Kendrick Lamar, el chico de oro
![Kendrick Lamar en un concierto en julio de este año.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/6IOQEZ3X2N4PDNY2XMDPFOWNRE.jpg?auth=b575476f78c3e4560e935b99ed8335f7eb52647b0234f173fd384869f812d8b5&width=414)
Qu¨¦ duda cabe de que el estadounidense Kendrick Lamar es uno de los hombres del a?o en el mundo de la m¨²sica. A sus veintiocho a?os de edad ha sido capaz de llevar el rap a lo m¨¢s alto de las listas de ventas y al mismo tiempo de conseguir un apoyo total por parte de la cr¨ªtica especializada internacional, algo que, por lo general, no han alcanzado demasiados artistas a lo largo de la historia del g¨¦nero. No importa que otros nombres de su generaci¨®n (sirva Wiz Khalifa, nacido tambi¨¦n en 1987 como ejemplo) consigan calar m¨¢s entre el p¨²blico joven adicto a Youtube y superar en millones los visionados de Lamar, lo importante es que el de Compton se ha convertido en el artista de referencia del g¨¦nero en su vertiente m¨¢s madura y de mayor repercusi¨®n internacional.
Las cr¨ªticas obtenidas ya en su momento por el magn¨ªfico good kid, m.A.A.d city (Interscope, 12) ¨Cque propici¨® su primera visita a Espa?a, entre los cabezas de cartel del barcelon¨¦s Primavera Sound- y sobre todo la asombrosa acogida por parte de los medios a su ¨²ltimo trabajo hasta la fecha, To Pimp A Butterfly (Interscope, 15), considerado mejor disco del a?o por diversas publicaciones especializadas y acreedor de varios Grammy, le han convertido sin lugar a ninguna duda en el rapero m¨¢s importante del momento, en el verdadero chico de oro de la industria musical estadounidense a d¨ªa de hoy. As¨ª que, aunque haya otros nombres pis¨¢ndole los talones (desde Drake a Vince Staples), este ha sido su a?o. El a?o de Kendrick Lamar.
Aunque no cometamos el error de relacionar los motivos de su ¨¦xito exclusivamente con To Pimp A Butterfly, por mucho que buena parte del mundo le haya descubierto con este trabajo en concreto. Lo cierto es que la profundidad emocional y narrativa del artista de Compton en good kid, m.A.A.d city era francamente insuperable, aunque su laureada continuaci¨®n tiene muchos otros m¨¦ritos que la han catapultado hacia la gloria.
Kendrick Lamar Duckworth no es de esos m¨²sicos que se arrima al ¨¢rbol que mejor sombra da, sino que ha seguido desde sus inicios el camino marcado por los grandes del rap y de la black culture, plantando quiz¨¢s cara a sus coet¨¢neos, s¨ª, pero respetando siempre a sus referentes y a aquellos que le llevaron a querer ser ¨¦l mismo uno de los mejores y a sentirse orgulloso del color de su piel. De ah¨ª que To Pimp A Butterfly sea casi un resumen de la historia de los conflictos raciales en Estados Unidos, de la cultura afroamericana y de su situaci¨®n. Por ello, Lamar ha contado con verdaderos m¨²sicos de jazz que ha creado ambientes tan especiales como los de For Free?-Interlude; por ello ha sampleado a cl¨¢sicos como James Brown o Parliament en el arrollador King Kunta; por ello ha invitado a George Clinton, Snoop Dogg, el habitual Dr. Dre, Pete Rock o Pharrell Williams a echarle una mano desde un segundo plano; por ello ha contado con productores como Flying Lotus o con el siempre impresionante bajista y m¨²sico Thundercat; por ello juega con todas las posibilidades de su voz (navegando del pop a la m¨¢s susurrante urban poetry); por ello despliega una paleta estil¨ªstica que tan pronto recuerda a The Roots como a Prince... y la lista podr¨ªa extenderse m¨¢s y m¨¢s, as¨ª que mejor dejarlo aqu¨ª.
Aunque qui¨¦n sabe si la historia de Kendrick Lamar hubiera sido la misma si Anthony Tiffith no le hubiera descubierto a los quince a?os de edad, gracias a su primera mixtape, publicada bajo el nombre de K-Dot. Tiffth es el capo de la agencia de management (y posteriormente tambi¨¦n sello) Top Dawg Entertainment, que desde aquel momento ha estado ligada a la trayectoria de Lamar, sobre todo gracias a la s¨®lida amistad que le contin¨²a uniendo a Tiffith y a otros miembros de la agencia como Schoolboy Q, Jay Rock o Ab-Soul, sus compa?eros de correr¨ªas en el colectivo Black Hippy. De hecho, Lamar es uno de los A&R del sello, al que se suele comparar con Death Row Records, m¨ªtica discogr¨¢fica que, dirigida por el siempre problem¨¢ticos Suge Knight, public¨® trabajos de algunos de los m¨¢s grandes raperos de todos los tiempos (Dre, Snoop Dogg o Tupac Shakur). Tiffith fue el responsable de la edici¨®n de Overly Dedicated en 2010, cuarta mixtape de Lamar y que propici¨® al a?o siguiente el lanzamiento del que ser¨ªa el primer ¨¢lbum como tal ¨Caunque solamente digital- de Lamar, Section.80.
A partir de ah¨ª, todo fue hacia arriba. Aftermath, la agencia del mism¨ªsimo Dr. Dre ficha a Lamar y, al pertenecer al grupo Interscope/Universal, la mecha queda prendida definitivamente para que Lamar ascienda definitivamente de categor¨ªa. Y aqu¨ª estamos, cuatro a?os m¨¢s tarde, con Kendrick Lamar en el Olimpo de los grandes y con ochocientas mil copias de To Pimp A Butterfly vendidas.
Ahora solamente queda esperar unos meses para poder volver a enfrentarse por tercera vez a su directo en nuestro pa¨ªs. Despu¨¦s de pasar por festivales como el Primavera Sound y el Cru?lla, Lamar formar¨¢ parte del cartel de la pr¨®xima edici¨®n del Festival Internacional de Benic¨¤ssim.
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