Pasi¨®n y tragedia con ¡®Penny Dreadful¡¯
"Es demasiado f¨¢cil ser monstruos. Vamos a intentar ser humanos". Ya es demasiado tarde para los personajes que habitan 'Penny Dreadful'
"Es demasiado f¨¢cil ser monstruos. Vamos a intentar ser humanos". Ya es demasiado tarde para los personajes que habitan Penny Dreadful (o habitaban, ya hay que hablar de ella en pasado). La frase la pronuncia un V¨ªctor Frankenstein lleno de compasi¨®n y de culpabilidad hacia una de sus criaturas en la recta final de la serie en la que personajes cl¨¢sicos de la literatura de terror conviv¨ªan en un mundo que se acercaba poco a poco hacia la destrucci¨®n absoluta. Seres mitad monstruos, mitad humanos que luchaban contra su naturaleza y sus instintos mientras que trataban de enfrentarse al mal que residen en este mundo.
"La pasi¨®n nos conduce a la tragedia", dice Dorian Grey en el ¨²ltimo cap¨ªtulo a modo de anticipo del final de la serie que se acaba de despedir en su tercera temporada. Si se mira hacia atr¨¢s, este era el momento adecuado para cerrar una historia que corr¨ªa peligro de perder el norte. Mejor una retirada a tiempo que esperar a que Vanessa Ives y sus posesiones demon¨ªacas se fueran de madre.
"Criaturas benditas, he o¨ªdo c¨®mo os reclam¨¢is mutuamente". Un poema de William Wordsworth sirve para cerrar la temporada final, en la que los personajes han tratado de encontrar su propio camino aislados de los dem¨¢s. Para unos, su destino final fue la soledad tras haber intentado encontrar la felicidad en un mundo que parece neg¨¢rsela una y otra vez. Otros volvieron a reunirse. Para todos ya era demasiado tarde.
"?A d¨®nde ha huido el resplandor visionario? / ?D¨®nde est¨¢n ahora la gloria y el ensue?o?". Penny Dreadful se despide dejando la sensaci¨®n de que una temporada m¨¢s podr¨ªa haber sido una mala decisi¨®n. Su final es redondo, cierra las historias de los personajes y no deja flecos pendientes. Da a los espectadores la posibilidad de despedirse de cada uno de ellos y todos tienen su momento. Ha sido una serie con personalidad, con un estilo definido, extra?o, diferente, como los monstruos que la protagonizaban. Ha sabido aprovechar a su favor el pastiche del que part¨ªa. En unos momentos ha funcionado mejor que en otros, pero siempre estaba Eva Green y su Vanessa Ives para salvar cualquier situaci¨®n. O Billie Piper y su Lily. Qu¨¦ poder¨ªo el de las mujeres de Penny Dreadful.
Los monstruos optaron por aceptar su destino. Y, aunque a sus seguidores les pillara por sorpresa, la serie tambi¨¦n ha aceptado su destino para terminar a tiempo. Vanessa Ives ya puede dejar de sufrir.
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