El Vel¨¢zquez premia a Marta Minuj¨ªn, maestra argentina del arte ef¨ªmero

Marta Minuj¨ªn, la m¨¢s conocida y popular artista argentina contempor¨¢nea, est¨¢ en plena forma. A sus 73 a?os, sigue hiperactiva con varios proyectos a la vez, pero recibe euf¨®rica la noticia de que el ministerio de Cultura espa?ol le ha concedido el premio Vel¨¢zquez de las Artes Pl¨¢sticas de 2016. ¡°Estoy feliz, han premiado la rebeld¨ªa, y eso no es f¨¢cil¡±, cuenta a EL PA?S. Minuj¨ªn lleva toda una vida concentrada en el arte ef¨ªmero, en los happenings y grandes montajes pensados para romper esquemas. Desde uno que hizo en 1985 con Andy Warhol, al que le pagaba simb¨®licamente la deuda externa argentina con mazorcas de ma¨ªz, al ¨²ltimo que est¨¢ preparando en Alemania con 100.000 libros prohibidos por alg¨²n r¨¦gimen con los que construir¨¢ un Parten¨®n casi a tama?o natural.

Es imposible moverse en el mundo art¨ªstico de Buenos Aires, una ciudad adicta a la cultura en todas sus formas, sin cruzarse con Marta Minuj¨ªn. La prol¨ªfica artista siempre est¨¢ en todas partes. Y destaca con su sonrisa eterna y sus inconfundibles trajes de varios colores o sus gafas ex¨®ticas. Tiene una legi¨®n de fans y casi cada cosa que hace arrastra multitudes. Pero no siempre fue as¨ª. Minuj¨ªn recuerda ahora que en su larga trayectoria hubo momentos muy dif¨ªciles: ¡°Todo el mundo dec¨ªa que estaba loca. Cuando hice el Obelisco de pan dulce o el Gardel de fuego, me dijeron de todo. Siempre romp¨ªa, pero es que eso es el arte para m¨ª. Empec¨¦ a los 10 a?os y siempre hice cosas diferentes, por eso es tan importante este premio. No lo puedo creer, es fant¨¢stico, nunca pens¨¦ que llegar¨ªa. Es dif¨ªcil premiar lo ins¨®lito, lo que no sigue los c¨¢nones. Adem¨¢s, son 100.000 euros, eso ayuda mucho a seguir haciendo arte, yo pas¨¦ las mil antes de llegar ac¨¢¡±, se?ala.

El obelisco de pan dulce que ahora recuerda es una obra colosal de Minuj¨ªn que instal¨® por primera vez en 1978. El obelisco es el gran s¨ªmbolo de Buenos Aires, el lugar donde se celebra todo, incluidas las victorias de la selecci¨®n argentina. Est¨¢ en el coraz¨®n de la ciudad, en la Avenida 9 de julio. La artista hizo una r¨¦plica de 36 metros de altura (el original mide 68) con 10.000 paquetes de pan dulce, similar al panettone italiano. Al terminar la exposici¨®n, los dulces se distribu¨ªan entre el p¨²blico, algo habitual en toda su obra.

El Carlos Gardel de fuego del que habla tambi¨¦n fue muy pol¨¦mico. En 1981, en la bienal de Medell¨ªn, la artista plant¨® una estructura de hierro de 17 metros de alto recubierta de algod¨®n que representaba al cantante de tango. Despu¨¦s le prendi¨® fuego.

La artista vivi¨® muchos a?os a caballo entre Buenos Aires y Nueva York, donde lleg¨® en 1966 tras ganar una beca Guggenheim. All¨ª fue un personaje reconocido y amiga de Warhol. A su regreso form¨® parte la movida del Instituto Di Tella, cuna de grandes artistas argentinos de vanguardia. Ahora est¨¢ instalada en su ciudad, donde sigue con su estudio de siempre en el barrio de San Crist¨®bal, muy cerca del centro hist¨®rico de la capital. ¡°Warhol era genial, divino. Fue fant¨¢stico lo que hicimos con ¨¦l¡±, recuerda. ¡°Yo le llev¨¦ a The Factory mil choclos que hab¨ªa pintado de naranja. Nos pusimos sobre unas sillas y yo le entregaba los choclos como pago de la deuda externa argentina. Dimos vueltas sobre unas sillas y nos hicieron 12 fotos, aunque solo se conservan seis, las otras se perdieron. Yo creo que la deuda externa deber¨ªa estar pagada hasta el d¨ªa de hoy porque le dimos de comer al mundo, fuimos su granero¡±, cuenta la artista.

La idea sigue tan vigente que ahora va a reinventarla pero para Grecia. ¡°El 8 de abril en Atenas voy a hacer un pago de la deuda externa griega con aceitunas. Lo voy a hacer con alguien muy conocido que todav¨ªa no puedo contar. Tambi¨¦n en el 96 hice un pago a una doble de Thatcher por las Malvinas porque ella no quiso¡±. Ahora trabaja a tope para el Parten¨®n con libros prohibidos en Kassel, versi¨®n de uno que hizo en Buenos Aires en 1983, tras la recuperaci¨®n de la democracia, con textos vetados por la dictadura. En la Friedrichsplatz de Kassel, donde se instalar¨¢ la obra, el 19 de mayo de 1933, en una acci¨®n llamada ¡°Aktion wider den undeutschen Geist¡± (Campa?a en contra del esp¨ªritu no-germano), los Nazis quemaron unos 2.000 libros. Al desmontar la obra, los libros son regalados al p¨²blico.

El arte argentino, que tiene en Minujin a uno de sus mayores exponentes y en el Malba a su gran referente (, es el gran protagonista de la edici¨®n de este a?o de Arco. El presidente argentino, Mauricio Macri, tiene previsto viajar a Espa?a para esta exposici¨®n.

Minuj¨ªn cuenta con un p¨²blico fiel en Argentina. En el cierre de la I Bienal de Performance de Buenos Aires, celebrada a mitad de 2015, reuni¨® a centenares de personas en el Puente de la Mujer para que encontraran a su alma gemela con una aplicaci¨®n telef¨®nica creada para la ocasi¨®n. Los asistentes, vestidos de blanco y con un espejo, buscaron a su igual mientras la artista hac¨ªa llover p¨¦talos sobre ellos desde un helic¨®ptero.

La artista pl¨¢stica se distingue tambi¨¦n por sus frecuentes intervenciones en la v¨ªa p¨²blica con obras de grandes dimensiones. En 2011 inaugur¨® una Torre de Babel en una plaza de Buenos Aires con 30.000 libros procedentes de todo el mundo y dos a?os despu¨¦s us¨® el mismo material para construir una ?gora de la Paz en el barrio porte?o de Palermo. Como siempre, los libros se regalaron al p¨²blico. ¡°Yo vivo en arte, nunca estudi¨¦ nada, esta es mi vida. Y voy a seguir rompiendo hasta el final. Mi muerte tambi¨¦n va a ser una obra de arte, ya lo tengo pensado¡±, avanza. De momento sigue hiperactiva como siempre y ahora celebrando premios inesperados.