¡®Luke Cage¡¯, los h¨¦roes tambi¨¦n llevan capucha

Cuando en 2012 George Zimmerman tirote¨® en la calle al joven negro Trayvon Martin, la sudadera con capucha que llevaba el asesinado se convirti¨® en un s¨ªmbolo contra la violencia racial en EE UU. Ahora es alguien muy distinto quien luce una de esas prendas. Se llama Luke Cage, es protagonista de la nueva serie de Netflix y todo un superh¨¦roe Marvel. Las balas le rebotan. Pero su mensaje es el mismo que gritaban los manifestantes: el villano no se define por su vestimenta y color de piel; los afroamericanos tambi¨¦n son h¨¦roes. Una obviedad que no parece tan clara gui¨¢ndose por los referentes culturales contempor¨¢neos.

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Hoy parece impensable que entre 1997 y 1998 se estrenaran en pocos meses tres pel¨ªculas con h¨¦roes negros de c¨®mic: Blade, Steel y Spawn. Y es que desde que Los Vengadores ¡ªcon quien Cage comparte universo¡ª y otros supertipos colonizaron Hollywood, ning¨²n h¨¦roe afroamericano ha protagonizado su propia pel¨ªcula (algo que cambiar¨¢ pronto con el lanzamiento de Black Panther y Cyborg). Por eso Luke Cage llega como un soplo de aire fresco. La serie no solo no se averg¨¹enza de la raza de la mayor parte del elenco capitaneado por Mike Colter, sino que adem¨¢s se nutre de los iconos de la cultura negra y el blaxpoitation.

Hay una sala de fiestas regentada por capos de la droga con sombreros llamativos, una barber¨ªa donde los hombres pasan horas charlando sobre sus cosas, suena una estupenda banda sonora retro y aparece una polic¨ªa de armas tomar llamada Misty Knight que en otro tiempo podr¨ªa haber tenido el rostro de Pam Grier. Todo sucede, solo pod¨ªa ser as¨ª, en Harlem, barrio que se erige en protagonista principal. Ese enfoque la hace ¨²nica frente a la marabunta actual de series de superh¨¦roes. Es oscura y callejera como sus compa?eras Daredevil y Jessica Jones, es verdad, aunque su herencia pulp la convierte en un The Get Down con testosterona, m¨¢s contenida, pausada y, en realidad, sin demasiada acci¨®n.

En el centro de este batiburrillo de g¨¦nero se encuentra un protagonista solitario, casi de western, que solo busca una vida normal: Cage, un vigilante a?ejo, incorruptible e indestructible, est¨¢ dispuesto a salvar su barrio cual ideal Superman afroamericano. Pese a ser tan heroico como plano y tomarse demasiado en serio, se crece ante sus carism¨¢ticos y maquiav¨¦licos villanos interpretados por Alfre Woodard y Mahershala Ali. Una pareja que demuestra que los secundarios y los malvados siguen siendo lo mejor de las series Marvel, esta vez muy entregada a las mujeres fuertes. En Luke Cage lo de menos, de hecho, es Luke Cage. Desde hoy ya pod¨¦is uniros a la petici¨®n para dar a Misty Knight (a la que da vida la desconocida Simone Missick y que volver¨¢ en Defensores) una serie propia.

En realidad, Luke Cage solo es una serie de superh¨¦roes porque su protagonista tiene poderes. Ya ni siquiera se llevan las mallas y la licra amarilla que utilizaba en los c¨®mics. No hay espectaculares secuencias de acci¨®n y el ritmo a veces resulta demasiado farragoso. Su falta de similitudes con otras series del g¨¦nero es, sin embargo, una de las principales cualidades del mundo de los superh¨¦roes, que deber¨ªan tener libertad para adoptar otras identidades, como la ciencia ficci¨®n (Guardianes de la Galaxia), comedia (Deadpool) o cine negro (el Batman de Nolan), y romper as¨ª con la estructura cl¨¢sica. As¨ª, cuando se empe?a en seguir al pie de la letra la forma de su antecesora Daredevil, sobre todo en los primeros episodios, es cuando su propuesta flaquea. Una propuesta que, por otra parte, podr¨ªa haber sido contada en seis u ocho episodios, y no en los 13 de las series Marvel.

Quiz¨¢s sea el momento de que Luke sea conocido por fin por algo m¨¢s que por haber cedido su apellido a Nicolas Cage y por ser el proyecto so?ado de Quentin Tarantino antes de que la idea de Pulp Fiction se cruzara en su camino. Quiz¨¢s incluso pueda convertirse en imagen de cientos de j¨®venes faltos de referentes?demasiado acostumbrados a mirar a los lados si caminan con capucha.

?Qui¨¦n es Luke Cage?

Diadema en el afro y licra amarilla con medio pecho descubierto. Luke Cage, o Power Man por aquel entonces, nac¨ªa en 1972 del l¨¢piz de Archie Goodwin, John Romita Sr. y George Tuska como uno de los intentos de Marvel de llegar a otro tipo de p¨²blico y aprovechar as¨ª el empuje de g¨¦neros pulp. Si Pu?o de Hierro (la pr¨®xima serie de Netflix) era el intento de reunir a los amantes de las artes marciales bajo su techo, este h¨¦roe de alquiler beb¨ªa directamente del blaxplotation.

Su Nueva York, sin embargo, era distinto al del resto de los h¨¦roes Marvel, mucho m¨¢s criminalizado y oscuro, alejado del colorismo de Spiderman. Pero el subg¨¦nero dedicado a los afroamericanos, que explot¨® con el ¨¦xito de SHAFT, pronto perdi¨® su empuje inicial, as¨ª que para que la serie no desapareciera Pu?o de Hierro no tard¨® en convertirse en su inseparable partenaire. Juntos eran los H¨¦roes de Alquiler. Cage fue cambiando y evolucionando con las d¨¦cadas, pero su popularidad lleg¨® a su pico cuando Brian Michael Bendis lo recuper¨® m¨¢s adulto y menos superheroico en Alias, como pareja sexualidad de Jessica Jones, y ya en 2005 como un vengador con todo derecho junto al Capit¨¢n Am¨¦rica, Iron Man, Lobezno o el trepamuros. Bendis lo convirti¨® en uno de los grandes l¨ªderes del equipo, y su caracterizaci¨®n, sin diadema, afro ni licra, es de la que m¨¢s bebe hoy la televisiva.

De la misma manera que Cage, otros personajes propiamente del c¨®mic tambi¨¦n han sido adaptados al realista mundo de Netflix en televisi¨®n. Misty Knight ¡ªy su brazo bi¨®nico¡ª es una de las grandes hero¨ªnas y estrategas afroamericanas de Marvel, siempre como compa?era de los H¨¦roes de Alquiler. La controladora Mariah Dillard, Black Mariah (presentada en Hero for Hire #5), a su vez, ha perdido las hechuras que la convert¨ªan tambi¨¦n en una peligrosa adversaria en el cara a cara. El personaje, aun as¨ª, no ha tenido siquiera una decena de apariciones desde sus or¨ªgenes, as¨ª que el terreno era f¨¦rtil para crear alguien nuevo. Tampoco el mafioso y traficante de drogas Cottonmouth, que en los c¨®mics tiene literalmente una peligrosa dentadura, hab¨ªa tenido muchas apariciones en las vi?etas.

Gracias a la televisi¨®n, Cage, hoy un padre responsable y clave en el universo Marvel, tiene ahora mismo varias series nuevas en las estanter¨ªas, as¨ª que es el momento de recuperar al ¨¦xito y remozarlo para los nuevos tiempos.