicada al pintor, despu¨¦s de su exposici¨®n en Madrid viajar¨¢ a la Phillips Collection de Washington. A partir de la clausura de esta muestra, el 10 de enero, ser¨¢ entregada a sus nuevos propietarios, la Autoridad de los Museos de Qatar, seg¨²n ha publicado la prensa estadounidense; extremo que Staechelin ha declinado confirmar en Madrid, "por acuerdo de los componentes del trust familiar", entidad con sede en Nueva York y creada para gobernar la riqu¨ªsima colecci¨®n de la que una buena parte se puede ver este verano en el Reina Sof¨ªa y el Museo del Prado.
"Lo importante son las obras" declar¨® Staechelin, "las colecciones se modifican con el tiempo. Esta fue comprada por mi abuelo en 1921 por 18.000 francos. No lo hizo por especular, sino porque le gustaba. Esa belleza ser¨¢ eterna, lo dem¨¢s es ef¨ªmero".
La venta se produjo mientras la obra estaba expuesta en la Fundaci¨®n Beyeler, pero se acord¨® que antes de entregarla a sus nuevos propietarios, se respetar¨ªan todos los compromisos adquiridos por el Kuntsmuseum de Basilea.El r¨¦cord anterior lo ostentaba Los jugadores de cartas, de Paul C¨¦zanne, vendido en 2011 por 250 millones de d¨®lares.
Secretos aparte, no hay duda de que la belleza contenida en ese lienzo de 101,5 cm ¡Á 77,5 cent¨ªmetros es apabullante. Los colores del paisaje polinesio inventado por el artista rodean a dos hermosas j¨®venes. Una de ellas es Tehe¡¯amana, la muchacha con la que Gauguin se cas¨® cuando ella contaba solo 13 a?os y mientras su esposa oficial y sus cinco hijos segu¨ªan viviendo en Dinamarca. Los estudiosos del artista consideran que esta es su obra m¨¢s er¨®tica y una de las m¨¢s importante de su amplia producci¨®n.
Nafea faa ipoipo sali¨® el martes por la ma?ana en un cami¨®n expresamente acondicionado de la empresa de transportes Sim con dos transportistas y un experto encargado de velar por la obra (un correo). Despu¨¦s de hacer noche en los almacenes de la compa?¨ªa en Barcelona, prosigui¨® viaje hasta Madrid. Lleg¨® ayer jueves y durante 24 horas permaneci¨® en posici¨®n horizontal sobre una mesa para conseguir que se aclimatara. Hacia las 11.00 de hoy viernes ha podido por fin ser colgada de las paredes por tres profesionales del museo. no se reforzar¨¢ la vigilancia habitual (uno por sala) ni se modifican las condiciones del seguro, que tiene el aval del Estado.
Ante el supuesto remoto de si Manuel Borja-Villel hubiera dispuesto de 270 millones de euros hubiera adquirido la obra, el director respondi¨® que lo importante son los relatos, no una pieza individual. Especulaciones aparte, asegur¨® que se trata de una obra maestra fundamental y muy importante en la producci¨®n de Gauguin. "Tiene todos los elementos clave de sus obras posimpresionistas. La pinta en 1892, durante su primer viaje a Tahit¨ª, y ¨¦l tiene otra idea del para¨ªso. Por eso, los colores de la Naturaleza que representa no son reales, son los que hay en su imaginaci¨®n. Es una obra cargada de c¨®digos y forma parte de la serie de cuatro telas dedicadas a las preguntas. Cuando la pinta, ¨¦l ha huido de Europa buscando un para¨ªso que solo est¨¢ en su imaginaci¨®n".
No se sabe con exactitud la relaci¨®n entre el t¨ªtulo del lienzo y la significaci¨®n global de este trabajo, pero la misteriosa pregunta -?Cu¨¢ndo te casar¨¢s?- forma parte del simbolismo general de la escena. La obra tambi¨¦n refleja hasta qu¨¦ punto Gauguin proyect¨® su imaginario europeo en un para¨ªso polinesio que bajo el imperio colonial de Francia hab¨ªa perdido su inocencia hac¨ªa mucho tiempo. Algunos expertos han considerado que la mujer del primer plano busca marido debido a que lleva una flor en su oreja mientras que la otra ser¨ªa la encargada de buscar al futuro esposo, por eso al fondo se vislumbran dos figuras paseando. Las tahitianas fueron el motivo fundamental para la inspiraci¨®n del artista, protagonizando la mayor parte de los lienzos ejecutados en la Polinesia.
Staechelin record¨® el origen de la colecci¨®n familiar formada por su abuelo, en 1915. Con el mismo nombre que el nieto, formaba parte de una familia con negocios en el mundo de la construcci¨®n y la aerona¨²tica, entre otras cosas. "Este cuadro lo he visto toda mi vida, pero, como la mayor parte, estaba depositado en el Museo de Basilea. No conoc¨ªa a mi abuelo, muri¨® antes de que yo naciera. Despu¨¦s, en un accidente de avi¨®n de la compa?¨ªa que ten¨ªamos entonces, murieron mi padre y mi hermano. En total, fallecieron 100 pasajeros y tuvimos que hacer frente a indemnizaciones muy altas. Era 1967, a?o en que decid¨ª vender dos lienzos de Picasso (Arlequ¨ªn sentado, de 1923, y Los dos hermanos, 1906, que fueron comprados por el Ayuntamiento despu¨¦s de un hist¨®rico refer¨¦ndum en Basilea; un gesto al que Picasso respondi¨® regalando cuatro obras".
Aunque Staechelin explic¨® la venta de los picassos, no hizo lo mismo respecto a la obra de Gauguin. S¨ª asegur¨®, sin embargo, que, por el momento, no tienen nuevos planes de venta. Y concluy¨® diciendo que no est¨¢ seguro de que la parte de su colecci¨®n que desde hace d¨¦cadas est¨¢ depositada en el Kunstmuseum retorne a Basilea en las mismas condiciones en las que estaba. "Tenemos discrepancias con la direcci¨®n del museo. Es una decisi¨®n que tomaremos el pr¨®ximo a?o".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.