¡°No me considero autora de novela negra, soy escritora¡±

Clara Pe?alver (Sevilla, 1983) se embarc¨® en 2013 en una osada aventura mano a mano con la investigadora Ada Levy. Dos mujeres fuertes, tenaces y apasionadas por las motos. Cuando naci¨® C¨®mo matar a una ninfa, la primera parte de la trilog¨ªa polic¨ªaca que le ha brindado a la escritora sevillana la oportunidad de consolidarse en el panorama literario espa?ol, tras haberse iniciado con Sangre (2010), la autora y el personaje estaban dentro del mismo cuerpo. "Al principio ten¨ªamos muchas cosas en com¨²n. Me sent¨ªa muy insegura y por eso le trasmit¨ªa a Ada emociones que me eran muy cercanas", relata Pe?alver.

El idilio entre la mujer ficticia y la real continuar¨ªa un a?o despu¨¦s con El juego de los cementerios, la segunda novela. Reci¨¦n publicada la tercera y, por el momento, ¨²ltima entrega de la serie, ambas han viajado lejos del punto de partida. "La fractura del reloj de arena la hemos escrito una al lado de la otra". Ya no son una sola, sino dos amigas que se conocen bien. Tanto, que la creadora confiesa que cada vez empatiza menos con alguno de los defectos de la protagonista de sus novelas.? "No soporto que Ada siempre huya de sus problemas, algo que se ha ido agudizando a medida que avanza la historia". Una faceta a la que el personaje tendr¨¢ que enfrentarse sin remedio en el transcurso de la trama del tercer libro, en el que se encuentra en su peor momento emocional y sentimental. En ese universo psicol¨®gico se sumerge la autora y le otorga una importancia vital al desarrollo de las tramas y al perfil de los personajes, alej¨¢ndose por completo en ese punto de la tradici¨®n escandinava, siempre caracterizada por unos caracteres m¨¢s as¨¦pticos. "Los novelistas de la zona mediterr¨¢nea somos m¨¢s cercanos, tenemos un perfil social que nos viene de esa cultura. En cambio, la novela n¨®rdica refleja muy bien la contenci¨®n, el sentido de llevar la profesi¨®n por dentro", opina.

Si bien su carrera la hayan marcado las historias polic¨ªacas prefiere no etiquetarse en el g¨¦nero. "No me considero autora de novela negra, me considero escritora".? Antes que encasillarse, prefiere dejar aparcada unos a?os a Ada Levy. "Ella y yo firmamos un acuerdo hace tiempo, que me ayudara a crecer como escritora. Creo que ha llegado el momento de cambiar de registro, pero me imagino trabajando con una Ada de 60 a?os", bromea. Adelanta que ya est¨¢ preparando otra novela que nada tiene que ver con la novela negra, y que en septiembre publicar¨¢ el libro infantil Creativos y felices, siguiendo la estela de otros dos ya editados, Cuentos para educar con inteligencia emocional y Hoy estoy..., todos empapados de un m¨¦todo creativo y educativo basado en la diversi¨®n y el juego que ella misma cre¨® y cuya efectividad prob¨® con su sobrina.

En su escritura para adultos tambi¨¦n incide siempre en los recovecos de la mente, influida por la carrera de Biolog¨ªa, de la que se licenci¨®. Considera que esa ciencia marca su forma de escribir, de ah¨ª su empe?o en desgranar la psique humana aunque sea en la ficci¨®n. Adem¨¢s de la obra que ya est¨¢ escribiendo, tiene otra ideada que s¨ª que es polic¨ªaca pero que se centrar¨¢ sobre todo en "la salud mental y el estigma que sufren las personas que tienen esa enfermedad".

Mujer polifac¨¦tica y polivalente, Clara Pe?alver contin¨²a sin parar alimentando su creatividad y aprovechando "las cosas buenas de la vida que aparecen por casualidad". Sin saber explicarse exactamente c¨®mo, comenta en tono jocoso, ha recalado al frente del programa de arte La mitad invisible de La 2. "Me llamaron cuando se fue el anterior presentador y cre¨ª que era para hacerme una entrevista. Pero no, me quer¨ªan a m¨ª como conductora". Admite estar encantada con la experiencia y con el aprendizaje. "Soy curiosa y me gusta empaparme de las cosas, pero nunca me considerar¨¦ una experta en arte". Con m¨¢s seguridad habla de las motos, su gran pasi¨®n, y las responsables de que la Gu¨ªa Repsol haya confiado en ella para hacer de cicerone por las carreteras. "Es un mundo que supone libertad, es una forma de vida".