Cuadros falsos en la pinacoteca y el lugar m¨¢s silencioso de Estados Unidos

Colgar cuadros falsos junto a las obras de arte aut¨¦nticas. Esta es la sorprendente propuesta que se ha sacado de la manga un grupo de museos brit¨¢nicos. Pretenden con ello llamar la atenci¨®n de los visitantes, evitar que se despisten o que su cabeza se vaya a las nubes mientras contemplan el lienzo. Todo ello es parte, en realidad, de un show televisivo, Fake! The Great Masterpiece Challenge (Falso, el reto de la gran obra de arte), programa que ha emprendido una cruzada contra el d¨¦ficit de atenci¨®n de los que acuden a las pinacotecas brit¨¢nicas. Los estudios demuestran que el visitante destina menos de 30 segundos de media a contemplar una obra de arte. Y parte de ese tiempo, en realidad, se destina a leer la informaci¨®n que acompa?a a cada cuadro.

La Scottish National Portrait Gallery de Edimburgo, el National Museum de Cardiff, la Guildhall Art Gallery de Londres, la Manchester Art Gallery, la Lady Lever Art Gallery de Liverpool y el Walker Art Gallery, tambi¨¦n de Liverpool, son algunos de los museos que participan en este espacio televisivo que arranc¨® el pasado 2 de julio, seg¨²n informa la web Quartz. Los cuadros falsos estar¨¢n colgados de las paredes de estos museos hasta el pr¨®ximo 1 de agosto.

El lugar m¨¢s silencioso de Estados Unidos

Tres d¨¦cadas para encontrar el sitio m¨¢s tranquilo de Estados Unidos. Y por fin, un lugar: la selva de Hoh, situada en el Olympic National Park, en el Estado de Washington (en la costa noroeste del pa¨ªs). El veredicto lo otorga Gordon Hempton , un ecologista ac¨²stico que ha recorrido el planeta en busca de enclaves donde reina la paz, grabando la profundidad de sus silencios.

La tranquilidad en realidad no se mide en funci¨®n de la ausencia de sonidos sino comprobando la escasez de ruidos generados por la actividad humana como, por ejemplo, el paso de aviones, o el rumor lejano de la circulaci¨®n en una autopista. La poluci¨®n ac¨²stica afecta a m¨¢s del 88% del territorio de Estados Unidos, seg¨²n publica Crosscut.

Gordon Hempton comenz¨® su cruzada en pos del silencio en el oto?o de 1980, cuando experiment¨® toda una epifan¨ªa: conduciendo entre Seattle y Madison, aparc¨® su coche en medio de un campo de ma¨ªz en plena noche. Escuchar el rumor de los grillos, de una tormenta lejana que se iba acercando, en medio de la nada, le hizo darse cuenta de que aquello era una maravilla. Pens¨® que deb¨ªa dedicar su vida a buscar lugares en que pudiera volver a experimentar esa sensaci¨®n.