El maluf, tradici¨®n ¨¢rabe en las venas del flamenco
Este g¨¦nero naci¨® en la pen¨ªnsula ib¨¦rica durante el periodo del al-?ndalus
Tras la puesta del sol, una agradable brisa se cuela entre las monta?as que rodean Testur, una peque?a ciudad situada en el coraz¨®n de T¨²nez. Cientos de personas se han congregado en su modesto teatro al aire libre para asistir al d¨¦cimo concierto de su certamen estival de m¨²sica. El p¨²blico vibra con una actuaci¨®n biling¨¹e, que combina con naturalidad el ¨¢rabe y el espa?ol. La pandereta y el can¨®n, un tradicional instrumento de cuerda ¨¢rabe, comparten el escenario con otros cinco instrumentos y un zapateao flamenco. Pura fusi¨®n cultural. Entre el p¨²blico, una ni?a arranca las sonrisas de los m¨²sicos, tres de ellos espa?oles, con un inesperado grito de ¡°?ol¨¦!¡±.
El ¨¦xito de la funci¨®n era previsible. ¡°Hay un estrecho v¨ªnculo entre el festival y Espa?a. Cada a?o invitamos a m¨²sicos espa?oles y el p¨²blico les ama, sobre todo el flamenco¡±, cuenta el director del evento, Shakib Feriani. No en vano, Testur es la capital tunecina de la m¨²sica arabo-andalus¨ª, y muy especialmente, de su subg¨¦nero conocido como maluf, que desde hace siglos sirve de banda sonora de bodas y otros festejos populares. Fundada por moriscos y jud¨ªos que hu¨ªan de las torturas de la Inquisici¨®n, la ciudad exhibe con orgullo sus ra¨ªces ib¨¦ricas, presentes en su gastronom¨ªa, su arquitectura, su lengua -posee algunos vocablos propios derivados del castellano- y sobre todo su m¨²sica. Adem¨¢s, este a?o es especial, pues celebra el 50 aniversario de su Festival Internacional de maluf y m¨²sica tradicional ¨¢rabe.
A diferencia de otros festivales de verano que salpican la geograf¨ªa tunecina, como el de Hammamet, a este no le impulsa un inter¨¦s comercial. Adem¨¢s de traer a artistas de m¨²sica tradicional de talla internacional, ofrece un espacio y una competici¨®n para aquellos grupos de maluf amateurs de todo el pa¨ªs. ¡°Tenemos tres premios, y el ganador se lleva 5.000 dinares (unos 2.100 euros)... Nuestro objetivo es promocionar que los j¨®venes se interesen por el maluf. Aqu¨ª en Testur hay un gran inter¨¦s, pero en el resto del pa¨ªs los j¨®venes se est¨¢n alejando de la m¨²sica tradicional¡±, lamenta Feriani, preocupado por la preservaci¨®n de este g¨¦nero musical. De hecho, la actividad de los organizadores no termina con el festival, el pr¨®ximo 31 de julio, pues participan en proyectos de difusi¨®n del maluf entre la juventud durante todo el a?o.
Este g¨¦nero naci¨® en la pen¨ªnsula ib¨¦rica durante el periodo del al-?ndalus, y sus tres escuelas tradicionales se asocian a tres ciudades andaluzas: C¨®rdoba, Sevilla y Granada. De all¨ª se extendi¨® hace siglos por todo el norte de ?frica, donde se ha conservado y evolucionado despu¨¦s de la expulsi¨®n de los moriscos. ¡°En el maluf, la m¨²sica sostiene la poes¨ªa cl¨¢sica ¨¢rabe, por lo que siempre debe haber un cantante. En cuanto a los instrumentos, a veces incorpora un gran n¨²mero, y otras solo un par o tres¡±, cuenta Rachel Colwell, una estudiante de doctorado por la universidad estadounidense de California en Berkeley especializada en maluf (que en ¨¢rabe significa ¡°surgido de la costumbre¡±).
A trav¨¦s de los siglos, este arte, transmitido b¨¢sicamente de forma oral -no fue hasta el siglo XX que algunas de sus melod¨ªas fueron transcritas-, ha ido acumulando una gran diversidad de ritmos y canciones. ¡°El maluf ha ido incorporando las influencias de diversas culturas, como la otomana o las subsaharianas. No es el mismo que lleg¨® de la pen¨ªnsula¡±, explica tras el concierto Syrine Ben Moussa, a la vez cantante, compositora e investigadora de la m¨²sica ¨¢rabe-andalus¨ª en la universidad francesa de La Sorbona.
¡°Hay muchas conexiones entre el maluf y el flamenco, en sus ritmos, pero tambi¨¦n en otros aspectos como la improvisaci¨®n. Hay un sentimiento compartido¡±, sostiene esta artista tunecina, hija de Testur, en un excelente castellano. Melisa Calero, una bailaora cordobesa que colabora con Ben Moussa desde 2009, asiente. ¡°La influencia del maluf se siente. Y es que el flamenco es mezcla de muchas cosas, entre ellas sus ra¨ªces ¨¢rabes¡±, comenta Calero, sentada en el patio de una casa tradicional de Testur con sabor andaluz.
De Sevilla a T¨²nez
Este es el t¨ªtulo de un proyecto de fusi¨®n musical que Syrine Ben Moussa, su creadora, define como ¡°un viaje en el tiempo a trav¨¦s de m¨²sicas diferentes¡±, y que une la capital andaluza con T¨²nez pasando por otros dos pa¨ªses del Magreb, Marruecos y T¨²nez. El proyecto ech¨® a andar en 2009, y ahora ya lo componen una decena de m¨²sicos espa?oles y magreb¨ªes. En el marco de este proyecto, tres artistas espa?oles, la bailaora Melisa Calero, la cantante Rosa ?ngela Garc¨ªa y el guitarrista Manuel Delgado, se han desplazado a T¨²nez para participar en los festivales de Cartago y Testur. ¡°El objetivo del proyecto es transmitir un mensaje de paz y tolerancia, la idea de que la mezcla es enriquecimiento¡±, asevera Ben Moussa. En una era de tensiones entre las dos cuencas del Mar Mediterr¨¢neo, ambas bajo la amenaza del yihadismo, esta filosof¨ªa parece m¨¢s necesaria que nunca.
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