Los autores de un proyecto de vivienda social ganan el Turner
El colectivo Assemble, sorprendente triunfador del galard¨®n de arte contempor¨¢neo
El Premio Turner parece haber conjurado los signos de agotamiento que denotaba en las ¨²ltimas ediciones con la decisi¨®n de encaramar a su podio del arte contempor¨¢neo a un grupo de arquitectos y dise?adores dedicado a proyectos de regeneraci¨®n urbana. ?Podemos llamar arte a los trabajos de transformaci¨®n de un conjunto de casas de protecci¨®n oficial en un barrio deprimido de Liverpool? As¨ª lo decidi¨® el fallo del galard¨®n, entregado el lunes por la noche al colectivo londinense Assemble, y con el benepl¨¢cito de una cr¨ªtica que en su mayor¨ªa ha dado la bienvenida a la eclosi¨®n del talento art¨ªstico fuera del estricto marco de una galer¨ªa.
Los primeros desconcertados por la decisi¨®n del jurado, anunciada en Glasgow y de forma in¨¦dita fuera del territorio ingl¨¦s, fueron os propios integrantes de Assemble, cuyo n¨²mero viene oscilando entre los 14 y los 18 miembros, todos ellos menores de 30 a?os. Incluso llegaron a debatir en su d¨ªa la conveniencia de aceptar la nominaci¨®n, porque no se consideraban a s¨ª mismos artistas, pero acabaron haci¨¦ndolo como plataforma de captaci¨®n de fondos para sus proyectos sociales. El m¨¢s destacado hasta la fecha es el plan de reconversi¨®n de Granby Four Street, un grupo de deterioradas viviendas del barrio de Toxteh (Liverpool), en una agradable urbanizaci¨®n con espacios verdes y un mercado callejero mensual. Iniciado hace cinco a?os y todav¨ªa en proceso, ha evitado la demolici¨®n de las casas, contra la que ven¨ªan luchando sus habitantes.
Con esta y otras propuestas, como el replanteamiento del concepto de parque infantil en la ciudad de Glasgow, Assemble participa en la "larga tradici¨®n" de utilizar el arte para mejorar la sociedad, seg¨²n la consideraci¨®n del jurado, que tambi¨¦n quiso extender a las tres otras finalistas, todas ellas mujeres y autoras de dos instalaciones y de una composici¨®n musical. Las candidaturas de estas ¨²ltimas, sin embargo, fueron recibidas por los cr¨ªticos con extrema frialdad, acompa?ada por la sentencia de algunos de que hab¨ªa llegado la hora de dilatar en el tiempo la concesi¨®n del Turner (cada cinco a?os) en aras de un mayor atino en la selecci¨®n.
As¨ª lo subrayaba en su d¨ªa Rachel Campbell-Johnson en su columna de arte en The Times, quien ha retomado la cuesti¨®n para jalear el fallo del Turner ¨Ca su entender, el ¨²nico defendible- porque el premio "recupera su pulso vital, despu¨¦s de tantos desvar¨ªos posmodernos", y apuntala un proyecto "que ha conseguido transformar la vida de una comunidad". Otros veredictos publicados en la prensa brit¨¢nica coinciden con la sentencia de Campbell-Johnson: "Una galer¨ªa no solo tiene sentido por los objetos que preserva, sino tambi¨¦n por las ideas que estos implican y su significado para nuestra vida moderna". En otras palabras, que firma Adrian Searle en The Guardian, "la victoria de Assemble significa un desplazamiento desde la galer¨ªa hacia el espacio p¨²blico, que cada d¨ªa aparece m¨¢s privatizado". La estructura de madera que el colectivo hab¨ªa presentado como el ¨²nico escaparate posible de su candidatura "no debe ser contemplada como una obra", subraya Searle, sino "como un modelo de obra que no ocupa un espacio en el mundo del arte, sino en el mundo en s¨ª mismo".
Fundado en 1984, el Turner incluye una dotaci¨®n de 25.000 libras para el vencedor de su edici¨®n anual, y 5.000 libras para cada uno de los finalistas. Entre ese ¨²ltimo grupo, todas ellas mujeres en esta edici¨®n, la londinense Bonnie Camplin reflexiona en torno al ¡° consenso sobre la realidad¡±, frente a aquellas creencias e ideas que son marginalizadas, desplegando en una suerte de estudio una variedad de materiales relacionados con la filosof¨ªa, la psicolog¨ªa, los conflictos armados e incluso la brujer¨ªa.
Otra instalaci¨®n que firma la alemana Nicole Wermers explora la apropiaci¨®n del arte y el dise?o por la cultura de consumo con una colecci¨®n de sillas de dise?o modernista en cuyo respaldo ha colgado (y cosido) abrigos de piel adquiridos a trav¨¦s de eBay. Y la canadiense Janice Kerbel propone una pieza musical de 25 minutos, integrada por nueve canciones parra seis voces, que solo ha sido interpretada una vez en p¨²blico. Compuesta en el ordenador, con la asesor¨ªa de m¨²sicos experimentados (que no es el caso de la artista) el t¨ªtulo de la obra, Doug, alude a un personaje de ficci¨®n cuya sucesi¨®n de accidentes es relatada en la pieza.
Las tres recibir¨¢n respectivamente 5.000 libras, mientras que la dotaci¨®n para el ganador del Turner, destinado a artistas menores de 50 a?os cuya obra se ha expuesto en el Reino Unido, obtendr¨¢ una dotaci¨®n de 25.000 libras.
A lo largo de 31 a?os de singladura, el Turner, destinado a artistas menores de 50 a?os cuya obra se haya expuesto en Reino Unido, ha venido acaparando la atenci¨®n medi¨¢tica por su capacidad de generar controversia, al tiempo que redefin¨ªa el concepto de lo que es arte. Fue uno de los puntales del Brit Art, con su elecci¨®n de los animales sumergidos en formol de Damien Hirst, hoy el artista brit¨¢nico de m¨¢s alta cotizaci¨®n, o de los montajes fotogr¨¢ficos de Gilbert&George, que sellaron una era m¨¢s centrada en la personalidad de los artistas que en su propia producci¨®n. Les sucedi¨® una serie de trabajos m¨¢s divisorios en cuanto a su juicio, como la pintura de Chris Ofili a base de excrementos de elefante o la habitaci¨®n desnuda de Martin Creed, solo habitada por unas bombillas que se encend¨ªan y apagaban de forma intermitente; hasta desembocar, en los ¨²ltimos tiempos, en un Turner que m¨¢s que resultar controvertido, sencillamene irritaba. Y, en ese sentido, se trate o no de verdadero arte, la irrupci¨®n de Assemble aporta un soplo de aire fresco a un mundillo que aparec¨ªa secuestrado por el mercado y sus vaivenes.
Babelia
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