Argentina se sube al tren de Ernesto Sabato
Una multitud participa en el primer festival en homenaje al autor de 'El t¨²nel'
Buenos Aires y Santos Lugares, origen y ¨²ltima parada de Ernesto Sabato (1911-2011). Una multitud subi¨® este s¨¢bado al tren que une ambas localidades para homenajear al reconocido escritor argentino en el primer Festival Sabato, que se celebra este fin de semana. El barrio que el autor de El t¨²nel consideraba su "lugar en el mundo" recibi¨® a los visitantes con fotograf¨ªas, murales, obras teatrales, charlas y conciertos dedicados a su hijo ilustre, mientras que familiares y conocidos instaron a los argentinos a seguir su ejemplo.
"Siento mucha emoci¨®n de que se le haga este homenaje y que se le recuerde con alegr¨ªa. Mi padre y otras personalidades nos ense?aron que la ¨¦tica y la moral son posibles y este es un mensaje de alegr¨ªa para mucha gente que est¨¢ desesperanzada", dice a EL PA?S el cineasta Mario Sabato, hijo del escritor. Considera casi un milagro la "continuidad institucional" para preservar el legado de su padre, dado el vuelco de Gobierno, que pas¨® de manos peronistas a la alianza conservadora Cambiemos, tanto a nivel nacional, como provincial y municipal. "Espero que esto sirva para darnos cuenta que hay causas comunes para todos los argentinos, que se vuelva a buscar ejemplo en aquellos para los que la honestidad no era un m¨¦rito sino una obligaci¨®n".
La casa en la que Sabato vivi¨® gran parte de su vida, a solo 200 metros de la estaci¨®n de tren que tanto frecuentaba, ha sido convertida en un "museo vivo" en su memoria. En ella es posible ver su gran biblioteca, la vieja Remington en la que escribi¨® casi toda su obra, el estudio en el que pintaba -fue su primera afici¨®n art¨ªstica- y su hermoso jard¨ªn, en el que sobresale la estatua de la diosa Ceres que le fue donada en honor a su novela Sobre h¨¦roes y tumbas.?
Su prometedora carrera como f¨ªsico se interrumpi¨® en Par¨ªs, donde lleg¨® en los a?os 30 para trabajar en el laboratorio Curie. Las cada vez m¨¢s largas noches con los surrealistas hicieron "incompatible" su trabajo cient¨ªfico durante el d¨ªa, recuerda el m¨²sico Guido Sabato, uno de de los nietos del escritor. Una d¨¦cada despu¨¦s, tambi¨¦n fue la capital francesa el origen de su reconocimiento literario internacional, de la mano de Albert Camus, que qued¨® fascinado al leer El t¨²nel, publicado originalmente en la prestigiosa revista Sur, dirigida por Victoria Ocampo. "El ¨¦xito lleg¨® en barco", dice Guido, quien se?ala que antes de Camus su abuelo no encontraba editorial que lo publicase y despu¨¦s se peleaban por hacerlo.?
Guido destaca que en cada espacio de la casa-museo hay un v¨ªdeo en el que su abuelo relata espacios de su vida y su obra, lo que la ilumina de un esp¨ªritu sabateano. "Fue un librepensador que fue dejando en su vida las grandes corporaciones". Entre ellas cita el comunismo, del que Sabato se desenga?¨® cuando descubri¨® las purgas de Stalin; la ciencia, de la que se alej¨® en Francia; y "el antiperonismo", que abandon¨® al ver c¨®mo persegu¨ªan a los simpatizantes del expresidente Juan Domingo Per¨®n.
"Todo esto hizo que se ganara una gran cantidad enemigos en distintas generaciones, ya que vivi¨® casi cien a?os", concluye su nieto entre risas.A¨²n as¨ª, tambi¨¦n hizo buenos amigos, como la pol¨ªtica y activista en derechos humanos Graciela Fern¨¢ndez Mejide, presente hoy en el homenaje. "Fue imprescindible en uno de los momentos bisagra de la historia de nuestro pa¨ªs, el regreso a la democracia", asegura Fern¨¢ndez Mejide. "Era un hombre com¨²n metido en una empresa importante", lo define quien fue su compa?era de trabajo en la Comisi¨®n Nacional sobre la Desaparici¨®n de Personas (Conadep), responsable del informe Nunca M¨¢s, que document¨® el horror de la ¨²ltima dictadura (1976-1983) y permiti¨® sentar en el banquillo a los miembros de las Juntas Militares.
Guido explica que una vez, cuando ¨¦l ten¨ªa 14 a?os, su abuelo lo ech¨® de casa por decir que "el anarquismo es la destrucci¨®n del Estado", pero agrega que pocos a?os despu¨¦s se mud¨® a vivir con ¨¦l y le recuerda como "un viejo sabio con una sonrisa de chico". Durante el festival lo homenajear¨¢ con un recital de jazz para el que ha elegido temas de esa Par¨ªs de los a?os 30 y 40 que tanto influy¨® en la vida de quien se erigi¨® no solo como uno de los grandes narradores argentinos del siglo XX sino tambi¨¦n como figura central de la vida y la cultura del pa¨ªs.
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