El arte de esculpir palabras
'Origami' es el ¨²ltimo disco de Rapsusklei, un MC zaragozano que ha cocinado su ¨¦xito a fuego lento
En la d¨¦cada de los 80, la Base A¨¦rea de Zaragoza tuvo la culpa de que en esa ciudad aragonesa entrase el rap y el hip hop estadounidense. Sonaba algo en la radio, los casettes pasaban de mano en mano, los skates comenzaron a ocupar la calle. En el barrio de La Magdalena, Diego Gil (Zaragoza, 1980) empez¨® a escuchar las cintas de sus hermanos mayores, se puso a escribir y se coloc¨® una gorra hacia atr¨¢s. Ten¨ªa nueve a?os y le atra¨ªan los versos, la rima. La poes¨ªa.
Ahora, ese Diego es Rapsusklei, un MC con m¨¢s de 160.000 seguidores en Twitter y m¨¢s de medio mill¨®n en Facebook, con decenas de colaboraciones, tres discos junto a Hazhe y cuatro en solitario, el ¨²ltimo, Origami (Eterno Miusik, 2016). ¡°El noble arte de hacer esculturas con el papel, en nuestro caso, el de los raperos, el de esculpir palabras. Adem¨¢s esa palabra me gusta mucho, tiene una fon¨¦tica bonita¡±.
Con Origami empieza, en febrero de 2017, una gira por Espa?a que continuar¨¢ en Latinoam¨¦rica: ¡°All¨ª tenemos much¨ªsimos seguidores, el efecto es bastante fuerte, y no solo medi¨¢tico. Ellos hacen muy buen rap, con buenas voces y buenas letras, estilos distintos. El hip hop hoy en d¨ªa est¨¢ en Am¨¦rica Latina¡±. Y apunta a esta m¨²sico como base de un movimiento social (¡°sobre todo en El Salvador, Guatemala y Honduras¡±) que ayuda a que los j¨®venes no entren a formar parte de pandillas: ¡°Y en zonas donde se hablan lenguas nativas, ayuda a que se conserven¡±.
Rapsusklei empez¨® haciendo rimar historias que ten¨ªan que ver con hormigas y abejas, despu¨¦s pas¨® a hablar del calimocho, luego de su barrio. ¡°Era marginal, duro, uno de esos barrios en los que podr¨ªa haber vivido El Vaquilla. Hab¨ªa yonkis, putas, delincuencia¡±. Diego Gil se crio en el bar que sus padres ten¨ªan en el barrio de La Magdalena, y ¨¦l viv¨ªa feliz subi¨¦ndose a un ¨¢rbol. ¡°Era muy mal estudiante, muy nerviosa, me costaba atender y en el cole no hab¨ªa mucha motivaci¨®n. Pero Lenguaje era lo que me gustaba. Acabaron ech¨¢ndome y ya no termin¨¦ nada. Me dediqu¨¦ a escribir¡±. Y a escuchar a su madre, que era cocinera en aquel bar, y que se pasaba horas y horas habl¨¢ndole sobre cultura, sobre lo que ocurr¨ªa en la calle, en las noticias. ¡°Siempre le ha gustado mucho leer¡±, apunta el MC.
En 1995 llegaron las primeras maquetas vendidas a nivel nacional. ¡°En 2002 lleg¨® el primer disco, La historia m¨¢s real de vuestras vidas (LP, LAM Records), junto a Hazhe¡±. Llegaron tambi¨¦n los viajes para ir a otras ciudades, las giras, las sesiones de fotos, el hacer y deshacer la mochila, la falta de rutina. Lleg¨® el ¨¦xito. Con el tiempo, o eso asegura ¨¦l. ¡°Es un boom cuando llevas un a?o o a?o y medio y tienes cientos de miles de seguidores, yo llevo 25 a?os rapeando, y espero seguir haci¨¦ndolo el resto de mi vida¡±.
Poco a poco, hasta ahora, cuando deja puesto el vinilo Honey, de Ohio Players, en su tocadiscos, aunque escucha desde flamenco hasta dancehall; ahora que lee de vez en cuando; que nunca sabe cu¨¢ndo va a ir y cu¨¢ndo va a volver; que tiene decenas de mails cada ma?ana; y que cree que la mejor canci¨®n, es la que todav¨ªa no ha escrito.
Puedes ver la agenda de Rapsusklei para 2017, aqu¨ª.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.