Los actores se protegen de su resurrecci¨®n digital
La recreaci¨®n por ordenador, exitosa en interpretaciones como la de Peter Cushing en 'Rogue One', abre un profundo debate en Hollywood
Carrie Fisher est¨¢ muerta y enterrada. As¨ª lo confirm¨® un comunicado de Lucasfilm tras el tr¨¢gico e inesperado fallecimiento de la actriz el pasado diciembre. Una nota extra?a pero necesaria, como reconoc¨ªa la compa?¨ªa en la p¨¢gina oficial de Star Wars, dados los rumores que circulaban desde la muerte de la venerada princesa Leia. ¡°Queremos asegurar que Lucasfilm no tiene planes de recrear digitalmente el trabajo de Carrie Fisher como princesa o general Leia Organa¡±, subrayaba la informaci¨®n. Una respuesta que ellos mismos hicieron necesaria con la ¡°resurrecci¨®n¡± digital de Peter Cushing en el papel de Moff Tarkin en Rogue One: Una historia de Star Wars. Como indic¨® la revista Variety nada m¨¢s estrenarse el filme de Gareth Edwards, la presencia del int¨¦rprete brit¨¢nico fallecido hace m¨¢s de 20 a?os marca un antes y un despu¨¦s en Hollywood. Un cambio no s¨®lo desde el punto de vista de los estudios, que pueden incluir en sus castings a actores ya desaparecidos, como desde el punto de vista de los int¨¦rpretes, preocupados por la forma en la que proteger (o perpetuar) el uso de su imagen una vez muertos.
Cushing no es el primer actor recreado digitalmente en Hollywood. Otros vinieron antes de entre los muertos como Paul Walker en Furious 7 cuando el actor falleci¨® antes de concluir el rodaje. O Tupac Shakur en 2012, de nuevo en los escenarios, esta vez del festival musical de Coachella pese a llevar muerto 16 a?os. Pero en la primera ayud¨® el material ya filmado y la colaboraci¨®n de sus dos hermanos, Caleb y Cody, adem¨¢s del deseo de salvar el ¨²ltimo trabajo de Walker y la franquicia que le dio la fama. Y en el segundo caso el rapero volvi¨® a la vida como un holograma, dando un cierto toque on¨ªrico a esta resurrecci¨®n.
No es el caso de Cushing donde su trabajo despu¨¦s de muerto es tan crucial para la trama de Rogue One como el que hizo vivo en 1977 para La guerra de las galaxias Episodio IV. Lucasfilm ha evitado dar demasiados detalles del proceso pero en declaraciones a The New York Times la productora Kiri Hart explic¨® c¨®mo utilizaron el trabajo del actor brit¨¢nico Guy Henry vestido como Cushing e interpretando el papel, transformando su apariencia digitalmente para convertirse en el mismo Moff Tarkin de hace cuatro d¨¦cadas. Un proceso similar al que utilizaron para volver a mostrar en Rogue One el rostro de una Fisher de 19 a?os (en el cuerpo de Ingvild Deila). Pero a pesar del uso innovador de la tecnolog¨ªa existente, Lucasfilms ha querido dejar claro que la recreaci¨®n digital fue algo puntual y por necesidad de guion. ¡°Nos damos cuenta que es un tema delicado¡±, indic¨® la misma productora que record¨® las dificultades t¨¦cnicas y el costo que implica una resurrecci¨®n de este tipo. ¡°No veo a nadie haciendo lo mismo porque s¨ª¡±, a?adi¨®.
Quiz¨¢ no porque s¨ª pero el dineral generado en taquilla por Rogue One es una buena raz¨®n. Tambi¨¦n puede serlo la falta de disponibilidad de un actor comprometido a demasiados proyectos como es el caso de Benedict Cumberbatch y los rumores (que Marvel niega) de que su rostro ha sido recreado en la interpretaci¨®n del actor Aaron Lazar para contar con la presencia del popular Doctor Strange en The Avengers: Infinity War Part One. O las sugerencias a Ben Affleck para que combine su trabajo como director y actor en The Batman con un doble retocado digitalmente con su rostro que le evite ponerse y quitarse el traje de hombre murci¨¦lago.
Las posibilidades son tantas que es l¨®gico que los actores quieran protegerse de esta nueva moda. Algunos como Robin Williams lo vieron venir. El humorista que se suicid¨® en 2014 prohibi¨® el uso comercial de su imagen hasta 2039. Adem¨¢s est¨¢ la llamada ley Lugosi vigente desde 1984 en California. La legislaci¨®n que honra la memoria del legendario Dr¨¢cula otorga a los herederos los derechos para controlar la imagen de la estrella fallecida durante 50 a?os, un plazo que a petici¨®n del sindicato de actores se ampli¨® a 70. Pero eso no detuvo a la viuda de Fred Astaire, Robyn, a la hora de vender la imagen del bailar¨ªn para un anuncio de aspiradoras, un uso que irrit¨® a sus fans y a su hija Ava Astaire por igual.
Seg¨²n declar¨® a la prensa el abogado y agente Mark Roesler, las estrellas est¨¢n cada vez m¨¢s concienciadas de lo importante que es proteger su imagen en el futuro. No se ha dado a conocer si Fisher dej¨® indicaciones en su testamento sobre la utilizaci¨®n de su imagen despu¨¦s de muerta. En el caso de Cushing, el actor brit¨¢nico ni tan siquiera estaba protegido por la legislaci¨®n californiana al haber fallecido en el Reino Unido. Pero un representante de Lucasfilm asegur¨® que se pidieron los permisos pertinentes a sus herederos. De hecho, su secretaria y ejecutora de su legado, Joyce Broughton, no pudo contener la emoci¨®n cuando volvi¨® a ver al actor vivo en la pantalla. ¡°Tras conocerle durante 35 a?os, ?qu¨¦ pod¨ªas esperar?¡±, declar¨® tras el estreno londinense.
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