¡®La ciudad de las estrellas (La La Land)¡¯ rompe r¨¦cords y gana siete Globos de Oro

El n¨²mero inicial del show, celebrado este domingo en el hotel Beverly Hilton de Los ?ngeles, simulaba un atasco de coches con todas las estrellas esperando a llegar a la gala. De pronto se bajan de los coches y empiezan a cantar. La escena inicial de La La Land ya tiene ese estatus de ser tan reconocible que permite este tipo de homenajes. Sin haber ganado nada, ya hubiera sido suficiente reconocimiento de que es la pel¨ªcula que m¨¢s ha enternecido a Hollywood este a?o, o al menos as¨ª lo ha percibido la Asociaci¨®n de la Prensa Extranjera de Hollywood, que otorga estos premios.

Otra cosa es que sea capaz de enfrentarse a los grandes dramas en los Oscar dentro de un mes. El hecho de que Damien Chazelle ganara en la categor¨ªa de director y guion, las dos compartidas por comedias y dramas en los Globos de Oro, puede ser una pista de que La La Land es capaz de trascender su categor¨ªa. Pero ya no admite discusi¨®n que es la ni?a bonita de esta temporada en Hollywood, entre aquellos que no solo votan los premios sino que reconocen todos los rincones donde se ha rodado.

El triunfo de La La Land se inici¨® con su canci¨®n principal, City of stars, de Justin Hurwitz (que tambi¨¦n recogi¨® el premio a la banda sonora), que fue premiada por delante de un exitazo como Can¡¯t stop the feeling de Justin Timberlake. Sigui¨® con el premio para Ryan Gosling. Para cuando el director, Damien Chazelle, se impuso en su categor¨ªa, y Emma Stone gan¨® en la suya, estaba claro que la noche se trataba no solo de dar premios, sino de homenajear la pel¨ªcula de Chazelle en todas las formas posibles. El director, de 31 a?os, es adem¨¢s el m¨¢s joven en recoger este premio.

¡®La ciudad de las estrellas (La La Land)¡¯ rompe r¨¦cords y gana siete Globos de Oro

La competencia real este a?o estaba en la categor¨ªa de drama. Moonlight, la emocionante pel¨ªcula de Barry Jenkins sobre la infancia y juventud de un hombre negro en un barrio marginal de Miami en los ochenta, se llev¨® el premio por delante de la otra favorita, Manchester frente al mar. Fue el ¨²nico galard¨®n que tuvo esta enorme pel¨ªcula peque?a, que se basa en la propia experiencia del director, Barry Jenkins, y el guionista, Tarell Alvin McCraney. Ambos vivieron infancias en Miami muy parecidas a la del protagonista, con madres adictas en medio de la epidemia de crack que arras¨® las comunidades pobres y negras de la ciudad.

Casey Affleck, con una interpretaci¨®n magn¨¦tica de un hombre destruido por dentro por la peor tragedia imaginable y que debe sacar fuerzas de donde no hay para hacerse cargo de su sobrino en Manchester frente al mar, gan¨® el premio al mejor actor. Isabelle Huppert, protagonista de la francesa Elle (premiada como mejor pel¨ªcula extranjera), se impuso como mejor actriz frente a las estrellas norteamericanas Natalie Portman (Jackie), Amy Adams (La Llegada) o la muy celebrada Ruth Negga en Loving.

En las categor¨ªas de televisi¨®n, Atlanta, la serie de Donald Glover, es la mejor serie del a?o en opini¨®n de estos premios en el apartado de musical o comedia. The Crown, la historia de una joven reina Isabel de Inglaterra, es el mejor drama. Los ganadores vienen a confirmar el gusto de la Asociaci¨®n de la Prensa Extranjera por premiar siempre que puede talento nuevo en vez de homenajear repetidamente a la opci¨®n m¨¢s conservadora, como suelen hacer los Emmy. Los Globos disfrutan tocando con su varita series nuevas que, en general, merece la pena conocer, en vez de premiar todos los a?os a Veep o a Juego de Tronos, que por supuesto estaban nominadas. Atlanta y The Crown entra en la categor¨ªa de las series descubiertas por los Globos para el gran p¨²blico.

Lo mismo sucede con los actores de televisi¨®n. Claire Foy, la protagonista de The Crown, recogi¨® el premio a mejor actriz en drama de televisi¨®n. Lo mismo puede decirse de la victoria de Tracee Ellis Ross por su papel Black-ish, nominada por primera vez. En la sala estaba Julia Louis-Dreyfus, nada menos, leyenda de la televisi¨®n. Y otro buen ejemplo de esta tendencia es que Donald Glover, creador de Atlanta, se impusiera a Jeffrey Tambor, el alma de Transparent, o a Gael Garc¨ªa Bernal, que volv¨ªa a estar nominado por su director de orquesta de Mozart in the jungle.

El presentador del Tonight Show, Jimmy Fallon, condujo la ceremonia, pero nada m¨¢s. Dio la impresi¨®n de abdicar del trabajo de entretener al p¨²blico de vez en cuando. La ceremonia fue pesada, o al menos carente de tensi¨®n, para lo que nos ten¨ªan acostumbrados Ricky Gervais, que ten¨ªa a todo el mundo en vilo, y las geniales Tina Fey y Amy Poehler, cuya profesionalidad a¨²n no ha encontrado reemplazo, ni aqu¨ª ni en los Oscar. Fallon firm¨® una ceremonia sin brillo, donde el mejor chiste lo hicieron Kirsten Wiig y Steve Carrell contando sus traumas con pel¨ªculas animadas de Disney.?

El momento de enorme tensi¨®n pol¨ªtica e incertidumbre que vive Estados Unidos tras la victoria de Donald Trump en las elecciones tuvo su sitio. Fallon qued¨® muy corto en sus chistes y tuvo que ser Hugh Laurie, premio por la miniserie The night manager, el que diera con el tono exacto: ¡°Este es uno de los ¨²ltimos Globos de Oro¡±, dijo al dar las gracias, ya que ¡°Hollywood, prensa y extranjeros¡± son tres conceptos que tienen poco futuro a partir del 20 de enero. ¡°Incluso el concepto de asociaci¨®n para algunos republicanos¡± es peligroso. Laurie acept¨® el premio ¡°en nombre de todos los billonarios psic¨®patas del mundo¡±.

Pero el momento m¨¢s emocionante de la noche en ese sentido fue el premio honor¨ªfico Cecil B. De Mille a la que es probablemente la mejor actriz viva, Meryl Streep. Si la voz af¨®nica que ten¨ªa al recoger el premio era un truco de actriz, realmente consigui¨® encoger el coraz¨®n de los presentes. ¡°Hollywood, prensa y extranjeros, las tres cosas m¨¢s odiadas ahora mismo¡±, repiti¨®.

Entonces empez¨® a relatar c¨®mo la interpretaci¨®n que m¨¢s le ha impactado este a?o, ¡°no por buena¡±, fue cuando Donald Trump se burl¨® delante de miles de personas en un mitin de un periodista discapacitado, uno de esos momentos de la campa?a en los que no se pod¨ªa creer que pudiera salir indemne. "No me lo puedo quitar de la cabeza", dijo. "La falta de respeto invita a la falta de respeto, la violencia invita a la violencia. Cuando los poderosos utilizan su posici¨®n para atropellar a otros todos perdemos".

De los Globos de Oro de este a?o no sale ninguna pel¨ªcula destacada que no sea La La Land. Hasta las nominaciones de los Oscar, el pr¨®ximo d¨ªa 24, no hay m¨¢s ganador en Hollywood que el propio Hollywood, idealizado por Chazelle, Gosling y Stone.