Ken Loach, el cineasta de lo humano

Ken Loach lo ha vuelto a conseguir. En 12 participaciones en el festival de Cannes ha obtenido dos Palmas de Oro, en 2006 por El viento que agita la cebada, y esta por I, Daniel Blake, a los que se suman dos premios del jurado y varios galardones del Jurado Ecum¨¦nico y de la cr¨ªtica internacional. En teor¨ªa, el realizador se iba a retirar con su anterior pel¨ªcula, pero fue una falsa alarma. Ha habido aplausos para un drama escrito de nuevo por Paul Laverty, que cruza dos historias, la de un carpintero reci¨¦n salido de un infarto, y una joven madre con dos hijos, que roza la cat¨¢strofe vital a punto de caer en la miseria. ¡°Son necesarios festivales como Cannes para la supervivencia del cine, resistid¡±.

Como en su cine, tan vivo como pol¨ªtico, Loach (Nuneaton, 1936) insiste en la deshumanizaci¨®n del mundo actual, esta vez a trav¨¦s del delirante proceso que vive el excarpintero para avanzar en sus reclamaciones, tanto v¨ªa telef¨®nica como por Internet, un monstruo para un hombre que ha dedicado su vida al trabajo manual. ¡°El sistema Welfare [el nombre del sistema de pensiones brit¨¢nico] est¨¢ hecho de forma cruelmente consciente. Es incre¨ªble: a los pobres se les dice que la pobreza es culpa suya, porque depende de ellos tener trabajo. Las personas m¨¢s vulnerables est¨¢n siendo arrasadas por el sistema en general¡±. Loach ha hecho la pel¨ªcula para que ¡°rompa corazones y enfade al p¨²blico¡±. ¡°Cre¨ªamos que el relato era tan poderoso, que deb¨ªamos mantener esa sencillez¡±, dijo el d¨ªa de su presentaci¨®n, y es probablemente el mejor resumen que puede hacerse de su forma de dirigir. A?os de televisi¨®n y de documentales le curtieron el estilo hasta que logr¨® el reconocimiento internacional con Agenda oculta en 1990. Desde entonces un corpus de enormes filmes nacidos de un hombre peque?o, de salud quebradiza pero car¨¢cter rocoso: Lloviendo piedras, Riff Raff, Tierra y libertad, La canci¨®n de Carla, Mi nombre es Joe, La cuadrilla, Solo un beso, Felices diecis¨¦is, Buscando a Eric, La parte de los ¨¢ngeles o Jimmy¡¯s Hall.

Nunca tuvo pelos en la lengua. Aqu¨ª en Cannes, por ejemplo asegur¨® no estar de acuerdo con el concepto de la UE, un ¡°invento neoliberal¡±, pero cree que la cosa puede ser peor, y se opone al Brexit en el refer¨¦ndum del pr¨®ximo d¨ªa 23 de junio: ¡°La mejor manera de cambiar la UE es desde dentro. Los gobiernos nacionales tienden a ir hacia la derecha. As¨ª que debemos unirnos los grupos de izquierdas para poder encarar el ataque de las grandes compa?¨ªas¡±. Tras tantos galardones en todo tipo de festivales, incluidos el Oso de Honor en la Berlinale en 2014, el esp¨ªritu del viejo guerrillero sigue en pie, alejado de las glorias, manteni¨¦ndose vigilante ante las injusticias de este mundo. ¡°Las cosas no mejoran, pero nosotros no podemos bajar los brazos¡±.