V¨¦rtigo sobre la carpa y el bosque
El Cir Cric dedica este domingo una jornada al arte del funambulismo en su carpa en la monta?a
¡°El alambre es un lugar seguro para m¨ª. La calle, no. La vida, no. El alambre es un camino riguroso, ciertamente, pero simple. Es recto. No hay meandros como los del suelo, y los de la vida¡±. Philippe Petit, el gran funambulista, hoy tan famoso por la pel¨ªcula El desaf¨ªo(2015) sobre su cruce del espacio entre las Torres Gemelas en 1974, habla as¨ª de su arte.
Del gran Charles Blondin y los viejo hermanos Burattini a Nik Wallenda y el propio Petit una l¨ªnea de valor, t¨¦cnica y amor al oficio atraviesa la historia, igual que la atraviesa el propio alambre tendido sobre uno de nuestros miedos m¨¢s ancestrales: el miedo a caer.
Este fin de semana otro volatinero excepcional, Oliver Zimmermann, que se ha paseado por las alturas de tantos espacios p¨²blicos de Europa, es la estrella de la jornada que dedica al funambulismo el Festival Circ Cric, la feria que el circo del mismo nombre organiza en su sede del municipio de Sant Esteve de Palautordera, en la falda del Montseny, en medio del bosque. En las carpas del Circ Cric y sus espacios exteriores, se desarrollar¨¢ un extenso programa de espect¨¢culos y actividades que arrancar¨¢ a las 11 de la ma?ana y se prolongar¨¢ hasta las siete de la tarde (www.circcric.com).
El plato fuerte ser¨¢ la actuaci¨®n de Zimmermann que caminar¨¢ sobre su alambre tendido por encima de las carpas. El clown Tortell Poltrona, director del Circ Cric y unop de los fundadores de Payasos sin Fronteras, asegura que va a ser espectacular. ¡°Va a atravesar el cielo del circo de una forma nunca vista¡±, anuncia con maneras de chef de piste. Figuran en el cartel asimismo los espect¨¢culos de Los Galindos (Premio Nacional de Cultura de la Generalitat de Catalu?a), Cia Sif¨®, Mr. Vita, Rocky el profesor de tenis (!), En Diciembre y Toni Toronell, Pere Hosta y el propio Poltrona. Es decir, una muestra de espect¨¢culos de circo de todo tipo y medida (con Pep Callau de maestro de ceremonias). Y adem¨¢s talleres, juegos, cuentacuentos, m¨²sica y una serie de peque?os paseos con sorpresa (acr¨®batas, malabaristas, funambulistas) por los montaraces alrededores (¡°el bosque tambi¨¦n es un circo¡±). La propuesta es pasarse el d¨ªa en tan buena compa?¨ªa (la restauraci¨®n la ponen una serie de Food Tracks, camionetas con comida).
¡°Lo m¨¢s estrepitoso es lo del funambulista¡±, recalca el payaso Poltrona. ¡°Y el lugar es estupendo, en el parque natural, un entorno muy bonito. Esperemos que no haga viento, por Oliver, que es colega de mi hijo, Blai Mateu¡±. Aj¨¢, el viento, lo dice Petit en su Tratado de funambulismo, es uno de los grandes enemigos de los artistas del alambre. Los otros son la gravedad y el miedo, claro. ¡°No he visto la peli, pero yo fui funambulista, ?sabes?¡±, apunta el payaso. ¡°Era un subid¨®n de adrenalina. Bueno yo actuaba a seis metros y Oliver lo hace ?a 18!¡±. ?Ha conocido a Petit? ¡°Nos encontramos una vez, pero no nos tomamos ninguna cerveza¡±.
Dado que Poltrona fue fun¨¢mbulo parace pertinente preguntarle por los secretos del oficio. ¡°El cable tenso, cuanto m¨¢s tenso mejor, y que aguante. No hay mucho m¨¢s, en realidad el fun¨¢mbulo con su p¨¦rtiga es como el corcho con palillos, son vectores que equilibran. Como muchos otros retos del ser humano, el del funambulista est¨¢ vinculado a la f¨ªsica. Son lecciones de bachillerato¡±. ?Dominaba Poltrona la f¨ªsica en clase? Lo que hay que ver, m¨¢s bien parece haber sido un alumno gamberro. ¡°La f¨ªsica a¨²n¡±, r¨ªe. ¡°Por lo dem¨¢s era tan malo que hice mucho turismo escolar, cambiando de escuela¡±.
¡°Hay en la jornada que hemos preparado muchas cosas¡±, recalca Poltrona. ¡°Todo un pollastre. Clases de trapecio, de maquillaje, una batucada.? Y lo de la naturaleza es estupendo. Puedes mirar el cielo, estirarte en la hierba, respirar el aire¡±. Y ver al funambulista. ¡°Dos veces, una al mediod¨ªa y otra al acabar,;eso si no se ha ca¨ªdo¡±, bromea con su caracter¨ªstica travesura destroyer el payaso.
Babelia
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