Un eufemismo que mata

En 2010, la directora Andrea Testa filmaba una pel¨ªcula casera. Un ensayo a pocos d¨ªas de terminar la carrera de cine. Entre los chicos que participaron estaba Gabriel, un joven de 17 a?os que era pobre pero nunca hab¨ªa robado. Al promediar la filmaci¨®n, Gaby cay¨® abatido por un disparo en la cabeza que le propin¨® un joven de su misma edad, en un cruce entre pibes del mismo barrio. En ese mismo momento comenz¨® para la realizadora y la familia del joven la misi¨®n de retratarlo de una forma real. Para ello debieron enfrentar a uno de los eufemismos m¨¢s condenatorios de Argentina: el del Pibe Chorro.

Ropa deportiva, gorra tapando los ojos, zapatillas fl¨²o. El arquetipo de lo que la sociedad argentina llama Pibe Chorro. El eufemismo hace gala de un reduccionismo condenatorio para las clases pobres y relaciona en forma directa pobreza con delito. Es com¨²n entonces que una persona cruce de vereda cuando se cruza con un joven que responde a este arquetipo, o peor, que un patr¨®n le niegue un trabajo. El documental de Testa recorre este estigma social e intenta abordar el problema al rev¨¦s de como lo hacen los grandes medios de comunicaci¨®n: desde la marginaci¨®n social y no desde la consumaci¨®n del delito.

Adem¨¢s, recurre al humor que los chicos del barrio 22 de Enero de La Matanza (en el conurbano de Buenos Aires) le impregnan al drama de la marginalidad y la ausencia total del Estado, que marca a fuego en estas zonas. La cinta utiliza varios recursos como las poes¨ªas de Vicente Zito Lema, entrevistas y un rico archivo propio para adentrarse en un mundo conocido a medias por la audiencia local. Tambi¨¦n ofrece una mirada judicial, con el aporte del defensor oficial de menores de 16 a?os en conflicto con la ley, Gustavo Gallo, quien alerta acerca de la violencia a manos de las fuerzas policiales en detenciones callejeras.

Asimismo, relata la historia de un joven que cumpl¨ªa condena en un instituto de menores y que en el momento de ser informado sobre su libertad, manifest¨® que no quer¨ªa salir porque all¨ª pod¨ªa comer todos los d¨ªas e ir a la pileta. ¡°Me cost¨® explicarle que para garantizar su derecho a la alimentaci¨®n y la recreaci¨®n no deb¨ªa estar privado de la libertad¡±, cont¨® Gallo.

Este parece ser el a?o de Andrea Testa, ganadora junto a Francisco Marquez (aqu¨ª asistente de direcci¨®n y pareja en la vida real) de la categor¨ªa m¨¢s importante del Bafici, el festival de cine de Buenos Aires y de reciente participaci¨®n en el Festival de Cannes. ¡°Gracias a Dios que est¨¢ Pibe Chorro porque as¨ª caigo a la tierra. El Festival de Cannes fue un monstruo muy lindo, pero de mercado. Nosotros buscamos hacer cine, y ah¨ª aparece este documental para intervenir en la realidad¡±, explic¨® la realizadora.

Consultada acerca del contenido del film, sostuvo que ¡°mucha de la construcci¨®n de estos prejuicios vienen de los medios de comunicaci¨®n, que resaltan esas caracter¨ªsticas para que los metan presos siendo menores; esa verdad uno la puede tomar para reflexionar y ver que ellos viven en una violencia constante¡±.

¡°Esta pel¨ªcula me cambi¨® en muchos aspectos. En lo profesional me ayud¨® a tomar riesgos, como el de encarar un documental no cl¨¢sico. Creo que va a generar debates ideol¨®gicos porque nos interpela. A m¨ª me pone en un lugar de incomodidad porque yo volv¨ªa a mi casa con una cama calentita y me dedico al cine. Pero eso no lo vamos a resolver¡±, agreg¨®.