El cine latino ya tiene alfombra roja

El glamour no es exclusivo de Hollywood. Una larga alfombra roja cubr¨ªa la noche del mi¨¦rcoles el pavimento de la calle Donceles, en el coraz¨®n de la Ciudad de M¨¦xico. Por ella desfilaron algunos de los protagonistas de la industria cinematogr¨¢fica iberoamericana ¡ªsi es que existe¡ª para celebrar la segunda edici¨®n de los premios F¨¦nix. El club, de Pablo Larra¨ªn, termin¨® como la triunfadora de la noche. Adem¨¢s de ser reconocida como mejor pel¨ªcula, la cinta del realizador chileno se llev¨® la categor¨ªa de guion y Alfredo Castro, uno de sus protagonistas, consigui¨® el premio a mejor actuaci¨®n. Larra¨ªn, que no acudi¨® a la ceremonia, fue premiado como mejor director, aunque comparti¨® el F¨¦nix con Ciro Guerra por su trabajo en El abrazo de la serpiente.

La argentina Dolores Fonzi, que tampoco acudi¨® al evento, fue la mejor actriz por su trabajo en La Parota (Paulina), la m¨¢s reciente obra de Santiago Mitre. El premio lo recibi¨® su expareja, Gael Garc¨ªa Bernal, uno de los pocos actores de talla internacional que acudi¨® al Teatro de la ciudad para dar un espaldarazo al incipiente premio organizado por la asociaci¨®n cinematogr¨¢fica Cinema23. El mexicano dedic¨® a la madre de sus dos hijos un emotivo discurso. ¡°No te llevo el pan a casa, te llevo un huevo. Sos lo m¨¢s¡±, dijo en referencia al premio creado por el artista brasile?o Artur Lescher.

Las ausencias fueron constantes en las grandes categor¨ªas. Los asistentes se resignaron a ver en pantallas los agradecimientos que enviaban a la distancia los ganadores. As¨ª lo hizo Larra¨ªn y el documentalista chileno Patricio Guzm¨¢n, cuya trayectoria fue reconocida con un premio especial. Leonardo Sbaraglia y Dami¨¢n Szifr¨®n tambi¨¦n recurrieron al videomensaje para dar las gracias al reconocimiento que los exhibidores dieron a Relatos Salvajes, un ¨¦xito de taquilla a lo largo del continente y en Espa?a.

Ante el triunfo del cine chileno, colombiano y argentino, los mexicanos quedaron relegados al papel de anfitriones. La producci¨®n del evento, a cargo de Rodrigo Pe?afiel y Ricardo Giraldo, mostr¨® una marcada vocaci¨®n por entretener a los espectadores. El objetivo era lograr un espect¨¢culo que huyera de las plomizas ceremonias con las que las academias de cine locales suelen aburrir a los asistentes.

El discurso de los F¨¦nix de la uni¨®n entre los pa¨ªses americanos con Espa?a y Portugal sirvi¨® de pretexto para duetos de artistas tomaran el escenario. Julieta Venegas cant¨® una canci¨®n de Chico Buarque con el brasile?o Criolo. El mexicano Rub¨¦n Albarr¨¢n, de Caf¨¦ Tacuba, interpret¨® un tema de Nacha Pop con Le¨®n Larregui, vocalista de Zo¨¦. La brasile?a Vanessa da Mata cant¨® con Gil Cerezo, de Kinky. La espa?ola Luz Casal tambi¨¦n sali¨® al escenario acompa?ada por dos tacubos, Emmanuel del Real y Quique Rangel. Y Gael Garc¨ªa hizo una pieza de spoken word junto con Adri¨¢n Dargelos, de Babas¨®nicos, y Camilo Lara y Toy Selectah.

A pesar de los desaires de algunos de los ganadores, la alfombra roja vio desfilar actores y actrices muy populares en sus pa¨ªses. Paz Vega, Manolo Cardona, Kate del Castillo, Pedro Pascal, Ana de la Reguera, Jos¨¦ Mar¨ªa Yazpik, Goya Toledo, B¨¢rbara Mori y Tenoch Huerta, entre otros, estuvieron presentes.

Adem¨¢s de estar hermanados por una cultura y una lengua, los pa¨ªses iberoamericanos tambi¨¦n comparten los problemas de sus respectivas industrias. Las producciones locales buscan abrirse camino con apoyos gubernamentales, cuando tienen la suerte de contar con ellos, para destacar entre la apabullante presencia del cine hecho en Hollywood. La problem¨¢tica de la distribuci¨®n es otra de las constantes. La falta de espacios en las salas de cine para los productos nacionales, e iberoamericanos, es un mal extendido en toda la regi¨®n. Y esa es una de las paradojas del F¨¦nix. El galard¨®n puede premiar a una peque?a joya. Pero es probable que para verla haya que esperar varios meses para que llegue a las pantallas. Y eso, si hay suerte.