Javier de Isusi: el francotirador de historias

El d¨ªa que pudo elegir entre emprender un viaje incierto a cualquier parte y el camino (algo m¨¢s) seguro de un arquitecto, escogi¨® lo primero. Javier de Isusi (Bilbao, 1972) acab¨® Arquitectura, trabaj¨® cuatro meses en un estudio donde se entusiasmaron con ¨¦l y donde renunci¨® a continuar. Hizo un petate y se fue a M¨¦xico, a ver a sus padres, en primer lugar, y a los zapatistas a continuaci¨®n. Luego a Guatemala, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y unos cuantos pa¨ªses m¨¢s hasta llegar a Brasil. Invirti¨® un a?o en el puro placer de vagar de pa¨ªs en pa¨ªs. ¡°Cada sitio me iba llevando al siguiente. El camino fue surgiendo, fue distinto al que ten¨ªa en mi cabeza cuando empec¨¦¡±, recuerda ahora, 15 a?os despu¨¦s, desde el peque?o pueblo de C¨¢ceres donde vive junto a la ilustradora Leticia Ruifern¨¢ndez y sus tres hijos.

En aquel vagabundeo, De Isusi encontr¨® la fuerza necesaria para darse a s¨ª mismo la oportunidad de hacer lo que quer¨ªa ¡ªnarraciones y dibujos: arte secuencial¡ª y, de paso, captur¨® las historias. ¡°En ese viaje pens¨¦ que siempre tendr¨ªa la puerta abierta de la arquitectura, pero que antes ten¨ªa que intentarlo con el c¨®mic¡±. A la vuelta public¨® una tetralog¨ªa en blanco y negro, Los viajes de Juan Sin Tierra (Astiberri), donde aprovecha sus experiencias en la aldea zapatista de La Realidad (La pipa de Marcos), la isla nicarag¨¹ense Ometepe, donde escribe el guion de La isla de Nunca Jam¨¢s, en el Ecuador amaz¨®nico (R¨ªo Loco) y en Brasil (En la tierra de los Sin Tierra). Durante su periplo conoci¨® al argentino Luciano Saracino, con quien ha firmado otros t¨ªtulos. Un viaje fecundo, similar al del escritor Jorge Carri¨®n, que mientras rondaba por el mundo se le iban desvelando las novelas que escribir¨ªa al volver a la tierra firme de la rutina. ¡°Mi vida¡±, asiente De Isusi, ¡°cambi¨® un mont¨®n¡±. Sus novelas gr¨¢ficas tuvieron una gran acogida, incluso exterior (se ha traducido a varios idiomas) y le afianz¨® en su decisi¨®n. ¡°Yo doy un pasito y luego otro. No s¨¦ si lo dejar¨¦ en cinco a?os o no, pero seguir¨¦ contando historias. Soy un contador de historias¡±.

La ¨²ltima que ha contado, He visto ballenas (Astiberri), fue una de las primeras incursiones del c¨®mic espa?ol en el conflicto vasco, sus desgarros y la vida despu¨¦s de la violencia. ¡°Uno de mis objetivos era que pudiera leerlo gente de sensibilidades opuestas. A gente con familiares en la c¨¢rcel y a gente que ha vivido con escoltas les ha gustado much¨ªsimo y esa es una de las mayores satisfacciones que he tenido¡±, cuenta. Gracias a este ¨¢lbum fue el ¨²nico espa?ol que compiti¨® en el Festival Internacional de Angulema de 2015 por el premio a la mejor obra. No se le ha subido a la cabeza. ¡°Los autores de c¨®mic somos unos francotiradores locos. Un dibujante de c¨®mic est¨¢ m¨¢s cerca de un artesano que de un artista, es un fabricante de historias¡±.