Un queso gruyer en Teotihuac¨¢n

Al levantar el coraz¨®n de la Plaza de la Luna, una de las zonas m¨¢s importantes de la ciudad de Teotihuacan, los arque¨®logos se han encontrado debajo de la tierra con algo parecido a un queso gruyer. Fosas decoradas con estelas de piedra verde, pasadizos y m¨¢s de 400 perforaciones circulares en las rocas rellenas con cantos de r¨ªo. Un entramado simb¨®lico que recuerda tambi¨¦n a un paisaje lunar repleto de cr¨¢teres y que podr¨ªa corresponder con el mapa del universo a ojos de los antiguos teotihuacanos. Los investigadores del Instituto Nacional de Antropolog¨ªa e Historia (INAH), que llevan un a?o trabajando en la zona, resaltan la importancia del hallazgo, que aporta algo m¨¢s de informaci¨®n sobre la misteriosa civilizaci¨®n que construy¨® esta imponente ciudad en el valle de M¨¦xico hace 1.900 a?os.

¡°Nos encontramos frente a un nuevo ombligo de la ciudad, frente a un nuevo centro c¨®smico¡±, se?al¨® este viernes en un comunicado Ver¨®nica Ortega Cabrera, directora del proyecto. Las excavaciones se han enfocado en un edificio contiguo a uno de los epicentros de la urbe, la Pir¨¢mide de la Luna, desembocadura del eje sagrado y gran avenida central de 2,5 kil¨®metros conocida como Calzada de los Muertos. El hallazgo ha sido localizado en un patio de 25 metros cuadrados donde se han encontrado 10 peque?os altares.

Los investigadores est¨¢n tirando del hilo para profundizar en los or¨ªgenes de este espacio ritual, que habr¨ªa sido modificado a lo largo de los a?os. ¡°Una investigaci¨®n anterior ya hab¨ªa apuntado que ten¨ªa una planta que semejaba a un ¡°quincunce¡± o ¡°cruz teotihuacana¡±, que est¨¢ asociada a un orden cosmol¨®gico, pero no hab¨ªa m¨¢s elementos para entender esto. Cuando hallamos estas fosas y las estelas de piedra verde empezamos a generar la idea de que, efectivamente, fue un espacio con una carga simb¨®lica que une la parte subterr¨¢nea, el inframundo, con el plano celeste¡±, detalla la arque¨®loga.

La ciudad de Teotihuac¨¢n se ha comparado en grandeza a Alejandr¨ªa, Roma o Constantinopla. Durante d¨¦cadas, las excavaciones en sus ruinas, a unos 70 kil¨®metros de Ciudad de M¨¦xico, han aportado descubrimientos sobre los usos religiosos de las grandes pir¨¢mides, los pasadizos subterr¨¢neos con significados rituales y la compleja organizaci¨®n pol¨ªtica de esta ciudad que floreci¨® entre el siglo I y VI, antes del asentamiento y dominio absoluto de la zona por parte del imperio mexica. Uno de los grandes misterios es qui¨¦n la gobernaba, porque seg¨²n estudios recientes no se han hallado restos en las tumbas, como en el caso de las ¨¢reas mayas, que permitan identificar la correspondencia hist¨®rica.

A trav¨¦s de pozos de sondeo y estudios del subsuelo mediante radares de penetraci¨®n terrestre, los investigadores constatan que la Plaza de la Luna no era como ahora la ve el visitante. La construcci¨®n original estaba formada por multitud de hoyos, canales y estelas que abarcaban un territorio a¨²n m¨¢s extenso. Los edificios adjuntos estaban m¨¢s retirados y la Pir¨¢mide de la Luna, levantada al final del periodo, entre los a?os 350-550 d.C., era de menores dimensiones a los actuales 42 metros de altura y 18.000 metros cuadrados de base.

Los arque¨®logos creen que la piedra verde de las fosas proviene de Puebla, a m¨¢s de 100 kil¨®metros de Ciudad de M¨¦xico

¡°El tepetate que conforma la superficie de la Plaza de la Luna fue modificado. Se han identificado m¨¢s de 400 oquedades usadas a lo largo de cinco siglos, peque?os hoyos de 20-25 cent¨ªmetros de di¨¢metro y unos 30 cent¨ªmetros de profundidad que se hallan en toda la extensi¨®n de la plaza. En muchos de ellos hab¨ªa piedras de r¨ªo, tra¨ªdas de otro lugar¡±, a?ade Ortega.

Los arque¨®logos creen que la piedra verde de las fosas proviene de la regi¨®n de Puebla ¨Ca m¨¢s de 100 kil¨®metros de distancia de la capital mexicana¨C , al igual que otra decena de estelas halladas anteriormente en Teotihuacan. ¡°Aunque tenemos un contexto a¨²n por comprender en su totalidad, ¨¦ste nos habla de la importancia de la piedra verde y de su vinculaci¨®n con las deidades acu¨¢ticas. Aqu¨ª (en la Plaza de la Luna) se han encontrado las esculturas m¨¢s grandes de la diosa de la fertilidad Chalchiuhtlicue, y es probable que el culto en este lugar estuviera ¨ªntimamente relacionado con ella¡±.

El equipo de investigadores est¨¢ formado por arque¨®logos, arquitectos, restauradores, f¨ªsicos y dise?adores industriales. El objetivo de este proyecto multidisciplinar es trazar un mapa completo de la zona que permita una radiograf¨ªa m¨¢s precisa de los misteriosos habitantes de la ciudad de Teotihuacan.