?Y si ¡®el Guernica¡¯ no es Guernica?

La tesis de Jos¨¦ Mar¨ªa Juarranz, viejo catedr¨¢tico de Instituto e investigador, es que ¡°el Guernica constituye una autobiograf¨ªa de Picasso, sin nada que ver con el bombardeo de la ciudad vasca ni con la guerra.

Catorce a?os ha dedicado este estudioso, becado por el Consejo Superior de Investigaciones Cient¨ªficas y autor de cuatro libros publicados por Akal, a demostrar que Picasso nunca dese¨® realizar una obra pol¨ªtica.

Guernica fue bombardeada el 26 de abril de 1937 y el 1 de mayo hubo una gran manifestaci¨®n en Par¨ªs. Picasso, entretanto, se hallaba en Tremblay-sur Mauldre donde pasaba los fines de semana con Marie Th¨¨r¨¦se Walter y su hija Maya. En ese mismo d¨ªa y el siguiente realiz¨® los estudios preparatorios presentes hasta el fin de la obra y que, seg¨²n Juarranz?en absoluto permiten relacionarlos con la contienda. Y ser¨ªa esto as¨ª porque las alusiones a toro, caballo, mujer de la l¨¢mpara y guerrero se hallan relacionados con su vida personal (¨¦l es el toro; el caballo, el otro sexo). ¡°Yo pinto exactamente igual, a como otras personas que escriben su autobiograf¨ªa¡±. ¡°Si quiero pintar la guerra, pintar¨¦ un arco y una flecha. O una ametralladora¡±.

Ni Picasso era comunista ni estaba involucrado en ideolog¨ªas partidistas. Unas fotograf¨ªas de su pareja, Dora Maar, muestran los primeros bocetos y el abandono de elementos, como el pu?o en alto, que pudieran valer pol¨ªticamente.

Representantes del gobierno espa?ol presidido por Largo Caballero, que hab¨ªa nombrado a Picasso director del Museo del Prado en 1936, le encargaron esta obra para el pabell¨®n espa?ol en la Exposici¨®n Universal de Par¨ªs de 1937. Como consecuencia, alquil¨® el famoso estudio de Grands Augustins donde cupiera un lienzo de 3,50x8 metros.

Empez¨® ensayando con el tema del pintor y su modelo pero lo descart¨® y el asunto definitivo vendr¨ªa a ser, ¡°una s¨ªntesis de su vida y de su obra¡±. ¡°En el Guernica ¨Ccontin¨²a Juarranz- se plasman momentos clave de su vida. El terremoto de Andaluc¨ªa de 1884, el episodio de su divorcio con Olga Koklova, la grave enfermedad de su amante Marie Th¨¦r¨¨se o el dif¨ªcil nacimiento de Maya¡±.

El nombre de ¡°Guernica¡± provendr¨ªa de la exclamaci¨®n que uno de los nacionalistas vascos hizo al visitar su estudio en mayo de 1937 y de su amigo comunista Paul Eluard, autor del poema La Victoria de Guernica. Picasso vio en ello una denominaci¨®n oportuna, tan potente como comercial. Aunque todav¨ªa insistir¨¢: ¡°El Guernica no es una obra de propaganda¡±. S¨ª era, como en los 80 a?os que se conmemoran ahora, una tonante insignia antifascista.

Pero hay todav¨ªa m¨¢s. Numerosos documentos y pruebas gr¨¢ficas consignan que Picasso ¡°nunca quiso explicar el Guernica¡± y el desaf¨ªo de este manuscrito, de casi 400 p¨¢ginas, consiste en el reto investigador de procurarle su verdadero significado.